Me hizo el amor delicioso, fue mi noche perfecta

Por privacidad no dire mi nombre, solo mencionare que soy una mujer un tanto madurita tengo treinta y siete años de edad, madre soltera y muy trabajadora. Soy blanca, poseo cabello lacio y largo color negro, mis ojos son cafes obscuros, poseo unos sensuales labios que me gusta decorarmelos con labial rojo casi siempre y una mirada alegre y coqueta. Gracias a mi vida saludable y al ejercicio luzco un cuerpo esbelto, un cuerpo respetable e incluso hasta conservo mi sensualidad natural de mujer, gozo de unas piernas bien cuidadas y unas nalgas apetecibles o por lo menos eso me han dicho los hombres. Bien.. Mencionare que soy madre soltera desde hace ya unos cuatro años, mi ex esposo el padre mi mi hija se habia convertido en todo un patan, cuando nos casamos no era asi pero al paso del tiempo empezo a tomar, a emborracharse, a hacerme infiel y hasta en un par de ocasiones intento golpearme a mi a nuestra hija, fue por eso que de inmediato me divorcie de el, en ese entonces mi hijita tenia 3 años, ahora tiene siete y la verdad no extraña a su padre pese a que se dio cuenta como era y yo pues menos lo hecho de menos, desde que nos divorciamos ni se ha dignado en visitar a su hija o preguntar por ella tan siquiera por telefono y la verdad ni quiero que lo haga. Yo sola he aprendido a salir adelante gracias a que soy maestra de escuela secundaria, doy clases de historia en una escuela publica y pues gracias a mi profesion he logrado sacar adelante a mi tesoro que es lo mas importante en mi vida. Y pues en mi vida intima dire que tampoco hecho de menos a mi ex, con el solamente habia tenido relaciones y desde que nos divorciamos les confieso que ningun hombre me habia vuelto a coger.

Durante estos ultimos cuatro años me habia dedicado al trabajo a hacer ama de casa y no me habia dado mi tiempo para andar en una relacion y ni menos para tener sexo con algun hombre, la verdad no se me hacia dificil pues para mi el sexo no es una prioridad en mi vida aunque si debo confesar que algunos noche de solteria me habia sentido cachonda y con ganas de un buen pene en mi vagina pero masturbandome yo misma lograba controlar esos escasos momentos de calentura, la verdad ni pensaba volver a conocer un hombre y de no ser por mis locas amigas que me presentaron a un par de galanes no hubiera vuelto a estar en una relacion. De alguna manera el que estuviera sola a mis amigas mas cercanas no les parecio saludable asi que un fin de semana que salimos a cenar me presentaron a dos hombres de mi edad muy atractivos ambos pero sin duda quien mas me fascino fue Enrique, un divorciado igual que yo de unos treinta y nueve años, cuerpo atletico y varonil, ojos lindos y una barba muy varonil que lo hacia ver muy sensual. Pero a pesar de su atractivo fisico lo que me gusto mas de el es su caballerosidad y sensatez de hombre maduro, la forma en la que hablaba y me alagaba me impresiono muchiisimo. A partir de ese dia nos empezamos a ver con frecuencia, primeros nos hicimos buenos amigos hasta que al pasar las semanas luego los meses, decidimos estar en una relacion, es un caballero tan romantico y detallista como los hay pocos, siempre tiene hermosas palabras y es muy romantico, ademas de ser profesional igual que yo, el es abogado. La verdad estaba nuevamente enamorada de un hombre que era el, les confieso que en un par de ocasiones ya me tocaba y acababa pensando en el y fantaseando en el momento que me hiciera el amor, pero como el es todo un cabellero no como otros que a las pocas veces se llevan a las mujeres a la cama, no Enrique le importaba mas el romanticismo, ya teniamos dos meses y no me habia pedido sexo aun.

No la primera vez que hicimos el amor fue una noche no planeada, ni pensaba que esa noche me haria suya en mi propia casa, pero las cosas se dieron de imprevisto y pues como dicen las cosas de imprevisto saben mas ricas y asi fue. Esa noche de jueves, eran poco mas de las 11 de la noche, mi hija ya se habia ido a dormir pero yo como tenia trabajo aun permanecia despierta trabajando en mi computadora. Esa noche estaba vestida con una blusa negra un poco escotada, tenia puesta una falda floreada negra y portaba unas zapatillas negras, en cuanto estaba apagando mi computadora para irme a dormir sono el tiembre, la mayor de mi sorpresa que era mi amado Enrique, me habia traido un ramo de rosas y una botella de shampan, lo pase a la sala, ambos nos pusimos a ver un poco de televison mientras hablabamos de muchas cosas, al principio sin sentido pero despues nos volvimos mas romanticos, nos besamos muy apasionadamente y sin duda tambien la champan nos estaba poniendo calientes, poco a poco nuestras caricicias iban subiendo mas y mas de tono, llego el momento en que el inicio a tocarme deliciosamente mis senos y luego los chupaba bien rico, sin duda ambos estabamos bien prendidos y ahi fue cuando pense que ese seria el momento en el que seria yo suya. En ese momento fue cuando ya no se contuvo mas y me dijo muy despacio al oido Quiero hacerte el amor! No espero mas el mismo tomo mi falda, me la subio totalmente, separo mis piernas y asi sentada en el sofa de la sala el se encogio delante de mi, introdujo su cabeza entre mis piernas y comenzo a chuparme mi vagina sobre mis calzones, a pesar de la tela de mis bragas podia sentir perfectamente su respiracion tibia y su lengua, el removio mis calzones y ahi pudo contemplar mi vagina por primera vez, como loco me chupaba mis labios vaginales, yo estaba muerta de placer, despues de cuatro años por fin estaba volviendome a sentir mujer y a estar disfrutando del sexo, sin embargo lo unico que me preocupaba es que mi hija no estuviera bien dormida y viniera a la sala a ver a su madre a punto de tener sexo. Pero esto no fue suficiente para detenernos pues las ganas eran mayores. Fueron minutos de gloria e inmenso placer, el era un experto, me metia sus dedos con delicadeza y perfeccion que el placer era incontenible, deseaba gritar como loca de placer pero tenia que contenerme.

Enrique se puso de pie y se desnudo completamente ante mi, por fin pude apreciar su delicioso pene bien robusto y carnoso de unos 14 o 15 cm. Mas u menos, el se iba a poner un condon pero yo le dije que no, en ese momento yo misma me quite completamente mis bragas, separe mis piernas totalmente y me recoste en el sofa completamente dispuesta a el. Tomo su mienbro y lo coloco en mi vulva y gracias a que mi vagina ya estaba mas que bien lubricada al menor esfuerzo me la metio toda hasta dentro, no saben lo rico que senti, toque el cielo en ese momento maravilloso, me chupaba los labios de placer, el se movia bien rico dentro de mi y con cada embestida me hacia gemir de gozo. Sin duda era una perfecta noche se pasion y aun mas rico fue el momento en que senti claramente como se vino dentro de mi, llenandome mi vagina de todo ese liquido caliente que me hizo ver estrellas, al momento de que saco su pene de mi vagina todo mi escurrio, el tomo de su pantalon un pañuelo de tela y limpio con el mi vagina, ambos nos mirabamos a los ojos bien enamorados y con ese brillo especial que provoca hacer el amor, sin duda fue maravilloso, ahora continuamos entregandonos mutuamente y espero que nuestra relacion en algun momento no muy lejano pueda formalizarase en matrimonio y asi pueda volver a ser feliz una segunda vez.