Sigo con mis historias, les recomiendo leer mis anteriores relatos para entender la continuidad de mi despertar sexual http://www.eliterelatos.com/relatos/eroticos/ficha/mi-despertar-sexual-11526.html
http://www.eliterelatos.com/relatos/eroticos/ficha/mi-despertar-sexual-2-11401.html
Relato
III
Al día siguiente tuve que ir a trabajar, me levante tarde y desvelado, tanto por haber llegado tarde como por que después de acostarme no pude conciliar el sueño pensado en lo que había pasado, sabía que socialmente estaba mal, yo era hombre y me gustaban las mujeres, pero no podía negar que me había encantado lo que me había hecho este señor que por cierto se llamaba Carlos, tuve que masturbarme antes de dormirme recordando las sensaciones recién descubiertas.
Pase todo el día atareado en mi trabajo y llego un momento donde ya no me recordé de lo pasado la noche anterior, alrededor de las 6 de la tarde sentí que alguien me llamaba a mis espaldas y oh sorpresa, Carlos estaba ahí, comprando en el supermercado, me saludo y me pregunto a qué hora salía, le dije que no tenía hora fija pero que si quería nos podíamos juntar en el local de máquinas electrónicas más tarde, a lo que él estuvo de acuerdo. Salí alrededor de las 8 de la noche, ya que como era época de fin de año, la tienda se llenaba y tenía mucha clientela de gente que pasaba luego de sus trabajos, me dirigí hacia el centro comercial con indecisión, no sabía si era correcto y tampoco si era confiable el tal Carlos, la noche anterior no me había pasado nada, pero ya sin cervezas en la cabeza ya lo pensaba más de dos veces.
Lo encontré en el mismo lugar y nos saludamos cordialmente, charlamos como dos buenos amigos, a pesar de la diferencia de edad, congeniamos muy bien. Me invito a comer y nos fuimos a un restaurante de hamburguesas que estaba cerca del centro comercial. Platicamos un buen rato y me volvió a repetir lo de la noche anterior:
-yo no te quiero forzar a nada, si no quieres que pase nada podemos salir como amigos y nada más –
Le conteste:
- yo no soy hueco (homosexual en mi país), tengo novia y la verdad me caes muy bien, si no te molesta que salgamos sin ningún compromiso de otro tipo, está bien para mí, por cierto no tengo 16 años si no 13.
Se mostró sorprendido y me contesto que no había problema y que de verdad parecía más grande de la edad que tenía, pero que respetaba mis deseos.
Así que luego de comer me encamino a mi casa, sin pasar nada. En los días siguientes me sorprendió un par de veces al estarme esperando por fuera de mi trabajo y luego íbamos a comer y me llevaba a mi casa, nada de insinuaciones ni nada por el estilo. Para navidad llego a mi casa y se presentó con mis papás como un proveedor del supermercado, esto no era del todo mentira, un tío de Carlos había fallecido y él estaba liquidando toda la mercadería que había en una bodega, por lo que si le llego a vender algo al supermercado, yo tenía un hermano mayor que por esa época también se había quedado sin trabajo y Carlos le ofreció mercadería para que la vendiera, así que las posibles dudas que pudieron tener mis padres con respecto a él se disiparon con estas acciones. En nuestro país, se acostumbra que la navidad se pasa en casa pero la festividad de Año Nuevo la puedes pasar en la calle o la casa de algún vecino que tenga fiesta, no te dicen nada si no llegas a dormir, y pues esto aprovecho Carlos para invitarme a salir para fin de año, yo me resistía todavía, pero Carlos invito también a mi hermano y bueno dije yo, si estamos ambos seguro que no intentara nada, así que acepte.
Me regalo una mudada de ropa y me pidió que la estrenara esa noche, nada del otro mundo, un jeans de marca y una camisa, llego por nosotros como a las 7:30 de la noche y nos dirigimos a una ciudad colonial que está a 45 minutos de la donde nosotros vivíamos. Fuimos a una discoteca situada dentro de un hotel 5 estrellas, nunca había entrado a un lugar así, eran lujos que no podíamos darnos nosotros, la discoteca estaba con bastante gente y nos preguntó si tomábamos cerveza a lo que ambos dijimos que sí.
