Mi vecina amorosa y juguetona fue mía

Este día no hay clases por lo que me quedaré hasta tarde en cama le digo a mi madre, bien me dice ella, pero con tu papá tenemos que ir al hospital, bueno digo no me necesitan ¿verdad?..., no dice mi madre en eso suena el timbre de casa. Abre mamá y es la vecina que viene con su hija Elena
La madre de esta le dice si puede dejar a Elena en casa, no puedo confiar en ella, tu sabes por que dice... bueno dice mi mamá la dejaré con Leo yo también voy a la calle...
Salen todos y me dejan en mi pieza a esta beba de dos años menor que yo, que tengo 15 ella tiene 13 años, oye le digo parece que nos abandonaron en la casa, digo... ¿Qué quieres hacer?..., me contesta acostarme contigo a tu lado... me aparto y se encarama en mi cama, oye me dice tu estas en pijama y yo vestida, igualémoslo saquémoslo la ropa y así estamos ambos iguales, comienza a desvestirse..., la miro sorprendido y me dice sácate tu ropa..., quedaremos desnudo un hombre con una mujer digo..., ¿nunca has estado desnudo con mujeres? Me dice.., si le digo, pero no con niñas chicas..., oye..., oye no soy una niña chica mira me dice y se muestra desnuda.
Ambos estamos desnudos en la cama y ella me dice tienes un campeón pulcro y macizo para mi ¿verdad? A que te refieres le digo... A tu pene me contesta... entonces reacciono y tu tienes algo para mi..., si esta deliciosa entrada de mi vagina ya fue probada por dos hombres y la encontraron buena, me dice... ¿quieres probarla?
Pasmado no contesto, pero si toco y su vagina casi sin vellosidades esta mojada..., ella coge mi pene y este comienza a crecer al ser manoseado por sus manos..., se agacha y lo chupa..., este crece hasta ponerse duro, obeso y extendido..., si me dice tienes buen campeón, claro que si me lo metes me partirás en dos..., y sigue chupándolo.
Diez minutos después estoy hirviendo, mas caliente no puedo estar y la acomodo en la cama, oye cuidado me dice es demasiado grande y me harás gritar y hasta me vas a partir..., pero sabes quiero tenerlo en mi cuevita caliente, quiero tenerlo en mi vagina, métemelo. No necesite sus ordenes estaba a mas de mil y clave violentamente mi pene en su vaina vaginal hasta el fondo..., yo creo que el grito que pegó se escuchó hasta en su casa, como se sacudió y estremeció al estar introducida por mi pene, salían lagrimas de sus ojos y me arañó la espalda al enterrarme sus uñas, salvaje..., me duele decía..., sácalo..., oh tremenda tranca que me encajaron..., ah estoy incrustada hasta mi garganta.., que pene tienes ..., ah..., oh..., quédate quieto..., hmm ahora muévete despacio..., suavemente fui acelerando mis movimientos dentro de su vientre en mis sacadas y metidas de mi pene en su vagina cambió sus rezongos dolorosos por suspiros placenteros a medida que se acostumbraba con mi pene en su matriz, luego fue tomando mi ritmo y prontamente movía sus caderas a mi ritmo, comenzando a mover su cuerpo y abrazarme gozosamente y placenteramente al tiempo que gemía..., suspiraba y consumaba la penetración de mi pene en ella agitando desesperadamente sus caderas con movimientos un poco brutales tratando de extraerle a mi pene sus leches y ella me decía al oído..., eres mío... dame tu leche..., estremecimientos fueron desvergonzados, escandalosos, como se meneaba, se apareaba desesperadamente con todas sus fuerzas, quejándose de que mi pene era muy grande para ella..., en sus desaciertos que hablaba me decía, deberías metérselo a mamá... ella goza con penes grandes..., ah ...oh ...me llegan ....oh ...me voy ... soy tuya ah... ah y moja dentro de su matriz a mi pene con sus fluidos llegados con su orgasmo abrazándome y besándome con desesperación ..., hmm tuya dice y se entrega desfallecida en mis brazos semi desmayada de placer..., aprovecho para ensartarla más fuerte y con sus fluidos mi pene se movía con mayor facilidad llenándola de mi semen y mis leches que vacié inundándole su útero. Caí a su lado agotado. Pasa el tiempo y nos vestimos para ver televisión en eso suena el timbre es la vecina Doris que viene a recoger a su niña..., espero me dice que no se haya portado mal..., no mamá dice esta solo probé el macizo y tremendo pene que este tiene si lo ves tú, quieres tenerlo metido en tu vagina por que en verdad es grande, grueso y lanza como dos litros de leche con su semen..., Doris abre tamaños ojos mirándonos... luego me dice en verdad la cogiste y lo tienes tremendo..., si, contesto... ella reacciona tomándome de una mano y me encierra en mi dormitorio diciéndome la traje aquí por que esta anda loca por el Manuel y aquí la coges tú..., además le gustó por que lo tienes grande y duro, me dice...
Ahora no puedo confiar en ustedes dos por se van a volver a juntarse en un enlace. Escúchame, no quiero que vuelvas a metérselo a mi niña, si tienes necesidad me buscas a mi y me lo entierras a mí..., oye le digo ahora tengo necesidad de una hembra..., lo hago contigo o con...... no alcanzo a terminar, ella se saca sus calzones, se sube su falda a la cintura y se acuesta en mi cama, diciéndome ven veremos que grande lo tienes... miro a esta una mujer muy atractiva y para ser más congruente conmigo mismo. Diré que está muy buena, está bien sabrosa. Tiene unos pechos bastante grandes redonditos, muy jugositos y muy bien puestos ya que no los tiene caídos ni nada por el estilo, además tiene una caderas que saltan a la vista de inmediato, eso fue lo primero que me encanto..., no pensé en nada mas y me desnudo, sacándole su blusa dejando esos sabrosos senos a mi aprobación y los deseo, recorro su talle, me pone una carita de angelita inocente, no aguanto mas mi pene me dolía al desarrollarse y estaba duro como un tronco, lo ubico en su vagina y con fuerza punzo en contra de sus entrañas, esta se dilata a la presión de mi glande dilatándose y haciéndole doler acomodo medio pene en su vagina, gime y se revuelca adolorida..., con cuidado me dice, seré tuya, pero no me desgarres..., comienzo mi baile de entre y sale de su matriz y ella me acompaña en el ritmo y luego es ella la que marca este ritmo desvergonzada y escandalosamente, gemía y gritaba, me acariciaba, me besaba, me apareaba, me meneaba desesperadamente..., era una mujer casi trastornada por el placer de ser poseída. Diez minutos duramos entre quejidos y suspiros en nuestra frenética copula, luego sus orgasmos y la llegada de mi cúspide apareo y descargamos ambos nuestros fluidos, los cuales inundaron su matriz saliendo en abundancias por sus muslos y medias. Me abraza diciéndome si, eres un maravilloso semental, desde hoy no mas con mi hija yo seré tu amante hace 32 años que nací y 16 que busco que busco cosuelo en un macho solo para mí y hoy te encontré..., eres para mí y nadie mas olvídate de mi hija.
Mi madre no lo sabe, pero su vecina y amiga Doris, se revuelca gozosa conmigo en la cama y yo feliz de tenerla por amante, mas si nos apareamos mínimo dos veces por semana.