Mi hermosa cuñada (parte 2)

Mi hermosa cuñada (parte 2)

Al otro día llegue un poco tarde a la agencia, rápidamente busque con la vista a María para ver si había llegado, no la vi en la entrada y rápidamente me dirijo a mi oficina, cuando abro la puerta veo a Raúl recargado en un escritorio abrazando a María con sus dos manos, y dándose un beso, en cuanto me vieron  inmediatamente se sueltan, Raúl me saluda y se va a trabajar y María hace lo mismo, no puedo negar que me dio mucho coraje verlos así.

Nadie de ellos sabe que tengo cámaras escondidas en diferentes partes de la agencia, y cuando fue la hora de la comida me dispuse a revisar la cámara de mi oficina, vi como llego María y minutos después entro Raúl, comenzaron a platicar de los problemas con su ex de mi cuñada, ella comenzaba a llorar un poco y fue cuando Raúl la abrazo y le dijo que le gustaba mucho desde que la vio, que ella no tenía por qué soportar a una persona celosa, que le diera una oportunidad y ella le dijo que no estaba preparada para eso todavía, y fue cuando Raúl se le acercó y la beso, y ella le correspondió.

Cerca de las 3 de la tarde llego un representante de Dorian grey, el de las mallas y pantimedias, para ofrecerme que le hiciera la publicidad en una expo, me pidió a una edecán, todo esto lo escucho María, cuando salió el representante, y aunque todavía estaba algo tenso lo de María y yo, le pregunte si conocía a alguien que pudiera trabajar como nuestra edecán, que nos urgía porque ya era para ese sábado, para mi sorpresa María me dijo que si estaba de acuerdo ella podía ser la edecán, sin pensarlo acepte.

La mande que fuera a la oficina de Dorian Grey a que le dieran la ropa que usaría, me preguntó quien iría a esa expo, le dije que solo Ella, un representante de Dorian Grey y yo, al otro día que era viernes me puse de acuerdo con ella, el evento era de 8 am a 5 pm, pero nosotros solo estaríamos las primeras 3 horas, Raúl se enteró y me pidió acompañarnos, a lo que rotundamente dije que no, que se quedaría de encargado en la agencia.

Al otro día pase muy temprano por María, vestía pants, pero llevaba una maleta donde me supuse tenía la ropa a usaría. Llegamos y yo comencé a poner la publicidad mientras mi cuñada se iba a cambiar, después de como 20 minutos escucho un chifladera, volteo y veo a mi cuñada, vestía una falda cortísima color beige, se le súper marcaban sus  hermosas nalgas, una blusa blanca de botones al frente, usaba medias color carne y unas zapatillas del mismo color de la falda que dejaba ver un par de piernas riquísimas, [1]  estaba espectacular, todos volteaban a verla.

Me acerqué a ella y le dije que se veía muy bien, le invite un café en lo que iniciaba la expo, y le dije que necesitaba aclarar lo de días atrás, me dijo que se había sacado un poco de onda, que sabía que había sido un accidente, pero que la mayoría de los chavos con los que había terminado era porque querían agarrar de mas, y me confeso que era virgen, me agradeció por entender y me dijo que el día que salimos se divirtió muchísimo y que esperaba se volviera a repetir, le dije que me encantaría, que si no fuera porque ya salía con Raúl la invitaría hoy al cine, ella inmediatamente me dijo que con Raúl se iba a ir muy despacio y que claro que aceptaba, ya quería terminar con el evento para irme con mi cuñadita.

Muchos se acercaron a tomarse fotos con ella, otros hasta la invitaban a salir, estaba hermosísima, no podía dejar de verla, ya quería irme con ella. Dieron las 11 y llegaron los representantes de Dorian grey, le dije a María que ya nos fuéramos, pero para mi sorpresa me dijo que la esperara un poco, ya que iba a cambiarse, le dije que no se cambiara, que así se fuera, que se veía muy bien, me respondió que estaba un poco atrevida su ropa, pero después de un rato de insistirle termino aceptando, antes de irnos sonó su celular, era Raúl, le preguntaba a qué hora terminaría y si podía pasar por ella, le dijo que yo la había invitado a desayunar y que si quería se podían ver por la tarde.

Después de esto nos dirigimos a mi auto, fue un verdadero placer verla sentarse, no podía concentrarme mucho en el manejo, llegamos a desayunar, platicamos un poco y como a la una nos dirigimos a ver si ya había películas, las funciones comenzaban hasta las 3, así que caminamos un poco por la plaza, todos la veían, volví a querer tocar el tema del agarrón de nalgas, pero ella me dijo que ya lo olvidara, me tomo de la mano y me dijo que mejor le comprara un café, me dijo que no le gustaba caminar sola, puso como la otra vez mi mano en su cintura, y me dijo, en serio ya olvida eso, me la paso muy bien contigo, has sido muy bueno conmigo, me ayudaste cuando más lo necesitaba, nos sentamos a tomar el café, yo también le agradecí que me ayudará con lo de hoy, y más usando esa ropa. Conversamos otro buen rato, nos reímos mucho, y cerca de las 3 nos fuimos al cine, compramos refrescos y palomitas para después entrar a la sala, nos sentamos en la parte de hasta arriba, [2] [3] realmente era un placer tener a semejante mujeron sentada a mi lado, puso la charola en medio de los dos asientos y con ello me resigne a no verle las piernas, ya que me tapaba la charola, ella estaba del lado derecho y unos asientos más hacia su lado se encontraban un par de jóvenes que desde que llegamos no le quitaban la vista de encima, después de 20 minutos María se dio cuenta de eso y me lo dijo, le propuse pasar la charola de su lado y con eso les taparía la vista, y así lo hizo.