La velada transcurrió de los más tranquilos, brindis aquí, brindis allá y a las 12 de la noche la gran algarabía por recibir un nuevo año. No sé qué cantidad de cerveza nos tomamos y no sé si ya lo tenía planificado, pero ya de madrugada estábamos bastante tomados los tres, nos preguntó si no había problema en que nos quedáramos a dormir en el hotel, porque se sentía muy tomado para manejar y total ya habíamos pedido permiso para no llegar a nuestra casa, acepte confiado en que como mi hermano estaba allí no pasaría nada. Pago y nos llevaron a una habitación doble, les repito no estábamos acostumbrados a estos lujos, así que dentro de mí me sentía alagado que alguien gastara tanto en mí. Mi hermano se acostó de lado en la cama que estaba pegada a la pared y viendo hacia ella, en poco tiempo se quedó dormido con la ropa puesta.
Nosotros nos quedamos un rato más tomando ya que había pedido más cerveza para la habitación, en un momento dado, decidimos acostarnos, me acosté al lado de mi hermano y Carlos se quedaría en la otra cama. La habitación tenía en las ventanas doble cortina, para que la obscuridad fuera total y no se filtrara ningún rayo de luz si no se querían levantar los huéspedes. Pasaron unos minutos y Carlos estaba en el baño, yo me quite únicamente los zapatos y empecé a dormirme, cuando salió, estaba solamente en calzoncillo, lo pude observar por un instante haciéndome el dormido, tenía más o menos 38 años, no era alto pero tampoco era bajo, tenía marcado su abdomen así como sus pechos, como que hacia algún tipo de ejercicio, tenía vello en el pecho y como les decía vestía un calzoncillo tipo bikini, que marcaba su miembro parcialmente erecto.
Mis sentimientos eran encontrados, por un lado me excitaba verlo y tenia deseos de estar con él, por otro lado me sentía mal por estar deseando a otro hombre y máxime deseando estar con el cuándo mi hermano estaba a mi lado dormido. Apago la luz y se acostó en la otra cama, pasaron unos minutos que sonaron a eternidad y en un instante alargo su brazo para acariciarme, supongo que la separación entre ambas camas, no era demasiado porque logro tocarme mi cara, no lo separe, con delicadeza paso sus dedos por mis labios y en voz muy baja me pidió que me acercara a él, miles de pensamientos pasaron por mi mente en un instante, pero pudo más mi “calentura” (ahora que lo pienso creo que me estaba enamorando de él, era especial conmigo, me invitaba y me trataba y tenía atenciones como nadie lo había hecho) y sin medir las consecuencias me baje de mi cama y me pase a la de él.
Muchos detalles probablemente no los recuerdo con fidelidad pero tratare de ser lo más explícito posible, me acosté a su lado y me empezó a besar cariñosamente en la boca, creo que esta vez influenciado por la cantidad de cervezas tomadas si le correspondí, olía delicioso, era una mezcla entre perfume fino de hombre, sudor y olor a cerveza, sentía su lengua hurgar dentro de mi boca y me excitaba el roce de su bigote y su barba a medio crecer, yo era un preadolescente que no tenía mucho vello púbico y mucho menos bigote o barba, me empezó a quitar la ropa, principiando por la camisa, sentir su piel desnuda contra la mía me hizo estremecerme de la excitación, sentía sus pezones duros y parados contra mi pecho mientras me besaba con delicadeza y sin parar, mis labios mmmm…..así como mi cuello y mis orejas, fue bajando y cuando beso y chupeteo mis pezones no pude dejar de escapar un gemido de placer (sigue siendo uno de mis puntos más débiles) que sensación más agradable, volteaba a ver a la cama donde reposaba mi hermano mas era en balde porque debido al cierre de las cortinas la obscuridad era total, desabrocho mis pantalones y poco a poco los fue bajando, en un momento dado sentí el roce de su pene en mi muslo y me estremecí de la emoción, no podía creer que me emocionara sentir el pene de otro hombre!!!!!
Me quito mis pantalones y me hizo subirme sobre él, me acariciaba mi espalda con su grandes y masculinas manos y las metía por debajo de mi calzoncillo acariciando y estrujando mis nalgas, siempre alerta para que no me tocara mí ano, nadie me había tocado así, me sentía excitado, mi pene trataba de escapar de su prisión y emitía fluidos mojando el abdomen de mi amante, su pene lo sentía rozar mi abdomen y me excitaba sentir ese trozo de carne también tratando de abrirse paso para salir de su escondite.
