mi maestra Mercedes

Cuando yo era muy joven trabajaba en una oficina donde hacía las veces de sereno y se encargaba de la limpieza un señor llamado Rodolfo, de casi 60 años de edad el cual era muy simpático y siempre tenía muy buen trato con nosotros los empleados que éramos tres de los cuales yo era el menor ya que en ese momento tenía solamente 17 años mientras que los otros dos tenían 26 y 26 años.- Rodolfo era un señor viudo hacía varios años que vivía solo con su hijo de 33 años a la que no conocíamos pero siempre le hacíamos bromas sobre ella a Rodolfo, el que las tomaba con su muy buen carácter y nunca se enojaba.-
Una vez que Rodolfo se enfermó de cuidado, durante su enfermedad vino a reemplazarlo su hija Mercedes; ¡!por fin la estábamos conociendo¡¡, era una mendocina de alrededor de 1.70 de altura, con no muy linda cara pero con un buen físico, y según mi parecer, con mucha pinta de putona.-
Enseguida nos hicimos muy amigo de Mercedes quien nos pidió que no la llamáramos por su nombre sino que usáramos su apodo “mecha”.- Así lo hicimos y muy pronto ya habíamos tomado mucha más confianza con ella que con Rodolfo o sea que por una parte queríamos que Rodolfo se curara pero por otra parte tambien deseábamos que Mecha siguiera con nosotros.- Ella tomó mucha confianza con nosotros, especialmente conmigo y siempre me decía me decía que ella me tenía que enseñar: yo, con tanta juventud y muy orgulloso de mis conocimientos le decía que ella no me podía enseñar nada que yo no supiera, pero ella insistía en que ella iba a ser mi maestra, siempre riéndose francamente.-
Pasaron los días y Rodolfo se mejoró por lo que volvió a su trabajo y Mecha dejó de vernos por un tiempo, pero antes de irse me dijo que no me olvidara que ella iba a ser mi maestra; yo sonriendo le dije que eso iba a ser imposible, pero ella riendo insistió, me dio un beso en la mejilla y se fye.-
Al poco tiempo, vino Rodolfo y me dijo que por indicación de Mercedes, me invitaba a cenar una noche en su casa que ella prepararía la comida, pero que no lo comentara con nadie porque la invitación era para mí solamente; por supuesto que acepté su invitación aunque no dejó de llamarme la atención que fuera para mi solamente y el día indicado, compré una caja de bombones y me dirigí al domicilio de Rodolfo y su hija, para lo cual me puse una ropa informal pero que lucía muy elegante; llegué y le entregué a Mecha la cajita de bombones; ella me dijo que no hacía falta esa atención y me dio un beso ya no en la mejilla sino que lo hizo en mis labios, lo que me llamó la atención y comencé a excitarme; Mecha esa noche estaba vestida bien bonita como preparada para una guerra; tomamos primero un aperitivo y luego trajo la comida que había preparado; la verdad que estaba exquisita, pero había algo que me llamaba la atención: los lugares los había distribuído Mercedes y había ubicado en una punta a su papá, la otra punta quedó vacía lo mismo que un costado, mientras que en el otro costado me había ubicado a mí y casi pegada a mi se había ubicado ella; cada ves que se levantaba para servir algo, al venir y pasar al lado mío, me apoyaba las tetas en mi espalda, las que a pesar de no ser muy grandes yo las notaba, lo que me estaba produciendo una erección; mientras estábamos comiendo, ella sentada al lado mío en un momento me empezó a acariciar las piernas completando de ese modo mi erección; una vez que notó mi pija bien dura con su mano me la acarició un momento y luego con una sonrisa, se levantó u siguió atendiendo la mesa, dejándome completamente ansioso y con ganas de que me siguiera tocando.-
Sin otro detalle de interés se acabó esa cena, saludé a Rodolfo y Mecha me acompañó a la puerta donde estuvimos charlando un rato; al despedirme traté de darle un beso en los labios como había hecho ella cuando yo llegué, pero ella caprichosamente dio vuelta la cara y mi beso se perdió en su mejilla; yo enfadado por su proceder estiré la mano y le apreté una teta, ella en contestación me sobó un momento la pija y enseguida me pidió que me fuera porque nos podían ver.-
Me fui muy caliente y no sabiendo que pensar de la actitud de Mecha; a los pocos días me llama por teléfono y me dice que a la salida de la oficina me esperaba en una confitería de la cual me dio la dirección; al salir me fui directo para allá y ella ya me estaba esperando; estaba vestida con una minifalda bien ajustada, destacándose sus piernas y su culo, además tenía una blusa bien escotada mostrando el nacimiento de sus tetas; calzada con unos zapatos de tacos bien altos lo que le daba un aspecto de una flor de putona; me dio un beso esta vez si en los labios y nos sentamos a tomar un trago; yo no estaba acostumbrado a tomar pero ante su insistencia tomé lo que ella me indicó y enseguida de tomarlo me empecé a deshinibir, abrazándola sin motivo; enseguida pusieron música romántica y la invité a bailar; en el baile la apreté bien fuerte contra mi por efecto del alcohol ella sintió mi pedazo apoyado en sus piernas y sonriendo me dijo:
• Jorgito, la semana que viene cumplís tus 18 años, no?
