Un día de tanto en que yo regresaba a casa, más temprano que de costumbre, al entrar me pareció raro no encontrar a mi suegra, en el recibo. Fue cuando escuché unos profundos gemidos que salían de su habitación…
Relato
Sigilosamente y procurando no hacer nada de ruido, me acerqué a su puerta, y como estaba entreabierta, con toda claridad pude ver a la vieja, dejándose dar verga, nada menos que por un sobrino mío. Bueno yo no soy de los que les gusta interrumpir, por lo que de la misma manera que llegué me retiré, escuchando como mi suegra, le pedía al Nelson mi sobrino que le diera más y más duro.
Como entiendo que eso es algo que realmente a mi no me importaba, no hice comentario alguno, con respecto a eso. Es más hasta en el fondo, pero sin decírselo, le agradecía a mi suegra, que fuera tan considerada con mi joven sobrino. Como al mes, sucedió algo similar, pero en lugar de mi sobrino, se trataba de Joaquín, el jardinero que se encargaba de trabajar nuestro jardín. Luego llegué a la conclusión de con razón no me cobraba tanto por su trabajo.
Y así fui pillando a la vieja en varias ocasiones, pero siempre con distintos tipos. Hasta que un día que yo me encontraba libre, y mi mujer se encontraba fuera de la ciudad con nuestras hijas. Que vi que lo doña estaba sumamente nerviosa, como que me preguntó en un sinfín de ocasiones, si yo no pensaba irme a trabajar. Ya cuando se dio cuenta de que yo iba a quedarme el resto del día descansando en la casa, la escuché hablando por teléfono, diciéndole a quien sabe quién. Mejor lo dejamos para la semana próxima, él no va a salir…
Yo la verdad, es que la vieja no me llamaba la atención en lo más mínimo, pero cuando la vi en su cuarto, vestida únicamente con una tenue bata de dormir, mi cabeza, comenzó a imaginarse cosas raras, y mi otra cabeza, como que le dio por quererse levantar. Yo me dije, que eso no podía ser, pero al poco rato me di cuenta de que no dejaba de pensar en las nalgas y tetas de mi suegra. Y no sé por qué, yo que estaba acostado en mi habitación, me dio por llamarla.
La doña apareció, con su batita puesta, y casi tuve una tremenda reacción. La que ella de seguro se dio cuenta, ya que eso parecía una tienda de campaña, bajo las sabanas. Sus ojos se clavaron, en el montículo, y haciéndose la pendeja, de momento me dice. Creo que debo poner a lavar esta sabana, y zas… que me la arranca, dejándome totalmente desnudo sobre mi cama. Mi suegra me observó, se sonrió, y me dijo. Mira vamos a dejarnos de pendejadas, yo quiero lo que tú tienes, y tú quieres lo que yo tengo, así que, qué me dices.
La verdad es que no lo pudo haber expresado mejor, yo solamente sonreí, y ella dio por entendido que teníamos un acuerdo. Por lo que la vi quitarse la translucida bata, y meterse en la cama. La verdad es que no supe cómo fue que nos comenzamos a besar, y a medida que lo fuimos haciendo, mis manos fueron explorando todo su denudo cuerpo, hasta que ella sonriendo, abrió bien sus piernas, invitándome a que la penetrase.
Así que a medida que mi verga la fue penetrando, ella se puso a gemir, y a irme diciendo la mucha falta que le hacía una buena verga como la mía. Cosa que la verdad sea dicha, la vieja sabe como excitar y calentar a uno. Yo en un sinfín de ocasiones la penetré, tanto por el coño como por su sabroso culo, y no conforme con eso, después de haber expresado un exagerado orgasmo, la condenada se dedicó a mamar mi verga hasta que ya no me dejó una sola gota de leche.
Bueno, mi mujer desde luego que ignora todo eso, mi suegra, se que ocasionalmente invita a la casa a alguno de sus amantes, cuando no es que espera que su hija salga de casa, para asaltar mi cama.
Le subí completamente su falda abriendo sus piernitas exquisitas, inicie a mamarle sus piernas cada centímetro de ellas hasta que llegue a su zona vaginal todavía cubierta por su calzón, con mi boca muy lentamente le fui retirando el calzón hasta que le vi por primera vez su vagina hermosa, la cual estaba súper mojada de sus flujos vaginales, ella comenzó a gritar de placer y fue más cuando tome un poco de crema de chantillí aplicándole en toda su raja vaginal, con esto empecé a comerle el coño.
Relato erótico enviado por Anonymous el 25 de September de 2009 a las 17:28:48 - Relato porno leído 234373 veces
Llegue al bar y estaba Sebastian esperandome, me vio y no sacaba su vista de mi cuerpo, lo salude con un beso muy cerca de su boca para hacerle los ratones, inmediatamente me pregunto si no queria ir a su departamento (era del padre que se lo habia dejado encargado por unos dias ya que estaba en Chile). Le dije que bueno y subimos a su auto- Llegamos a su departamento y cuando entre hice un movimiento sexy con mi culo.....
Relato erótico enviado por gatitacelosa el 04 de April de 2012 a las 23:28:46 - Relato porno leído 201931 veces
Si te ha gustado Mi suegra resultó ser bien puta… ( CON fotos) vótalo y deja tus comentarios ya que esto anima a los escritores a seguir publicando sus obras.
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narrador
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Comentarios enviados para este relato
katebrown
(18 de October de 2022 a las 22:12) dice:
SEX? GOODGIRLS.CF katebrown
(18 de October de 2022 a las 19:46) dice:
SEX? GOODGIRLS.CF
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