Mi exmarido se dio el gusto

Si desean conocer como llegue a serlo lean al final de la historia. Deseo contarles como fue mi primera sita como prostituta de mi exmarido. Siempre me trato dulcemente y no savia que el tenia esta otra cara de su forma de ser, pero en fin, la verdad es que estoy muy excitada y cada vez que me acuerdo un calor sube por mi espalda y desde mi vientre hacia mi cara, hasta estallar en mi cabeza como un volcán ardiendo. Por ello primero voy a contar como fue esa sita y luego como llegue a esta situación…
Salio del baño, solo con su boxer puesto y tiro sobre la mesita del luz unos billetes, “—completo me dijo..!” entonces le respondí “Sabes que yo…, nunca lo hice por hay y que toda las veces que lo intentamos me dolió mucho y nunca pudimos…” es que sin mentir la tiene bastante gorda, no muy larga diría que normal, pero el ancho asusta hasta a la mas decidida.
“—ya pague a si es que cállate y bríndame el servicio como corresponde, no hay vuelta atrás” me dijo, mientras me tomaba de la mano y suavemente me doblo el brazo, hasta que mi espalda quedo apoyada contra su pecho y entonces me dijo al oído “—siempre te quise romper ese ojete virgen… esta es mi oportunidad putita y no la voy a dejar pasar…”
Mis tetas saltaron hacia su libertad cuando de un tirón arranco los botones de mi camisa y levanto mi sostén hasta mi cuello. Mientras permanecía con su cuerpo apoyado a mi espalda y me mantenía abrazada con fuerza con su otra mano acariciaba y apretaba mis tetas, que no son nada muy pequeñas, me las apretaba con fuerza y algunos gemidos y pequeños grititos salieron de mi garganta, que no pude controlar. “te gusta sorra de mierda, tirate en la cama que te voy a comer esas semejantes tetas hasta dejártelas lisas..” me empujo a la cama termino de desvestirme y solo quede con una pequeña tanguita, que apenas alcanzaba para cubrir nada.
Cuando el vio mi tanguita blanca solo dijo “ – que puta que sos, y nunca me di cuenta…” y esbozo una muy corta sonrisa.
Me chupa las tetas y me las estruja y aprieta mis pezones entre sus labio, las toma por momento a las dos juntas y se lleva mis dos pezones juntos a la boca y succiona con fuerza, pasa su lengua desde la base de mis tetas hasta hacer cumbre en mis redondos, rojos y encendidos pezones, los cuales ya no pueden mas del dolor que me generan de tan duros que esta.
Estoy súperexcitada, ya no soy dueña ni tengo control sobre mi mente, que vuela, mi cuerpo se esta retorciendo y moviendo solo, los impulsos son involuntarios, solo mis manos aprietan mas su cabeza contra mis pechos. Siento como una de sus manos se desliza hacia abajo y se introduce entre mi vulva la pequeña tela que la cubre, siento un fuerte tiran que obliga al hilo que tengo metido en mi cola a ceder y rasgarse hasta quedar convertido en una hilacha. Mi conchita no tiene necesidad de ser lubricada, ya esta convertida en un charco, pero igualmente el se desliza por todo mi cuerpo y deja caer su lengua a mi interior pasando entre mis labios vaginales. El rose de su lengua contra mi clítoris, hace que me salgan fluidos, que pasan directamente dentro de su boca, los cuales devora frenéticamente.
“—hay… hayyyy… hijo de puta, porque nunca me la chupaste así?”, “si me hubieses dejado esto te hubiese pasado a cada rato…” “—Hayy… Hayy..! no puedo mas metemela por favor metemela, no puedo mas mi amor hayyyyy hayyyyy….”
Se levanto y me tiro hasta el costado de la cama, mis piernas quedaros, hacia arriba y mis pies apoyados contra su pecho a la altura de sus hombros, se termino de sacar el boxer y pude ver que llevaba su pene depilado, se veía muy bonito y suave, sin sus vellos es mas gorda todavía y por mi mente paso un pensamiento que me calentó mas aun, el darme cuenta que toda esa pija me deseaba, y me seguía deseando aun después de todo lo vivido. Me lleno de miedo saber que en breve tendría eso empujando, tratando de abrir mi ano. Me propuse hacerlo terminar antes de llegar a esa instancia.
Tome con mi mano, su pene, que estaba latiendo con fuerza y parecía que deseaba explotar de un momento a otro, me lo lleve a mi entrada, entre mis labios vaginales, que estaban brillante de tanto fluido, lo pase suavemente por todo mi alrededor, haciendo rozar la cabeza de su pene contra mis labios vaginales, lo conduje al medio y me entregué para ser penetrada. El maldito lo hizo con tanta violencia, que me dolió hasta el estomago, yo no esperaba que lo hiciera así, pues siempre me introducía su miembro tan suave y despacito que ni lo sentía cunado entraba.