• Así es Mecha, pero como te acordaste?
• Lo tenía anotado, pero ahora decime: querés que sea tu maestra?
• Que es la que me querés enseñar que yo no sepa?
• A coger mi amor, o me vas a decir que has cogido alguna vez?
• La verdad que nunca lo hice, pero me encantaría hacerlo con vos
• Te das cuenta que no hace falta ser maestra para poder enseñarte algo?
• Tenes razón Mecha, y cuando sería tu enseñanza?
• El día de tu cumpleaños amor, si querés seguimos franeleando ahora, pero la cosa será en serio exclusivamente el día que cumplas tu mayoría de edad
• Y no puede haber un adelanto ahora?
• No mi amor, no hay ningún adelanto, conformate y esperá una semana, que los días pasan pronto, si querés seguimos bailando otro rato, y después nos vamos a esperar la fecha
• Prefiero tenerte un poco más en mis brazos, sigamos bailando
• Como vos digas tesoro
Y seguimos bailando un rato más, yo estaba tremendamente caliente y le apoyaba mi pija en su cuerpo; ella abrazada a mi refregaba sus tetas por mi pecho haciéndome calentar más y sonriendo por mi calentura; fueron varias piezas que bailamos ya que yo quería seguir indefinidamente apoyando mi pija en Mercedes, pero entonces ella dijo que por ese día era suficiente y que ya nos veríamos el día de mi cumpleaños.-
Los días que faltaban para ello se hicieron interminables, hasta que llegó el ansiado día; mis compañeros de trabajo me felicitaron por mi mayoría de edad y el viejo Rodolfo, no pidiendo guardar el secreto les contó la promesa que me había hecho su hija; ellos inmediatamente comenzaron a hacerme bromas diciéndome que yo era el favorito de Mercedes y que esperan que yo la pasara muy bien; a mi me encnataba oir esas cosas de parte de mis compañeros, pero la verdad era que el nerviosismo me estaba ganando porque no veía la hora de ver llegar a Mercedes; cuando faltaban aproximadamente quince minutos para la hora de salida, apareció Mercedes vestida muy elegante y delante de mis compañeros me dio un lindo beso en los labios deseándome mucha felicidad; mis nervios no me permitieron ni siquiera agradecer y me quedé mudo pero con el sabor de ese beso en mis labios; al llegar la hora de salida, nos despedimos de mis compañeros y con Mercedes, cumpliendo su promesa, nos fuimos a un hotel que había cerca de nuestro trabajo.-
Cuando llegamos yo temblaba de nervios, pero ella estaba muy tranquila, así que fue ella la que pidió la habitación y tambien ella la que pagó por adelantado dos horas de estadía, calculando que en ese tiempo, podía culminar sus primeras lecciones; fuimos a la pieza y yo no podía dominar mis nervios y seguía temblando; ella me dijo que me tranquilizara porque de lo contrario se iba a echar todo a perder y no sería posible que ni yo ni ella disfrutáramos el momento.- Hice lo posible por calmarme u cuando Mercedes calculó que yo ya estaba tranquilo, me dijo que a mi me tocaba desnudarla; yo haciendo uso de mi fuerza de voluntad, le saqué la blusa quedando ella con un hermoso corpiño color celeste; pero el broche del corpiño se puso muy rebelde haciéndome muy difícil el sacarlo; pero apelando a todos mis recursos, después de unos segundos de lucha lo pude desabrochar y se lo saqué, dejando a Mercedes con las tetas al aire, las que no eran muy grandes pero para mi eran preciosas ya que eran las primeras que veía en divo y en directo en mi vida; las empecé a acariciar y ella me dijo que no fuera desesperado y siguiera con mi trabajo de desnudarla; seguí con su pantalón, que desabroché, bajé el cierre y tomándolo por los dos costados lo fui bajando lentamente, dejando a Mercedes solamente con una pequeña tanguita celeste