Rodamos sobre la cama y me quito mi calzoncillo quedando totalmente desnudo, mi embriaguez hacia que no pensara en nada más que satisfacer mis deseos, seguía besando mis pezones y yo me retorcía de placer cada vez que lo hacía, bajo y me beso mis abdomen hasta llegar a mi pene que estaba en su máxima expresión, era un pene normal, unos 15 cms de largo y algo gordo, lo empezó a lamer desde el glande hasta su base, lo lamia, lo chupaba, lo succionaba teniendo cuidado de no lastimarme con sus dientes, yo estaba acostado de espaldas a la cabecera de la cama, con las piernas recogidas y el en medio de mi succionando cada centímetro de mi pene, con una mano acariciaba la base del pene y me apretaba suavemente los testículos y con la otra me metía un dedo en mi boca que yo con placer lo chupaba, luego con el mismo dedo húmedo me acariciaba mis pezones, en verdad eran sensaciones no conocidas para mí, yo mientras tanto trataba de acariciarlo sin llegar a tocar su pene que solo lo sentía rozar mi piel todavía dentro de su bikini, le sobaba la cabeza y la hundía más y más en el área de mi perineo, no era algo que ya hubiese probado, pero cada vez que pasaba su lengua más abajo más excitado me sentía, creo que a esa edad con solo una chupada uno acaba, pero también debido a mi estado de embriaguez creo que mis emociones se intensificaban y también se retardaban.
Llego un momento donde sentí rozar su lengua en mi agujero, oh mi Dios!!!!!!!, que sensación, nunca pensé que ese lugar pudiera producir tanto placer, creo que Carlos lo sintió, ya que subía hasta mi pene y luego bajaba con la lengua cada vez tratando de llegar más lejos, yo por mi parte solo trataba de levantar mis nalgas lo más posible para facilitarle su llegada, le empujaba más y más su cabeza tratando que no regresara y que se quedara lamiendo mi orificio …….hasta que lo logre!!!!!!
Carlos me devoraba mi orificio como que fuera mi boca, lo lamia y trataba de penetrarme con la lengua mientras una mano me masturbaba y la otra me acariciaba y me pellizcaba mis pezones, eran sensaciones indescriptibles para mí. No sé cuánto tiempo paso haciéndolo, fue una eternidad deliciosa, sentía mi agujero dilatarse por la entrada de la lengua dentro de mí, los sonidos de chupeteo y de gemido se oían por todo el cuarto, no sé si en algún momento mi hermano los escucho o estaba totalmente adormecido por las cervezas, pero no nos importó su presencia, me devoraba cada centímetro de mi cuerpo y yo me revolvía en la cama con cada caricia que me daba, luego de cierto tiempo sentí como subía mis piernas y las ponía en sus hombros para facilitar su labor, mi orificio estaba totalmente a su disposición, fue elevándose hasta que quedo completamente sobre mí, no paraba de besar mis pezones y me los lamia mientras empecé a sentir su trozo de carne totalmente desnudo rozando mi ano, se había quitado su bikini, me asuste y trate de zafarme, sin embargo, me beso con ternura los labios y acercándose a mi oreja me beso y me dijo que me amaba y que era la cosita más rica que había podido comerse, que no me preocupara que no iba a hacer nada de lo cual yo no estuviera de acuerdo, sus besos y sus caricias me tranquilizaron y mi excitación aumentaba cada vez que su glande rozaba mi culo totalmente dispuesto y dilatado, los restos de saliva y su liquido pre seminal que me mojaba facilitaban su labor y su pene se deslizaba por toda mi raya trasera, no me importo sentirme hembra en ese momento, alternaba sus besos por mis labios, succionaba mi lengua, mis orejas, mi cuello, mis pezones, con cada rozón de su barba me hacía estremecer de placer, su glande rozaba mi agujero y en un momento dado lo coloco en posición y diciéndome palabra bellas al oído me empezó a penetrar, muchos dicen que se siente un dolor extremo, yo no lo sentí, por lo menos esa vez, creo que mi calentura, más la dilatada extrema que me había dado con el beso negro, más la correcta lubricación con su liquido pre seminal, cumplieron su función, primero sentí la entrada de su glande, tenía un pene normal similar al mío, cabezón no circuncidado que cuando traspaso la primera barrera se quedó quieto esperando mi reacción, yo no tenía palabras ni fuerzas para rechazarlo, me encontraba totalmente excitado y sentía la cosa más sabrosa sentirme penetrado por Carlos, con cada beso que me daba en mis pezones yo levantaba cada vez más mi culo facilitando su penetración, lentamente y sin brusquedad fue introduciendo su rico, erecto y venoso miembro hasta que sentí sus testículos pegar con mis nalgas, sus vellos púbicos rozaban mi piel, me estremecía y me gustaba, empezó el mete y saca de una manera lenta sin dejar de acariciarme todo, era increíble, el homosexual se había convertido en el hombre de la relación, no me importaba solo me importaba saciar esa sensación de placer que se intensificaba cada vez que movía su mástil dentro de mí, no sé cuánto tiempo paso penetrándome, yo lo abrazaba, le acariciaba sus duros pectorales y lamia sus pezones (a todos nos gustara y excitara que nos besen los pezones?) Sentía sus brazos musculosos alrededor de mí, me gustaba!!!!!! Estaba fuera de mí, lo que si se es que en algún momento no pude más y sin necesidad de masturbarme eyacule en mi abdomen tirando chorros de semen por todos lados, me moje mi cara, mi pelo, el abdomen de Carlos, mientras él seguía su mete y saca, sentía sus testículos pegar a mis nalgas, sus vellos púbicos rozaban mi piel y me estremecían a cada momento logrando que me eyaculación fuera la mayor que había tenido hasta ese momento, no quería que terminara nunca esa sensación estaba totalmente extasiado y con los ojos cerrados sintiendo que su pene llenaba todo mi orificio, acelero sus movimientos y sentí que su miembro se hinchaba más de lo que ya estaba hasta que finalmente lleno mi orificio con su eyaculación mientras yo mordisqueaba sus pezones, sentir que me llenaba su leche mi culo es una sensación única que aun ahora al recordarlo me excita y la recuerdo como que fuera en este momento.
