Mi tía me hizo tener sexo y me gusto tanto que seguí
Relato
A muy temprana edad tuve una intensa actividad sexual, producto que una tía postiza mía, que resulto ser ninfomana, me sedujo o mas que eso me llevo a tener sexo, yo fui presa de ella, por que era bastante dotado.
Un día saliendo de la ducha, no note de su presencia, en el lugar donde descubrió mis dote, peneana.
Yo inocente sin tener mucha idea del sexo y todo lo referente a ello. Fui inocente presa de su vorágine sexual, cosa que transformo, mi vida.
Luego de ese echo, de la salida de la ducha, ella comenzó a decirle a mi madre que si podía mandarme a su casa, para ayudarle a hacer alguna tarea menor, que mi madre gustosa acepto, pero yo me rehusaba, pues no me gustaba la idea, así sistemáticamente tenía excusas , hasta que no pude mas, evitar ir a la casa de ella.
Un día mi madre tuvo que viajar de urgencia por un par de días al interior por razones familiares, así que me mando a quedarme, a la casa de Lucena mi tía postiza.
Lo primero que me impacto era la forma en que andaba por interior de su casa, andaba con un camisón, corto trasparente, no usaba corpiño, solo una bombacha chiquita, a mi como no tenía mucha idea de la cosa, me gustaba verla, por que era imponente mujer, pero nada mas, yo estaba en lo mío, paso la mitad del día, sin mucha insinuación, hasta que llego un momento que me dice no te vas a duchar yo inocente le digo si tía en un rato me ducho, entre bajo el agua, bastante caliente , en un instante irrumpe ella totalmente desnuda, me dice, no te molesta, aprovecho, nos bañamos juntos, se puso a mi lado, sus senos prominente me los metía en mi cara y giraba, que mi boca, le rozaba, yo veía que ella se excitaba, iba con ellos de una lado a otro. Comenzó a emitir como unos mugidos, me dice, que desarrollado estas, me dejas, enjabonarte, yo no entendía, solo la miraba. Tomo una esponja, y fue de una a la zona de mi pene, lo tomo con una mano, y con la esponja, comenzó, a masturbarme, cosa que
Ya puso a mi miembro, erecto, duro, y latiente, ella hábil, dice vamos a limpiar a fondo, tiro el cuerito para atrás salio la cabecita, limpio un poquito dijo esto tenemos, que limpiarlo bien, ante mi mirada, atónita, cerro la ducha, cuando el agua dejo de caer, se arrodillo, se la puso en la boca, comenzó, una lamida con los labios, lamia con la lengua, sensación que me gustaba, nunca antes, pero me daba placer sentir sus labios, me daba como un cosquilleo, y no digo nada cuando comenzó a introducirla en lo profundo de su boca, de a poco fue aumentando, su ritmo, y mi desorbitación, sentía, como una sensación de goce, rara, pero de placer, me gustaba, lo hizo un rato, hasta que de pronto corto, me dice creo que esta muy limpia, ahora tenes que limpiarme, a fondo a mi, luego de secarnos me tomo de la mano, yo tenía mi miembro, duro, rápido me llevo a su lecho, se acostó me hizo montarme, tomo mi pene, lo masturbo un poquito, me dijo, lo ponemos, y comenza a limpiar entra y Salí, así me queda bien limpia, sin saber mucho hasta allí, le hice caso, entraba, y salía, sentía su cosa mojada, calida, me pedía apúrate, apúrate mas, hasta que de lo rápido, que iba, comencé a sentir un cosquilleo, cada vez mas profundo, hasta que ella gritaba si, si, y sin entender de mi pene, salio el primer chorro de leche, que me estremeció, y me dio un placer, nunca imaginado, ella me tomo de atrás y me apretó, contra ella, me dijo quédate, quédate así, hasta que sentí como ella pego un par de empujones, como corcoveando.
Me quedo abrazando, un rato, acariciando, me daba placer sentir sus caricias, tomo mis manos y las llevo, a sus pechos y me enseño a rozárselos, yo estaba viviendo, una excitación nunca vivida. Por un rato largo, hasta que se tranquilizo, yo estaba confundido, pero a la vez con lindo sabor, de placer.
Al rato quedo, quieta comenzó, a enseñarme, de lo que podía hacer un hombre y una mujer, yo algo sabía pero nunca me imagine lo que iba a vivir, y en lo degenerado en que ella me iba a convertir, no puedo contar en este capitulo. solo hasta donde me llevo y las cosas que me hizo hacerle
A partir de ese momento ya no pude ver a mi sobrino como tal, sino ya lo veía como un hombre que deseaba cogerme sin control, a cada oportunidad que mi sobrino tenia lo aprovechaba para ver mi cuerpo, esto era cuando me cambiaba, bañaba, entre muchos otros momentos que tenia para verme y lo más lascivo era que yo no hacía nada para evitar que me viera, al contrario cada vez que me bañaba dejaba la puerta abierta para que me viera y así en la ducha con la certeza que me estaba viendo yo hacía movimientos sensuales e incluso con el pretexto de lavarme mi zona intima yo me la tocaba con tanta sensualidad que sin duda sabia que él tenía su pene bien erecto desde donde estaba viéndome.
Relato erótico enviado por putita golosa el 27 de July de 2010 a las 23:14:27 - Relato porno leído 309821 veces
Si te ha gustado Mi tía me hizo descubrir el sexo 1º vótalo y deja tus comentarios ya que esto anima a los escritores a seguir publicando sus obras.
Por eso dedica 30 segundos a valorar Mi tía me hizo descubrir el sexo 1º.
felipepan
te lo agradecerá.
Comentarios enviados para este relato
franciscofelix
(28 de May de 2015 a las 07:48) dice:
la verdad para centro y suda marica son muy calientrs en general las mujeres son expertas casi en su mayoria al mamarle la verga a un hombre
katebrown
(18 de October de 2022 a las 21:31) dice:
SEX? GOODGIRLS.CF
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