Mereció la pena

Los dos somos casados pero un buen revolcón nunca está de más .
Aquella tarde le di un anticipo y nos quedamos media hora más en su despacho .
Lo que ocurrió allí me vino de perlas para dejar claro algo .
Sexo y nada más . Claro claro dijo él.
Y a la semana siguiente mi marido tenía una semana de viaje completo y la casa vacía .
Le propuse tener encuentros en mi casa y aceptó.
Lllegado ya el momento los nervios afloraron pero la pasión pudo más .
Directamente al talego y que ocurriera lo que ocurrió .
Besos con pasión , achuchones y ñacañaca.
No recuerdo el tiempo pero más de una hora .
Paramos , tomamos algo los dos desnudos y lamiéndonos de gusto .
Nos quedaban seis días más y había que dejar algo .
Nos despedimos con beso con saliva .
El resto de los días podéis imaginar lo que ocurrió .
Y llegó mi maridito y las sábanas estaban en la lavadora y venía cachondo .
Encima del colchón me dió un revolcón y la pasión no era igual .
No sé si el morbo del jefe o bien otra razón pero fue distinto.