Casi enloquecida se entrega a su semental besándolo y atrapándolo con sus piernas por su espalda esta gozando del coito con su nuevo marido, esta a sido su mejor copula realizada en años y se la otorga uno de sus alumnos
Relato
Mi hija me dice que van a salir con el novio y mi esposo está con sus amigos en el bar mirando un partido de fútbol, me quedaba sola con mi hijo menor…, brrr…, tiritaba no se si de temor o pasión, estábamos solos los dos y este hijo mío no desaprovechaba las ocasiones y esta vez por supuesto no la desaprovechó, en un par de minutos de la partida de mi hija, me tomo y estuve entre las sabanas de su cama sin falda y sin calzones, camisa desabrochada senos al aire, y él acariciándome, besándome y apuntándome con su pene entre mis piernas buscando ingresar en mi vagina con ese enardecido y entusiasta pene ardiendo de pasión por tenerme como su hembra en su cama, olvidaba por completo este semental que yo era su madre, solo deseaba penetrar a esta codiciada y anhelada hembra la mujer que según él era la que mejor machacaba librándole, esta hembra, de sus potenciales excitaciones sensuales y dejándolo totalmente agotado de sus pasiones al llenarle su vientre de semen. Como me poseía si me lesionaba mis piernas y mis caderas con sus duras y potentes arremetidas contra este vientre que lo cobijo meses, metía y sacaba su pene con tanto entusiasmo que una no podía sino solo abrazarlo y sucumbir en sus diestras penetraciones entregándose a los orgasmos del placer de yacer cubierta por este joven y delicioso semental hasta sentirse inundada por los líquidos que este vaciaba en su matriz. Era un placer enorme ser colmada en mis entrañas por ese pene aunque fuera el pene de mi hijo. ¡Oh, que delicia ser ensartada por este macho!
Meses fui la querida amante de mi hijo, trataba de no olvidarme de mis pastillas anticonceptivas para vivir plenamente estos momentos de agrado y placer con el pene de mi hijo. Aunque este me rogaba embarazarme no lo dejé.
Del colegio de este hijo me mandó a buscar su profesora jefe una doña hembra de largas piernas y larga cabellera, me dijo que mi hijo a veces lo pillaba ella admirándola y esto la ponía nerviosa, señora le dije me gustaría confesarle algo, pero no aquí en la escuela, ella me invita a su casa media calle del establecimiento, en el camino nos encontramos con Ricardo y ella le pide acompañarnos, gran error de su parte, luego lo sabría ella. Llegamos a su casa entramos y conversamos en el living, ella no tenía hijos a pesar de llevar dos años de casada con su marido…, me dice que era el secreto que tenía que contarle…, la miré y le dije si ud. sabe callar se lo cuento si no … mejor me voy digo, espere me dice… espere cuente, confié en mí…, y ud ¿confía en si misma? digo, responde que si…, bueno…le digo, ud se lo buscó… mi hijo es un semental peligroso, cuando se excitaba adquiere la fuerza de un toro salvaje, buscando donde poder descargar sus potencialidades de semental y no mira si esa mujer es casada, soltera, con hijos, si es joven o madura, busca solo saciarla a ella y saciarse él y le contaré que es un delicioso macho fecundador no gusta de dañar a la hembra solo busca satisfacerla para que sea feliz y él se siente feliz cuando la hembra gime de pasión en su entrega cuando el vacía sus espermios en la matriz de su satisfecha y empachada hembra regada por su semen.
Pruébelo y vera que placer se siente el ser poseída por este semental... Me mira con unos ojazos asustada… mas aún cuando Ricardo la comienza a excitar acariciándola, venciendo su rechazo, mi hijo es un esplendido espécimen excitando al sexo opuesto, tiene unas maravillosas técnicas que no se donde adquirió para calmar y convencer a la hembra insistida por él. No mas de diez minutos y tiene a su profesora respirando entrecortada gimiendo, no le dice esta, eres mi alumno, no… pero sucumbe ante la pasión del macho y sus hormonas excitadas que están revolucionadas en su cuerpo, sin enterarse pronto esta sin falda, sin calzones, Ricardo la besa y lame su vulva introduciéndole su lengua en busca del clítoris que sale a su encuentro tieso y duro, el semental también tiene tieso, duro crecido su pene este engruesa su cabezota al saber que esa profesora, su profesora reclama y solicita ser penetrada…, Ricardo le dice susurrándole pídeme que te posea, solicítame que te satisfaga …, ella solo gime y mueve locamente la cabeza trata de escapar, pero el macho es recio y sabe que su presa esta lista para la posesión de su pene en su matriz, ella acaricia ese pene y ruega métemelo quiero ser tuya…, poséeme…, segundo después la mujer se estremece al ir penetrándola este pene y se cobija en sus entrañas comenzando un entra sale de este pene en su vagina que la lleva al borde de la enajenación al aparearla suavemente y luego salvajemente, su profesora solo gime y es una marioneta en brazos de Ricardo quien la abruma con su pene y extrae de ella sus orgasmos que son sus primeros orgasmos en muchísimo tiempo, ya que su marido no sabía extraerlos, como los grita y zarandea al macho que la posee al extraerle los orgasmos, que no es uno, detrás viene otro… y pronto siente su matriz inundada por una esperma tibia que el macho esta depositando a caudales en sus entrañas. Casi enloquecida se entrega a su semental besándolo y atrapándolo con sus piernas por su espalda esta gozando del coito con su nuevo marido, esta a sido su mejor copula realizada en años y se la otorga uno de sus alumnos, eso si un semental grandioso un toro semental que le estaba destrozando su matriz.
Recupera su respiración y mira a la madre de Ricardo testigo de su entrega diciéndole si tenía razón es de primera este semental que tiene por hijo. Un bravo y salvaje toro. Pero que haremos ahora, fácil contesta la madre…, desde ahora eres la amante de mi hijo y este te preñara y tendrás hijos de él… ella sonríe sorprendida.
Dos años llevan siendo amante Soledad la profesora de 28 años tiene ahora un hijo y en su seno lleva otro fecundado por su alumno regalón.
Sigue casada, pero no deja a su alumno favorito sin darse ambos los placeres de los apareamientos que ya a dado un fruto y dentro de ella esta otro.