Ahora al que le quedaban a la vista sus hermosas piernas eran a mí, y creo que ya sin mucho disimulo volteaba cada rato a ver sus muslos, ella se dio cuenta y fue cuando me dijo que ahora necesitaba otra charola para ponérmela a mí, le dije en tono de disculpa que no era mi intención, pero que era inevitable no voltear a verle las piernas, ya que estaban muy bellas, le pregunté si le molestaba, me contestó que tanto como molestarle no, sino no hubiera acepado salir así, pero que era su cuñado y no estaba bien, fue entonces cuando le pregunté si le gustaba usar pantimedias completas o medias de las que llegan arriba de medio muslo, me dijo que medias, que eran más cómodas, y le dije que si eran de encaje, me respondió que como sabia eso, y en eso voltea a verse las piernas y logra ver que su faldita se le había subido un poco y dejaba ver el encaje de sus medias, inmediatamente se acomoda la falda y me dice que soy un baboso pero en tono de broma, le dije que no tenía nada de malo, que hoy en la expo  muchos le habían visto las piernas, e incluso el encaje de sus medias, le mostré una foto donde sin darse cuenta su falda se le subió un poco y mostraba el encaje de sus medias, me dijo que no lo podía creer que sentía mucha pena, le dije que no mencionara eso, que sin afán de ofender había sido la edecán más buena de toda la expo, y riéndose un poco me dijo que estaba loco, que nadamos que me escuchara Lore mi esposa y se me armaría, le dije que las medias en un par de piernas hermosas volvían loco a cualquiera, me dijo que mejor la abrazara porque la peli ya le había dado miedo, pase mi mano por su cintura y ella se recargo un poco en mí y cruzo sus piernas, nuevamente se le volvió a subir un poco el vestido, tenía una espectacular vista, iba nuevamente a acomodarse el vestido cuando la tome de su mano y le dije que así se quedara, ya no dijo nada, y volvió a ver la película, yo seguía abrazándola y agarrándola de la mano, después de un rato le solté la mano y le pregunté al oído que si usaba liguero para sostenerse las medias, me respondió que no, que las medias por si solas se ajustaban en su muslo para no bajarse, sin dejar de abrazarla le volví a decir que me dejara solo por un momento ver el encaje de sus medias, baje la mano hasta donde terminaba su falda y tomándolo muy despacio comencé a subirlo hasta dejar al descubierto todo el encaje de sus medias,  podía ver donde terminaban las medias, ella volteo a verme y con su mano tomo la mía para quitarla, me dijo que era muy mano larga, que solo me conformara con ver sus piernas, pero que no tocara nada, le dije que ahora a ella le tocaba abrazarme, la solté de la cintura y pase su mano por mi hombro, me recargue un poco en ella y ahora tenía muy cerca de mi sus dos piernas y mis dos manos estaban libres, volví a insistir y baje una de mis manos hasta posarla encima de su muslo, ella movió la cabeza y cruzo nuevamente sus piernas, subiéndosele aún más la falda, me imagino que lo hizo para evitar que pudiera meter mi mano entre sus piernas, nuevamente con la mano que tenía libre me tomo la mía y la quito de sus piernas, me dio un pequeño pellizco y me dijo que ya me estuviera quieto, entrelace mis dedos con los suyos y quedamos agarrados de la mano, y con su otra mano me tenía abrazado, así que todavía tenía la mano derecha libre y fue con la que nuevamente volvía a acariciar su muslo desde la rodilla hasta donde empezaba el encaje de las medias, María volvió a mover la cabeza y me dijo que no tenía remedio, ya no hizo nada por quitarme la mano de encima, ella me abrazaba y yo la tenía agarrada de la mano y con la otra me daba tremendo gusto acariciando su muslo, era un espectáculo tremendo, nunca imagine tener las piernas de tremenda mujer en mis manos, así me la pase un buen rato, faltando unos 5 minutos para que terminara la función pase mi mano aún más arriba del encaje de sus medias y logre tocar su pierna donde ya no la cubrían las medias, fue cuando ella la sentí estremecerse, reacciono se enderezo, se bajó la falda, me soltó de la mano, se me recargo y paso mi mano por sus hombros, se me acerco, me dio un pequeño beso en el cachete y me dijo que ya era suficiente, la abrace muy fuerte y le dije que gracias, volteo y me sonrió, ya no volví a intentar nada.

