Tenía unos doce años cuando empecé a darme cuenta que mi físico atraía a las mujeres, estas eran unas inocentes niñas, otras adolescentes mujeres y otras maduras hembras, todas gustaban de acariciarme y abrazarme unas con inocencias otras con maldad.
Relato
Tenía unos doce años cuando empecé a darme cuenta que mi físico atraía a las mujeres, estas eran unas inocentes niñas, otras adolescentes mujeres y otras maduras hembras, todas gustaban de acariciarme y abrazarme unas con inocencias otras con maldad.
Me describiré soy un caso raro en mi familia dice mi tío, eres de pelo castaño, mis ojos tienen una especialidad azules cuando hay sol, grises si esta nublado y en la penumbra de la noche color castaño un café muy claro, y como me encanta andar encaramándome a los árboles y ayudo a mi abuelo en cortar leña para la casa y para vender a los vecinos mis musculatura toráxico es desarrollada.
Estas características de mi cuerpo atraen a las mujeres, tanto de mi familia como vecinas. Me dejaba querer y manosear por las hembras, unas eran púber, otras casadas, otras casadas mayores con hijos, otras inocentes muñecas que acariciaban mis cabellos o me robaban disimuladamente un beso… Mi abuelo miraba y me aconsejaba cuídate Leo me decía, las mujeres no te traerán momentos nada bueno… gozaras de ellas, pero traen los peligros con ellas. Debes fijarte en que la que tu elijas sea una mujer que le interesa tu persona y no tu físico, no lo entendía, pero le decía si abuelo y gracias.
Al cumplir mis catorce años ya me molestaban las caricias y agarrones de las mujeres… al cumplir mis quince años ya las miraba con otros ojos y mi abuelo me decía…, estas despertando a la vida, cuídate o te van a enredar en algún lío estas mujeres…, no te metas con mujeres casadas son peligrosas, cuídate de las solteras te querrán solo para ellas, mejor enrédate con una madura casada con hijos, esta callara por compromiso y tú también…
Nunca creo que pensó mi abuelo que su nuera, mi tía Romina se fijaría en mí…, esta tía de 26 años casada con su hijo de 35 años Ismael, tenía dos hijos Ismael Antonio un chico busca líos, pero que recurría a la protección de la madre o el padre en su cobardía de 8 años, una nena de cinco años, mi tío en un comienzo ayudaba en los camiones al vecino Carlos de 40 años casado con Karol de 37 años tres hijas de 12, 9 y 5 años…, luego comenzó a manejar uno de esto lo que molestó a mi tía, hoy el tío pasa mas arriba del camión que arriba de la tía lo que tiene a la tía muy, pero muy insatisfecha…, un día mi tía pillo a doña Karol acariciándome y manoseándome lo que no le gusto y tuvo algunas palabras con ella, mi abuelo de lejos miró y me dijo, te das cuenta como pelean por ti esas mujeres una te defiende y la otra te desea, cuídate de las que te desean son peligrosas a tu edad…, lo que no se imagino mi abuelo es que ambas mujeres me deseaban…
Esa tarde mi Tía me sale al paso cuando volvía del colegio y me dice esta tarde después de almuerzo te necesito para mover unos muebles…, inocente le digo almuerzo y vengo.
Vuelvo como una hora después y ella pregunta a sus hijas por Ismael hijo y la niñas le dicen que fue a jugar a la pelota con los otros chicos a la cancha…, entonces ella saca un dinero y le dice vayan a comprar helado y luego vayan a la plaza a jugar que ella moverá los muebles conmigo y no desea ser molestada cerrándole la puerta de entrada a sus piezas con cerrojo… no me inquieté era mi tía y quería ayuda para mover los muebles… grueso error… apenas salen las niñas ella me dice ponte cómodo que vamos a transpirar sacándose su blusa, queda apenas cubiertas su tetas por un diminuto sujetador, casi se me salen los ojos al ver esos senos chicos, pero contundentes, y me ayuda sacándome mi polera…, al hacerlo sus pechos se apoyan en mi tórax y su contacto con mi piel me excita engrandeciéndome mi pene, este crece riguroso, grueso y petulante no sabía como ocultarlo en mi delgado pantalones de tenis corto que vestía…, mi tía lo notó…, y descaradamente se sube la falda en una de sus piernas apoyando esta sobre la cama, me dice que es para bajar la maleta que esta sobre el ropero, pero su pierna me muestra su muslo delicioso y parte de sus rosados calzones, eso me mata y mi pene es una carpa de circo en mis pantalones por lo erguido. Ella lo mira y tocándomelo me dice ¿esto es por mi? Y mete sus manos bajándome mis pantalones y slip sacándome entre sus manos mi pene encumbrado exaltado que me llegaba a doler…, ella lo mira lo ubica entre sus piernas diciéndome esta mañana me dio rabia que la Karol quisiera robarme lo que es mío, este pene me pertenece es mío, yo voy a ser la primera en probarlo ¿verdad? ¿es mío? Me dice, y ya había metido mis manos entre sus piernas y me había encontrado con sus calzones mojadísimo y se los bajo mirándole esa mata de velo que cubría su vagina, estaba estimuladísimo y no respete que fuera mi tía acostándola en la cama y subiendo su falda acomodé mi pene en su entrada vaginal…, como gimió al sentir mi pene en la entrada de su vagina… no…, soy tu tía…, no … me decía, pero sus manos aferradas a mis nalgas me apretaban contra su cóccix, meneaba sus caderas desesperada…, se quejaba no sobrinito rico…, no mi pelo de cobre…, no me lo metas soy tu tía y me apretaba con sus piernas cruzadas en mi trasero contra su cuerpo…, pronto mi pene comienza a ensanchar extendiendo sus carnes