Mi hija enyesada

Hola a todos, soy Carlos de 34 años, y esto que les contare a continuación pasó hace cerca de mes y medio con mi hija Abigail de 18 años; Para hacerles un breve resumen de nuestra vida debo empezar contando que cuando tenia 14 años conocí a Cynthia una hermosa morena de cabello rizado y un cuerpo bonito para su edad, muy centrada en su estudios y su futuro, ella y yo estudiábamos juntos, y con el paso del tiempo nos hicimos novios. Paso cerca de un año o año y medio de nuestro noviazgo cuando experimentando sexualmente y con poco cuidado Cynthia se embarazo, hubo conflicto entre las familias de ambos, la de ella quería que su hija tuviera un futuro mejor, con mas estudios, y no quería que su hija de 15 tuviera un hijo todavía, y la mía en cambio me estaba presionando para que asumiera mi responsabilidad, para no hacerles muy largo el relato les diré que llegamos a un acuerdo, ella si tendría a la bebé pero era yo quien me haría cargo como padre soltero, ella no tomaría parte importante en su vida pues su sueño desde siempre había sido ser un exitosa abogada y no quería "piedras de tropiezo" como ella misma dijo.


Los meses pasaron, Abigail nació y me la lleve a vivir a la casa de mis padres, seguí con mis estudios y conseguí un pequeño trabajo, era mi mamá quien cuidaba la mayor parte del tiempo de mi hija, esto siguió así por al menos 3 años, hasta que un mal dia mi abuelo paterno enfermó, comenzó a tener problemas respiratorios y en sus últimos días pidió que se hiciera una carta en la que me dejaba como heredero del apartamento en que vivía puesto que fui yo quien primero lo convirtió en bisabuelo y siempre habíamos tenido una buena relación, apartamento al que me iría a vivir yo solo con mi pequeña niña, yo deje de estudiar y me dedique únicamente a trabajar para que a ella nunca le faltara nada. Así pasaron los años, Abigail fue creciendo y cuando tenia como 7 años se intereso inmensamente por el motocross, esto viéndolo a través de la televisión y se volvió insistente en que ella quería hacer eso también, al principio dude pero luego cedí y acabe por meterla en unas clases introductorias para niños de su edad.

Los años pasaron y todo siguió su curso, yo pase de trabajar para otro a tener mi propio negocio y Abigail paso de ser una aprendiz a conseguir su primer titulo con tal solo 13 años en la categoría femenina sub15, dado que ya yo tenia negocio propio y tenia a mis empleados comencé a pasar mas tiempo con mi hija, yendo siempre a sus practicas y competencias y apoyándola siempre en todo, con su altas y bajas, y su triunfos y sus caídas, y ademas con los cambios que la edad le estaba trayendo.

Abigail se volvió una joven muy competitiva y hermosa, aunque es mi hija debo reconocerlo, su cuerpo cambio bastante y a sus cortos 15 años ya aparentaba ser mayor de edad cosa que alguna que otra vez me hizo dudar de mis principios, pero nunca nada paso, siempre la respete. Fue hasta que cumplió los 18 años cuando un mal dia mientras se encontraba entrenando duro para una competencia estatal de categoría sub20, cuando la moto le fallo, en una de las tantas colinas que tenia la pista vi a mi hija ser disparada por los aires y caer mal, sobre sus brazos, lo que se tradujo en fractura de ambos, quedando así fuera de la competencia y con un yeso que le impedía moverlos durante varios días.

Fue a partir de ese momento en que la vi salir de la sala del doctor en que supe que lo que venia seria difícil para ambos, para comer, para bañarse, para vestirse, para casi todo necesitaría de mi ayuda, esa misma tarde llegamos a casa y la comida se la di en la boca, luego de comer estuvimos viendo la televisión cuando de un momento a otro se paro para ir al baño a orinar, como a los diez minutos me comenzó a llamar y muy apenada me pidió que la limpiara que se le hacia imposible, debo decir que a pesar de que hemos vivido juntos toda la vida muy pocas veces le había visto sus partes, mucho menos tocado (aunque fuera con un papel de por medio) razón por la que inmediatamente tuve una erección que con suerte logre disimular, ese dia seguimos viendo la televisión y a la noche nos acostamos a dormir, ella en su cuarto y yo en el mio pero con el pensamiento de ella en la mente al saber que al dia siguiente era yo quien debía bañarla, y es que aunque fuera mi hija, su cuerpo era el de una mujer muy bien desarrollado, con unos pechos medianos, pero unas caderas que volverían locos a la mayoría.

