No lo podía creer O_O todo este lio, mi miedo, mi preocupación, mi angustia...todo había hecho que incluso olvidara la tanga que suelo usar debajo de mi ropa de trabajo, ahora podía ver todo de otra forma, de mi como Karla, como la tv sola con otro hombre que además tuviese buena herramienta...comencé a sentir una excitación enorme...
Relato
Mi noche en los Separos
Hace 4 años en fechas como esta, recuerdo que salimos algunos compañeros de trabajo, dispuestos a beber algunas cervezas por motivo del cumpleaños de uno de ellos, éramos al menos 6 contándome a mí. Nos dirigimos al establecimiento abierto las 24 hrs que se ubica en la gasolinera más cercana y compramos 4 six de cerveza, las abrimos a un costado del local, no era la 1a vez que lo hacíamos pero como dicen "No siempre corres con la misma suerte", y aquella noche siendo aproximadamente las 11pm, bebiendo en la vía pública, sin darnos tiempo de nada, se habían estacionado 3 patrullas junto a nosotros, los uniformados bajaron y pidieron con tono fuerte que abordáramos las unidades, uno de ellos me tomo del cinturón por la parte de atrás y me dirigió a una de las patrullas, subí y enseguida entro también Raúl uno de mis compañeros.
Yo jamás había vivido algo similar así que asustado llame a mi padre quien tranquilizándome me dijo que solo ofreciéramos la clásica "mordida", los demás fueron repartidos en las otras dos patrullas y comenzaron a avanzar por las calles, en este momento nos comenzaron a indicar las faltas que habíamos cometido y como debían ellos proceder, enseguida Raúl ofreció el dinero pero a ellos se les hizo muy poco así que molesto mi compañero y por el alcohol que había ingerido se hizo de palabras con uno de ellos diciéndole que entonces podían proceder, eso de alguna forma me tranquilizo un poco y decidí llamar de nuevo a mi padre para decirle que todo estaba bien pero debía afrontar las consecuencias de mis actos y pasaría la noche ahí y el tiempo que correspondiera a la infracción.
Llegamos al MP de la zona tomaron nuestros datos, testimonio y un breve examen médico, la indicación fue 16 horas de retención o una multa que ascendía los $850, lo peor es que solo estábamos allí Raúl y yo, los otros quizá ya habían llegado a un trato con los policías… en ese momento llegan con 4 tipos que por su estado de ebriedad se veía que aquello no les era indiferente, uno de los policías que nos llevó nos miró y acerco a decirle algo al oído al guardia como dándole indicaciones acerca de nosotros dos (quizá por la discusión momentos atrás en la patrulla), nos quitaron pertenencias incluyendo cinturones mismas que nos regresarían al salir.
Mandaron a Raúl con tres de los borrachos necios y a mí a otra celada con otro de ellos, fue una sensación fatal entrar ahí un cuarto con el wc a la vista, una barra de cemento que fingía como cama y sobre ella dos cobijas, paso el guardia por el pasillo apago la luz y nos pidió que no le diéramos molestias, la única entrada de luz provenía de afuera por una pequeña ventana en el pasillo. Estar ahí solo con alguien que no conocía no era nada agradable así que comenzamos a hablar, él se llama Antonio, tiene 25 años y al igual que yo jamás había estado en una situación similar, la luz era muy poca en la celda pero era claro que era más alto que yo, piel morena y complexión robusta, poco a poco se fue rompiendo el hielo, hablamos de un tema y otro y otro, pusimos las cobijas en el suelo y nos acostamos, la cobija era tan delgada que podía sentir lo helado del suelo, la temperatura bajaba y aquellas paredes llenas de escrituras, mensajes y grafiti se volvían un congelador, a esas alturas habían desaparecido en mi cualquier síntoma de ebriedad pero Antonio aun mezclaba palabras al hablar y apestaba a alcohol, no sé qué hora seria y deseando que todo terminara nos dispusimos a tratar de dormir.