vaginales…, grita …, chilla…., gruñe…, excitada la tía Romina, ay…, no…, soy tuya esta entrado…, ahg… que rico tía le digo, no me llames tía dime Romy me corrige. Clavaba mi pene en su vagina y era delicioso sentir como sus carnes vaginales amasaban y cobijaban con placer a mi pene acunándolo en un delicioso coito, me movía como loco sobre ella…, no…no me dice suave así y me muestra el meneo llevando ella el ritmo con sus caderas, este ritmo iba en aceleración suavemente y al cabo de cinco minutos ella explota diciéndome ahora destrózame muévete…, la clavaba con gran violencia… chillaba al ser empalada, sacaba mi pene hasta casi sacárselo totalmente y volvía a clavarla me dolía mi pene a veces or que lo sacaba demasiado y ella gruñía de pasión y dolor al sentirse embutida con gran fuerza hasta mas allá de su profundidad de vientre gimiendo y llorisqueando de placer y gozo…, pronto sentí que mi apetecida Romy se arqueaba y templaba su cuerpo abrazándome mas que excitada… gimiéndome tuya…tuya …, soy tu puta, soy tu mujer…, eres mi marido… ahg, ¡oh…, ah…! tuya y mi pene siente que es mojado por los elixir de la pasión de la deliciosa y excitada mujer que copulaba conmigo entregándome sus orgasmos…, eres mía Romy le dije… si, si…, tuya, al tiempo que la riego con grandes chorros de leche tibia en su matriz, vaciándome de mis semen…, no…no me dice ella me puedes embarazar. Luego relajo y caricias por ambas partes…, ella me dice aquí en la cama soy tu Romy…, escuchaste nada de tía soy tu Romy. Ahora ordenemos no vayan a llegar las niñas y nos pillen apareándonos, ¿soy tu primera mujer, verdad? Dice mi tía satisfecha, eso quería que tu fueras mi macho perdiendo su virginidad conmigo. Ahora a cuidarnos y ni una sola palabra a nadie de esto…, silencio y me tendrás varias veces.
Me dolían mis testículos al ser la primera vez estrujados por una hembra, pero estaba feliz. A mis quince años había copulado con una hembra madura y con hijos…, pero mi pretensiones y sentirme engreídamente un galán me llevaron a desear otras mujeres, había probado una y por que no podría probar otras…, mis sentidos se fijaron en Karol esta hembra de 37 años bastante madura para mi edad, pero la deseaba y mas cuando su marido me menospreciaba llamándome engendro de puta ven a ayudarme…, decía esto por mi madre que en verdad era una mujer que le agradaba pasarlo bien sin importarle el precio…
Bien Karol se me había fijado entre ceja y ceja que sería mi mujer en la cama, gimiendo como gimió mi tía, chillando de gozo y aullando de placer por mi pene en su matriz…
Tendría que aprovechar los viajes de su marido Carlos, pero este desgraciado no viajaba fuera de la zona … ya nuevamente excitado por las caricias y arrumacos de diferentes mujeres en el paso de los días estaba excitado y ya no me bastaba masturbarme había conocido el placer de la cópula y me aparearía con alguna hembra … para mas remate esa noche al pasar por la habitaciones que daban hacia las de mi tío sentí ruidos y siseos …, me aproxime y entré observando como mi tío tenía a su mujer apoyada en la cama arrodillada en el suelo y clavaba a lo perrito su pene en su matriz, Romy solo se quejaba y suspiraba ardiente al ser copulada…, pago los platos rotos mi tía…, Romy un día estaba lavando ropa en el lavadero que estaba al fondo del patio y al mojarse su ropa este se pegaba al cuerpo y yo excitado imagínense el resultado.
Me acerque sigilosamente observando que no hubiera mujeres, niños u adulto por ahí cerca, silenciosamente me acerque a ella la abrace por su espalda como lo había hecho su marido y bajando sus calzones y mas fuerte que ella la apoyé contra el lavadero y doblándola contra este me quedó libre su trasero y sin contemplaciones mi pene a lo perrito lo ensarte en su vagina como aulló, se meció tratando de zafarse de mi penetración pero no pudo y recibió en menos de cinco minutos un apareamiento salvaje de este macho y concluida con placer en sus entrañas llenándose estas de semen.
Acabado el salvaje ataque esta me reta y me dice si estas así de caliente avísame y te citaré, pero no aquí que nos pueden fichar.
Dos noches después Carlos el marido sale para el sur en el camión y Karol estaba libre… apenas cerró el portón por donde salio el camión me acerque a ella y la manosee esta reacciono como yo esperaba devolviendo mis besos y buscando la oscuridad para ser manoseada y activamos nuestro encuentro ya ambos excitado me dice ven entremos en el taller aquí hay un colchón que se meten debajo de los camiones…, nos ubicamos sobre este y ella rápidamente pierde sus calzones y su blusa dejándome sus senos fuera de sus sujetadores donde los lamía y succionaba con placer, luego me monto sobre ella y salvajemente la trato de penetrar se queja y me muerde diciéndome sin brusquedad no estoy lista chúpame mi vagina, lo hago y a los pocos minutos ronronea ardiente esperando ser penetrada ahora si mi pene ingresa en esa mojada y excitada vagina acomodándome mi pene entre sus pliegues y gimiendo de placer mueve grotescamente y peculiarmente sus caderas acariciándome mi pene en sus musculatura vaginal…, no duramos mucho prontamente ella gruñe entre suspiros la entrega de sus orgasmos mientras yo grito mis descargas de semen en útero. Como nos abrazamos y besamos ardiente el uno del otro, Karol me dice en mis oídos quiero un bebé con los ojos tuyo. Embarázame de un bebé con tus ojos.