Termino la función, la volví a abrazar de la cintura para caminar hasta el auto, me dijo que si la podía llevar a la agencia ya que había quedado de ir con Raúl, antes de subir al auto la tome con mis dos manos de su cintura y le dije que me la había pasado muy bien con ella, me abrazo y me dio otro beso en el cachete, me dijo que también ella se había divertido muchísimo, se sentó en el auto y cuando iba a cerrar la puerta, me le acerque y le dije que tenía unas piernas espectaculares, ella solo me sonrió. Cuando llegamos ya eran como las 6 de la tarde, el negocio ya estaba cerrado, entramos a la agencia, el único que estaba era Raúl terminando un trabajo, cuando vio entrar a María casi se le salen los ojos, pude ver sus ojos de lujuria y deseo, les dije que iba a checar los pendientes y a hacer unas llamadas, que enseguida mandaría llamar a María para pagarle, entre a mi oficina, la cerré y rápidamente active la cámara donde ellos estaban, logre escuchar que Raúl le decía que estaba guapísima, que si así había estado vestida todo el día, María le contesto que sí, notaba a Raúl un tanto sacado de onda, le preguntaba que si no la habían molestado mucho en la expo y que a donde habíamos ido, María le contesto que desde que entro a trabajar no habíamos platicado mucho y que tenía más de dos años que no nos veíamos, que yo la había invitado a desayunar y luego a tomar un café para terminar comiendo, que conversamos mucho.

Raúl ya no se pudo contener y con sus dos manos la tomo de la cintura y la comenzó a besar, ella se resistió un poco diciéndole que yo los podía volver a ver, hasta que termino respondiendo a sus besos, la fue llevando hasta terminar recargados en un rincón, seguían besándose, y fue cuando Raúl bajo una de sus manos para comenzar a acariciarle una de sus nalgas, fue cuando María se alejó de él y le dijo que así no llegarían a ningún lado, que aprendiera a respetarla, y que mejor iba a mi oficina a cobrar, rápidamente apague la computadora, cuando escucho que toca a mi puerta, me levanto le abro, y la veo sacadísima de onda, yo sabía porque, pero me acerco a ella y le pregunto qué pasa, y me comienza a contar lo que minutos antes yo ya había visto, Me dijo que no podía entender porque los hombres no veían más allá de su cuerpo, que Raúl bajo su mano para ponerla encima de su nalga, que apenas tenían un día de novios y que no le parecía eso, y fue cuando comenzaron a salirle algunas lágrimas.

Me acerque a ella y la abrace, los dos estábamos parados, ella rápidamente recargo su cabeza en mi pecho y me abrazo fuertemente, le dije que no tenía por qué estar triste, que se me hacia una mujer muy inteligente y llena de cualidades, que era una muy buena persona y que durante el poco tiempo que trabajaba conmigo, se había vuelto una mujer muy indispensable y que le daba mucha alegría a la agencia, y que además de todo eso estaba muy guapa, por lo cual era muy difícil a la gente evitar que voletaran a verla o incluso tocarla, le dije ya vez yo, no pude evitar hoy tocar esos muslos, y días antes una de tus nalgas, aunque fue un accidente, ella comenzó un poco a reír, me dijo que era un exagerado ni que fuera para tanto, le dije que sí lo era, que tenía un rostro de ángel, una altura envidiable, unas piernas hermosísimas y unos pechos que casi se salían de esa blusita y aunado a todo eso unas nalgas riquísimas, pensé que me soltaría y me agarraría a cachetadas, pero no fue así, sin dejar de abrazarme me dijo en un tono más bajo, en verdad te gusta todo eso de mí, le dije si, y entonces baje mis dos manos hasta colocarlas en sus nalguitas, y comencé a acariciarlas, ella no me dijo nada, solo me dijo que se divertía mucho conmigo, que se sentía tan protegida a mi lado y que tenía mucha suerte su hermana de tenerme a su lado, que le encanta a trabajar conmigo, yo seguía con mis dos manos acariciando sus nalgas mientras le decía que me encantaba tenerla tan cerca, le pregunte si Raúl ya se había ido, me dijo que no, que estaba esperándola, entonces María se separó de mí, pensé que hasta ahí iba a terminar, pero solamente se fue a sentar en el sillón con las piernas cruzadas, Volví a comentarle que me encantaban sus piernas, que entendiera un poco a su novio, ya que yo sabiendo que era mi cuñada no pude contenerme , a lo que me respondió que desde que llegaron vio en la cara de Raúl mucho deseo y morbo, pero sin en cambió conmigo no sentía eso, volví a acercarme a ella, pase mi mano por su cintura y puse mi otra mano en sus piernas para volver a acariciarlas, le dije que me encantaría que vistiera así diario, me dijo que si yo quería lo haría, solo que no creía que fuera conveniente, insistí mucho y acepto, se levantó y me dijo que ya tenía que irse,