Nuestros gemidos fueron cesando poco a poco mientras su miembro iba disminuyendo de tamaño y salía de mi agujero, su leche corría por mis nalgas haciéndome sentir empapado de sus fluidos, mientras nos relajábamos y caíamos rendidos y exhaustos uno al lado del otro sin mencionar una palabra mientras Carlos me besaba y recogía con su boca todo el semen por mi eyaculado, con cada lamida me enamoraba más de él, me limpio todo mi cuerpo y me acariciaba mi agujero sin que yo pusiera ninguna resistencia, sentía un bienestar que pocas veces he vuelto a sentir, nos abrazamos como dos amantes hasta que me levante y fui al baño, vacié mis intestinos de caca así como de la leche que me había llenado, me daba vergüenza pero él me tranquilizo me dijo que era normal, que pronto ya no tendría molestias, regrese al cuarto, me puse mi ropa interior y me acosté al lado de mi hermano quedándome dormido casi de inmediato.
Espero no haberlos aburrido con tantos detalles, Carlos se convirtió en mi amante durante varios años, creo que llevamos una relación tipo noviazgo, durante casi toda la relación no volví a permitir que me penetrara, inclusive creo que a pesar de que tuvimos muchas experiencias que si están dispuestos a leer en un futuro las contare, fui egoísta en muchos momentos y no lo complací como el quería, mucho tiempo después terminamos y después de terminar obtuvo mucho más de mí que durante toda la relación.
Mi hermano falleció unos años después en un accidente de carro, nunca me recrimino o me dijo algo con respecto a esa noche, a pesar que con el correr del tiempo se enteró de la preferencia sexual de Carlos.
Hasta
acá termina la tercera parte de mi relato, espero que lo comenten y que les guste para seguirles contando más de mi despertar sexual.
Si me quieren escribir mi correo es rrudolf2@yahoo.com
Entramos al cuarto y empezó todo, él me tomó por detrás y empezó a tocar mis nalgas y me susurraba cosas al oído: ¡eres una puta q aprenderá de mí!, ¡eres mi perra! Y yo se lo confirmaba le dije q seria su perra, el me volteo y quedamos frente a frente, y acercó su boca a la mía, pero mas q besarme su lengua paseaba por mi boca.
Relato erótico enviado por Putitacachonda el 29 de December de 2009 a las 23:34:17 - Relato porno leído 140396 veces
Aventuras en Paris
Jesús y Pablo marcharon a Paris para poder vender el video. Dejaron a sus tres amigos en una casa que habían alquilado en un pueblo muy pequeño en Huesca. Los dos habían quedado con Pierre, un ejecutivo muy interesado en esta clase de material.
Relato erótico enviado por mena55 el 24 de August de 2008 a las 13:55:00 - Relato porno leído 114059 veces
Si te ha gustado Mi despertar sexual III vótalo y deja tus comentarios ya que esto anima a los escritores a seguir publicando sus obras.
Por eso dedica 30 segundos a valorar Mi despertar sexual III.
rrudolf2
te lo agradecerá.
Comentarios enviados para este relato
facundo2
(26 de October de 2014 a las 23:36) dice:
hacenos el relato de la cuarta parte.....me encanto como te dieron por el culo y quiero saber mas katebrown
(18 de October de 2022 a las 20:32) dice:
SEX? GOODGIRLS.CF
Registrate
y se el primero en realizar un comentario sobre el relato Mi despertar sexual III.
Vota el relato el relato "Mi despertar sexual III" o agrégalo a tus favoritos