Una clase pasa a ser una secion de una cojida inolvidable
Relato
De camino a unas compras me encontre con mi sobrino 7 años menor en ese momeno, yo tenia 22 años; me saludo y platicamos un rato al despedirnos con un beso en la mejilla movio su rostro besandome en la boca, en lugar de molestarme lo bese aun mas profundo, el queria hacerlo desde hace mucho y al notar que no lo alejaba se emocionaba aun mas. Se hacia tarde por lo que lo detuve, esta realmente exitado, podia notarlo bajo su pantalon.
-¿Puedo verla mas tarde tia?- me pregunto abrazandome mientras daba besos en mi cuello
-Si- respondi sin pensar en ese momento que mis padres estarian en casa
Mas tarde llego, mis padres lo recibieron como cada ocasion que hiba a la casa. Se excuso que tomaria clases para algunas de sus materias de preparatoria. Subio a mi habitacion sin resistirse a besarme, comenzo a hacerlo de manera apresurada. Escuchamos los pasos acercarse, por lo que cumpli en darle algunas clases. Durante las cuales no dejaba de acariciarme bajo el escritorio, meter su mano bajo mi blusa o la falda. Y por supuesto meter sus dedos en mi vagina que ya se encontraba muy humeda.
Mis padres solo entraron para avisar que saldrian un rato, en el momento que nos quedamos solos se abalanzo sobre si quitandome la ropa, apretando mis pechos mordiendo mi pezones ya duros por la exitacion, y metiendo sus dedos una y otra vez haciendo que mi vagina estuviera caliente y muy humeda.
Se detuvo solo para ponerse un condon, tenia experiencia haciendolo, ya no era virgen; eso me calento aun mas.
Sin decir palabra me abrio de las piernas, acercandose lo suficiente comenzaron los besos aun mas pasionales, nuestras lenguas luchaban, fuera y dentro de nuestras bocas, mordia sus labios.
Sentir su pene, que estaba muy duro ya en ese momento, entrando de un solo golpe fue maravilloso, movia su cuerpo como el buen deportista que era, fuerte y rapido por completo sentia entrar y salir su gran y duro pene, que apesar de su corta edad sabia usar muy bien.
Respiro agitado, se detuvo un momento y aun se encontraba muy duro.
-Esto es super- dijo antes de pedirme que se lo mamara. Queria sentir como lo hacia sin dejar de decir esa palabra -Super, Super- entre gemidos -MM que rico se lo traga todo tia- Mientras undia en mi boca todo su pene que estaba muy grande y grueso.
Me levanto de pronto puso su cuerpo sobre mi comenzando a penetrarme de nuevo, pero con aun mas fuerza, gimiendo de placer mientras mi vagina apretaba cada vez que entraba, podia sentir su calor. Mientras jadeaba me hacia gemir de placer.
-aaah que rico me cojes- grite mientras el no dejaba de repetir -Super, que increible- moviendose mas y mas rapido.
Pasaron unos minutos cuando en una embestida mas fuerte se vino. Se acosto muy agitado aun lado mio. Comenzando a besarme de nuevo.
A los pocos minutos se tenia que ir a su casa por lo que se vistio, no sin antes en la entrada de mi casa cojerme de nuevo, cubriendome la boca para que los vecinos no escucharan. Antes de abrir la puerta me beso mordiendome un labio prometiendo que volveria una semana despues. Pero esa sera otra historia.