que hacía juego con su corpiño que ya estaba depositado sobre una silla; me dijo que esperara un momento que ella aprovechó para dejarme desnudo en un santiamén, habiéndole costado mucho sacarme los calzoncillos por que mi pija estaba completamente tiesa y fue un lindo trabajo poder desnudarme; de ese modo yo quedé desnudo y ella con solamente la tanguita; traté de bajarle la tangyuta pero nuevamente mis nervios volvían a jugarse una mala pasada; traté de serenarme y al fín logré bajarle la tanguita dejándola completamente desnuda; ella se dio una vuekta completa para que le viera el culo; me pareció hermoso y entonces ella con toda la tranquilidad del mindo me dijo que en ese momento empezaba a trabajar la maestra y que me iba a enseñar unos cuantos secretos que yo seguro desconocía.-
Como primera medida me dijo que para tranquilizarme un poco, me iba a hacer una paja para desahogarme; me agarró la pija, la empezó a acariciar y como la notó que ya estaba bien preparada, me hizo la mejor paja de mi vida; nada que ver con cuando me la hacía yo; esas manitas suaves y delicadas se que me hacía estremecer, pero no duré mucho porque con mi calentura en cuanto ella apuró el movimiento de su mano, acabé como un desgraciado desparramando leche por toda la pieza, lo que le provocó a Mercedes un risa franca.-
Una vez que consideró que yo había quedado tranquilo, fue hasta su cartera la que abrió y sacó un forro enseñándome a ponérmelo; una vez que estuvo bien colocado en mi pija me dio un consejo diciéndome que se siente mucho más lindo cogiendo sin forro, pero en ningún momento hay que dejar de ponérselo por dos razones; si la mujer que coge con uno es virgen se corre el riesgo de embarazarla y si es una mujer que ya ha cogido otras veces se corre tambien el riesgo de embarazo sumado al riesgo de poder contraer una enfermedad sexual.- Entonces me dijo que habían terminado sus clases teóricas y que comenzaban las clases prácticas; me dijo que a todas las mujeres les encantan que su hombre le chepe las tetas y a ello me dediqué un rato largo, entreteniéndome mucho con sus pezones, pero mi idea era cogerla: se lo dije y entonces ella me dijo que ya empezábamos; se recostó en la cama, se abrió de piernas y me hizo acomodar a mi; como notó que yo dudaba agarró mi pija y la dirigió a su concha indicándome que ahí la metiera; yo traté de hacerlo lo mejor posible hasta que lo logré pero enseguida llegó una gran desilusión, en cuanto sintió que mi pija estaba dentro de su hermosa concha al primer movimiento mío acabé por primera vez dentro del forro sin que ella diera ningún síntoma de haber sentido algo; se sonrió y me dijo que no me hiciera problema porque ella sabía que eso iba a ocurrir; ne ka hizo sacar de adentro su concha, me sacó el forro y con su lengua limpió mi pija de los restos de semen que habían quedado en la misma; me hizo poner otro forro para seguir con sus lecciones; me dijo que esta vez yo seguro iba a aguantar un poco más y que ella quería sumarse al festejo disfrutando de mi linda pija; otra vez estaba en pie de guerra y entonces me hizo acostar boca arriba con la pija bien parada; ella se subió a la cama conmigo, me agarró con su mano la pija y se fue acomodando para que entrara directamente en su concha; se fue agachando muy despacio hasta que mi pija quedo justo en la puerta de su concha; entonces hizo unos movimientos sensuales y mi pija se introdujo completamente en su concha, con lo que ella empezó a saltar arriba mío logrando que mi pija entrara y saliera de ella, lo que la hacía calentar sobremanera; mientras hacías esto me pedía que yo jugara con sus tetas, lo que no me hice rogar y se las empecé a sobar con todas mis ganas; a ella le gustó mi accionar y empezó a gemir; lo hacía cada vez más fuerte y tambien sus movimientos, hasta que lanzado un amplio suspiro se desplomó encima de mí, habiendo tenido un hermoso orgasmo po que me llenó de orgullo por haber sido mi primera vez y había logrado que una mujer de quince años más que yo lograra acabar con mi pija ensartada en su concha.-