Recuero haber dormitado en ratos pero el inmenso frio me despertaba. “Sabes que, vamos a dejar una cobija en el suelo y usemos la otra para cubrirnos” me dijo Antonio, me pareció buena idea y así lo hicimos, pego su espalda a la mía y enseguida pudimos dormir mejor. Después de un tiempo me despertó el ruido que hacia su orina en el escusado, Antonio se había levantado a orinar y fue ahí cuando a contra luz vi su pene flácido y al parecer de buen tamaño al menos más grande que el mío... en una situación así no entendía porque me excitaba, soy una tv muy de closet y no quería otra cosa más que terminara esa noche, pero inconscientemente me encanto estar ahí viendo como Antonio orinaba sin quitar mis ojos de su verga, en cuestión de segundos tuve una erección misma que me lastimo el pene aprisionado con...mi tanguita!!!!!
No lo podía creer O_O todo este lio, mi miedo, mi preocupación, mi angustia...todo había hecho que incluso olvidara la tanga que suelo usar debajo de mi ropa de trabajo, ahora podía ver todo de otra forma, de mi como Karla, como la tv sola con otro hombre que además tuviese buena herramienta...comencé a sentir una excitación enorme...esa excitación que solo se nos quita masturbándonos como locas imaginando penes enormes penetrándonos por todas partes, bañadas de rico semen mmmmmm.
Obvio no, no iba a masturbarme así y menos ahí, Antonio regreso a acostarse, yo me hice la dormida… acomodo dándome de nuevo la espalda pero esta vez acomodándome disque dormida levante lo más que pude mis nalgas y las pegue a su cuerpo… instintivamente Arturo se apartó de mí al contacto pero yo seguí n mi papel de dormida, estuvimos así un par de minutos, un momento en completo silencio, no creí que algo pasaría pero afortunadamente y para mi completa suerte, Arturo había captado el mensaje, sentí como se volvía a acomodar pero esta vez en dirección a mí...sentí como pegaba muy lentamente su verga a mis nalgas para no despertarme, fue una sensación tan deliciosa, podía sentí su miembro pegado a mi rajita era un bulto duro y grande, yo solo pensaba “al parecer todo esto tendrá un final feliz”
Comencé a empujar suavemente mi culo hacia él y el respondía con pequeños arrimones simulando una penetración...su respiración comenzaba a agitarse y yo solo mordía mis labios disfrutando de la escena en aquella turbia situación… "estas despierta verdad" me dijo en tono discreto...ese fue sin duda el botón de encendido para Karla...voltee enseguida y le dije con voz suave “si amor”, se abalanzo hacia mi abrió mis piernas y me hizo sentir el peso de todo su cuerpo, puse mis brazos alrededor de su nuca y comencé a besarlo, su aliento era asqueroso sabia a alcohol del 86, pero me besaba como loco, metía su lengua por toda mi boca y daba pequeños mordiscos a mis labios, su pelvis simulaba una penetración pero el rose de su pene con el mío lastimaba así q lo dirigí a cambiar de posición, se acostó y yo al lado seguí besándolo mientras le apretaba y acariciaba su verga por encima del pantalón… podía sentir su tamaño y lo duro que ya lo tenía, comételo putita me decía entre besos...sin que me lo dijera dos veces baje mi cara hasta su cintura desabroche su pantalón él lo bajo hasta las rodillas y abrió sus piernas..