Amaneció, le lleve el desayuno a su cama, pero antes de comer me pidió que la acompañara al baño, lo que implicaba lo mismo del dia anterior debía tocarla, esta vez era su culo, el cual era perfecto, grande pero duro, otra erección que debía disimular, volvimos a su cuarto y comimos, ella busco entre las gavetas ropa y se me quedo viendo como si quisiera decirme algo y al cabo de un rato me dijo que se quería bañar, fuimos al baño nos desvestimos ambos puesto que yo iba a aprovechar de ducharme de una vez, pero quedándome en bóxer, por primera vez en muchos años la tenia completamente desnuda frente a mi, ella solo vio al techo y me dijo "papi, hazlo rápido porfa que es un poco incomodo esto", le eche agua y cuando comencé a pasarle el jabón su cara se torno roja y sus pezones un poco mas erguidos, parecía que se estaba excitando pero mis instintos de padre me impedían sacar provecho de la situación, le enjabone las tetas y el abdomen, de ahí pase a su espalda y fui bajando poco a poco hasta sus nalgas, me agache quedando estas ultimas a la altura de mis ojos y empece a lavarles las piernas para luego subir lentamente por sus muslos y llegar al edén, sin notarlo me tarde mas de lo que pensaba, Abigail soltó un suspiro y me dijo que ya estaba bien, me di yo una ducha rápida dando tiempo a que mi miembro perdiera tamaño, la seque y me seque yo, la acompañe a su cuarto, la ayude a vestirse, me dio las gracias y luego me fui a mi cuarto a vestirme con esa imagen que acaba de tener, quería masturbarme pero no fui capaz, fui a la cocina y puse a hervir el agua para ya tener el almuerzo para mas tarde, ese dia no paso mas nada salvo unas dos veces que fue al baño y en la noche que me pidió que le cambiara la ropa que tenia por un camisón para dormir.

Al dia siguiente eran cerca las 4 de la mañana cuando me desperté ya que sin saber porque no tenia sueño, me quede viendo televisión un rato y como a la media hora fui al baño pasando por el cuarto de Abigail, tenia la puerta entre abierta lo que me dio curiosidad puesto la hora que era y que según yo pensaba estaría durmiendo, me asome y la imagen que vi no la podre borrar jamas, ahí estaba mi hija de espaldas a la puerta con su ropa que dejaba a la vista media nalga y frotándose con las orillas de la cama, se estaba masturbando y lo hacia con toda la suavidad del mundo como si la cama fuera su mas apasionado amante, así la vi durante unos 3 o 4 minutos hasta que soltó un gemido y se dejo caer sobre el colchón, mi excitación era tremenda así que seguí como pude hasta el baño, sabia que si me intentaba masturbar no iba a durar nada y esos serian solo chorros de semen sin sentido, así que pensé en otras cosas, orine,y volví a mi cuarto; eran ya las 6 de la mañana cuando paso ella por mi cuarto y me pidió ayuda para cepillarse y orinar, fui al baño me posicione detrás de ella y empece a cepillarle los dientes con la ayuda del espejo que teníamos enfrente dejando a la vez un espacio milimétrico entre mi pene y su culo de manera que cualquier movimiento que ella hiciese seria un recoston, desde el primer momento en que hubo contacto n o lo dejo de haber, nunca busco de retirarse, parecía mas bien que me seguía el juego, termine de cepillarla y cuando le baje su ropa interior salio al aire un olor a mujer recordatorio de los momentos de pasión que había tenido horas antes con su cama, con el puro olor y el recuerdo de lo que había visto ya yo estaba que reventaba en ese momento quería hacerla mi mujer pero me contuve, respire hondo y me fui a hacer el desayuno, comimos y fuimos a la sala a hablar de cualquier cosa sentados uno frente al otro, cuando menos me lo esperaba Abigail subió una de sus piernas al mueble en el que estaba y comenzó con miradas aleatorias a mi paquete que iba en aumento, y así se mantuvo durante el resto de nuestra conversación, calentándome y calentándose.

Habia pasado un rato de lo sucedido y como si de atrapar un ave en vuelo se tratara me pidió que la bañara, la desnude y me desnude completamente yo también, esta vez no miro al techo, se miro ella misma y a mi de vez en cuando, deje que corriera el agua por su cuerpo un rato antes de iniciar la enjabonada, no me apresuro como la vez anterior, solo se quedo quieta viendo como su cuerpo era sobado por mi y por el jabón, mi pene se alzo y sus pezones también, sabia que algo cambiaría entre nosotros a partir de ese dia, impaciente por el ambiente que nos rodeaba a los dos me fui directo a su vagina, entre una pasada y otra disimulaba y dejaba que mi dedo del medio explorar un poco sintiendo lo caliente de la mujer que tenia delante, ella lo noto y me vio a los ojos con una mirada cómplice, arqueo las piernas para dejarme mas libertad, se mordió un labio y sin disimulo volteo a verme el pene como deseosa de él, sin previo aviso se arrodillo y tomo el glande entre sus labios e inicio el mejor oral que había recibido en mucho tiempo, se le notaba que lo disfrutaba mucho, lo saboreaba y lo engullía como toda una profesional hasta que no pude mas, el semen lo solté a chorros dentro de su boca y se lo trago sin quejarse luego se puso de pie y pidió que le devolviera el favor, dejando en mi boca el sabor de sus líquidos entre gemidos, salimos de la regadera, nos secamos y ella me pidió que nos quedáramos tal cual estábamos, sin ropa, y asi fue.

Pasaron los días y el mismo proceso se repetía, yo la seguía bañando y ambos andábamos desnudos por la casa, nos hacíamos sexo oral uno el otro constantemente pero sin penetración, por lo menos hasta ahora, ya en en estos momentos ella tiene unos cuantos días de que le retiraron el yeso, ya no la sigo ayudando como antes pero si nos seguimos provocando el uno al otro, prácticamente somos pareja. Con suerte luego les traere una segunda parte pues estoy seguro que lo nuestro no cesara.