Yo esta vez no había logrado acabar; entonces ella me dijo que estaba muy feliz porque ella había podido acabar conmigo y que por lo tanto iba a ampliar sus lecciones; yo le pregunté que iba a aladir y me respondió que me iba a enseñar a cogerme a una mujer por el culo; la verdad que nunca pensé que iba a tener esa dicha, pero ella me dio las indicaciones necesarias y yo, como buen alumno, muy rápido le estaba metiendo mi pija por su culo; aparentemente ella estaba muy acostumbrada a hacerlo por esa vía, porque recibió mi pija compleya haciendo solamente una pequeña muestra de dolor y después me dijo que la bombeara sin pensar en nada más; entonces se la puse bien en el culo e hice fuerzas hasta que quedó toda alojada dentro suyo y me empecé a mover al ritmo que Mercedes me indicaba, logrando en un rato acabar dentro de su culo, llenando nuevamente el forro con mi leche.-
Cuando se la saque de su culo, me dijo que las lección es estaban por terminar que llegaba la última oportunidad para mí; le dije que siguiera enseñándome y me dijo que no podía terminar una lección de esa clase sin siquiera haber probado el sabor de mi leche; me sacó el forro y lo tiró, pero con su lengua me limpió bien la pija; mi pija al sentir su lenguita se paró nuevamente y ella amorosamente se la puso en la boca y la empezó a chupar con muchas ganas; la verdad que nunca había pensado que una cosa así produjera tanto placer, pero ella seguía chupando y chupando; le avisé que esyaba por acabar nuevamente, pero Mercedes no hizo caso de lo que yo decía y siguió chupando hasta hacerme acabar dentro de su boca, mantuvo mi leche en su lengua unos segundos y haciendo un movimiento de garganta logró que todo lo que yo había expulsado se deslizara por su garganta y mostrando después su lengua ya limpia de todo rastro de semen.-
Me dijo que eso había sido todo por ese día, y que me había demostrado que ella, dentro de su poca cultura tambien podía enseñarme algo, cosa que yo reconocí ampliamente.-
Se bajó de la cama y fue directamente a bañarse, yo la seguí y arrimándome bien a ella logré que mi pija se pusiera dura nuevamente, ocasión que aproveche para apoyarla fuertemente en su culo; ella la sintió, se sonrió y se agachó un poquito invitándome a entrar nuevamente por su puerta trasera; yo me olvidé de lo que me había de siempre usar forro, y cuando la ví un poquito agachada puse mi pija en su puerta trasera u entré sin pedir permiso y sin que nadie me llamara la atención; empecé a bombear nuevamente pero me di cuenta que el esfuerzo sería en vano, porque ya se habían agotado mis fuerzas y mi semen, por lo que la saque de tan hermoso cofre y de ese modo terminamos de bañarnos.-
Se habían agotado las dos horas que había pagado Mercedes, me dijo que le había encantado ser mi maestra por un día y que si alguna vez yo quería tomar otras lecciones como esa, que no dudara en llamarla que ella estaría siempre dispuesta para seguir las enseñanzas.- Después de lo cual, nos vestimos, nos dimos unos hermosos besos apasionados por mi parte y menos por su parte y nos fuimos cada uno para su respectivo hogar, donde me estaban esperando mis padres para celebrar mi ingreso a la mayoría de edad.-