“--te voy a culiar, como nunca puta de mierda, te vas acordar hasta de cuando naciste, de la voy a dejar a la miseria, hija de puta, ya te voy a dar me voy a vivir mi vida…” Se movía a mil por hora, mis tetas se agitaban y golpeaban en mi cuello y regresaban abajo y otra vez arriba y así, la concha parecía que se me daba vueltas hacia fuera, su pene me llegaba hasta el fondo, muy muy adentro, me producía dolor y salía rápidamente hasta que su glande se asomaba, para otra ves abrirse paso hacia adentro, mi repiracion se altero y me costaba producir una palabra, “ hayyy… me … hay encan…hayyy..ta hummm hayyy… si dale hummm dale hay…, me estas reventando hayyyyyy…. Hayyyyyy te lo pido…. Haaaaa haaaaa paraaaa paraaaa hayyyyy…” me estaba matando y se daba cuenta y mas lo disfrutaba y peor, mas duro me daba.
Sentí como la pija se le puso muy dura y recta, era el momento justo, pensé aquí me tira todo y ya esta. Para este momento yo ya me avía corrido como dos veces y esperaba su lechita para llegar una vez mas. Pero no paso, se detuvo en el instante justo que yo llega a mi clímax y la dejo adentro asegurándose que llegue bien. “ – te gusto?” me pregunto con una suave sonrisa en su rostro, como lo savia hacer en nuestros tiempos de novio. Tuve que admitir que si porque era la verdad.
Me giro en la cama de tal forma que quede arrodillada en el piso y mi estomago y pecho contra la cama, mi cola quedo a su alcance y el agujerito de mi ano a su disposición. “no mi amor por favor te lo pido, no me obligues, sabes que me duele mucho…” y comencé a llorar, pero mis lagrimas y llanto cayeron en saco roto, tan roto como me dejo mi adolorido culo. Se arrodillo atrás mió y me chupo mi conchita nuevamente mientras sus dedos se introducían suavemente a mi ano, recorrió en círculos mi redondo esfínter y luego de apoco fue introduciendo uno y otro dedo. Con un lubricante que desconocía que guardaba se mojo todos sus dedos, miembro y la entrada de mi colita. Se paro colocando sus pies a mis costado y apoyo su pijota en mi entrada, doblo las rodillas para bajar al mismo tiempo que hacia fuerza para abrirse paso. Pude sentir como su engordado glande separaba mi entrada y sus manos mantenían mis nalgas totalmente hacia los costados. Luego de unos segundos interminables sentí que mi esfínter se relajaba apenas un poquito, el ya estaba adentro. Mis lágrimas mojaban la cama, junto con la saliva que salían de mi boca abierta. “—no puedo mas amor… vasta te lo pido te lo pido, me duele me duele mucho por favor no sigas… ya te distes el gusto de meterla sácala, porfa sácala” pero mis lagrimas y ruego no fueron escuchados. Yo tenia mis manos debajo de mis tetas y serraba fuerte mis puños, hasta que se me clavaban las uñas en la palma de mis manos. Después de un breve momento en que se quedo inmóvil, comenzó a introducirlo todo, hasta que pude sentir sus testículos apoyados a la entrada de mi cola, ya que ni mis nalgas separadas podían frenar aquel empuje. Despacito y con mucha suavidad inicio su meno con un mete y saca, que me llevo a las nubes, como el me lo avía prometido muchos años atrás que me llevaría por hacer esto, yo nunca había querido probar y tenia mucho miedo. El dolor fue cediendo y mi placer creciendo, pude sentir como mis ovarios, eran excitados por un delicado rose y como su mano jugueteaba en mi clítoris, eso es algo indescriptible. Acabe al fin como quería en una corrida descomunal, que me estremeció a mí y le pase la vibración a el que pudo sentirlo “ bueno… bueno que te paso?”. En ese instante la saco y sin pensarlo me di vueltas sobre mis rodillas y abrí mi boca, un chorrazo de semen muy caliente se introdujo hasta mi garganta, obligándome a serrarla, el resto quedo en mis labio y tetas. Lo masturbe un ratito mas hasta que no le quedo rastros de su leche y ya sentí que se desmayaba de tanto gusto.
Me fui al baño, en el vide me eche mucho agua en mi colita, en la cual podía sentir que mi dedo entraba muy fácilmente, me vestí, tome el dinero de la mesita de luz lo salude con un beso y le dije… “si necesitas otro trabajo, ya conoces mi costo y servicio, chau mi amor”
Si quieren saber como llegué a ser la prosti de mi exmarido aquí les cuento, me case muy joven, a los dieciocho años, y embarazada de dos meses. Mi vida paso de ser ordenada por mi padre a ser gobernada por mi marido e hijos. Durante varios años aguante, hasta que decidí independizarme, conseguí trabajo y me alquile mi departamento, ya que mis hijos decidieron quedarse a vivir con su padre. Paso el tiempo y mi sed de dinero fue en aumento debido a deudas que fui adquiriendo, ya que nunca tuve buen control de la administración de mi dinero y mucho menos cuando solo el la proveía. A sí es que después de separada y al poco tiempo comencé a pedirle dinero prestado o como sea, hasta que un día me dijo o te lo ganas o me devolves lo que ya te preste… obviamente tuve que ganármelo.
La cola me dolió durante algunas horas y en el micro tuve que viajar parada, pero el placer fue inmenso, mucho mas grande que mi dolor, esto paso hace solo dos días y estoy esperando que suene mi teléfono y el, mi único cliente y ex marido, solicite mi servicio.

Belu (así él me llama)