Al instante aquel macho inundo mi olfato de su fuerte olor, era una mezcla de orín y líquido seminal añejado, ese olor a hombre que todos conocemos, esto al instante me puso a mil, desabroche mi pantalón y me saque el pene por un lado de mi tanga el cual estaba erecto por la excitación...me dedique a no más que deleitarme de aquel miembro caliente y duro, baje su bóxer hasta las rodillas y comencé a pasar su verga ya mojada por mi nariz y labios sin meterla a mi boca, la agitación de Antonio era cada vez más notoria, arqueaba su pelvis al ritmo que masturbaba su verga, acaricie sus huevos grandes mi boca se hacía agua, no aguante más y la metí lo más que pude a mi boca llenándolo de mi saliva...succionada su glande saboreando sus liquitos y lo sacaba solo para pasar mi lengua por todo su contorno…
Su olor ahora se había mezclado con mi saliva y no iba a permitir que ni una gota de sus líquidos se me escapara, a esta alturas ocultar el ruido de su verga con mi boca era casi imposible pero de habernos descubierto ya nos lo habrían hecho saber jjejjejje...además créanme que en esos momentos nada me importaba, chupaba sus huevos peludos y gordos unos a uno y eso le encantaba, tenía la verga tan mojada con mi saliva que pudo fácilmente metérmela en ese momento sin que me lastimara...lo masturbaba rápido para que terminara y me detenía de golpe para meterla a mi boca (que lindo es tener ese control con tu hombre)...me decía cositas como "que rico lo chupas putita", "se nota que te encanta"...."que puta eres"... me encantaba que me hablara así mientras me tomaba del cabeza controlando el ritmo de mi mamada para en momentos clavarme toda su verga provocándome por poco el vómito…era como si quisiera matarme de asfixio...
”Te lo quiero meter" me dijo, pero aunque yo moría porque así fuera le dije que no, mi cuerpo temblaba ya no de frio si no de la excitación y él lo que quería era correrse como loco (lo sabía porque yo también soy hombre)…así que decidí satisfacer a mi macho con una corrida de película porno (eso nos encanta a los hombres cierto) me metí la verga en la boca y con mi mano apreté sus huevos al mismo tiempo para estimular su eyaculación....”ya ya ya..." alcanzo a decir antes de que me inundara la boca de su espeso y caliente semen...casi me ahogue de la fuerza con la que me los hecho, trague rápidamente su leche caliente y agria, no perdí tiempo y lamí rápidamente mi mano con residuos y recogía con mi dedo los que fueron a dar a mi mejilla y nariz....
Limpie también los que cayeron en su abdomen sudado con mi lengua es solo que adoro el sabor del semen y el de Antonio resulto ser muy agradable, acaricie un poco su pene que perdía firmeza y Antonio respiro despacio recuperando el aliento, me acomode a su lado con mi boca, cara y manos oliendo a su verga, baje mi mano para abrocharme el pantalón y encuentro mi entrepierna húmeda, me quede con ganas de correrme también yo pero lo antes sucedido había sido más que suficiente por aquella noche.
Antonio me agradeció acariciándome la pierna, subió su ropa, nos dimos la espalda y dormimos, a la mañana siguiente pudimos conocernos con la luz en la celda, nos sonreímos e hicimos más ameno el tiempo que restaba para salir, platicando de temas mucho más interesantes que la noche anterior, intercambiamos números al salir y cada quien tomo su rumbo.
Obviamente quedamos en repetir pero ahora si me haría suya con su deliciosa verga, claro q esa se las cuento en otra ocasión :) ...oh y olvidaba decirles el oso que hice en el camino con el pantalón manchado de la entrepierna...oups!
Yadira y yo que me llamo Luis, llevamos varios años de casados, pero no nos consideramos una pareja común y corriente, ya que desde que éramos novios nos dimos cuenta que tanto ella como yo somos personas de mente abierta, ella no se considera dueña de mi cuerpo, ni yo tampoco me considero dueño del suyo, por lo que si nos place en algún momento llegar a tener relaciones con otra persona, las disfrutamos abiertamente, sin que por ello el amor que nos sentimos mutuamente se vea lesionado o disminuido. En ocasiones tanto ella como yo también le damos rienda suelta a nuestras fantasías, con la completa colaboración tanto mía como de parte de ella.
Relato erótico enviado por narrador el 13 de March de 2011 a las 21:45:11 - Relato porno leído 120890 veces