Mi vecina me pidió una olla prestada

Mi vecina me pidió una olla prestada
Muchas veces me pregunte que hombre no ha soñado que una mujer con la que te cruzas todos los días o casi, por un golpe de fortuna termine en la cama llevando a la realidad algo que nunca pensaste o se te cruzo en la cabeza un poco de esto me paso, un día inesperado, y de pura casualidad, y en algo tiene que ver mi profesión.
Terminada esta introducción, me centro en la cuestión. Una media mañana estando solo en casa dado que mi madre se había ido con un grupo de jubilados un fin de semana a una ciudad turística, yo había terminado muy tarde de grabar un par de programas de cocina, para una TV por cable que se dedica a todas esas cuestiones, en el cual me desempeño como uno de los Cocinero Estrella.
Casi desperezándome, con al pie de la cama, suena el timbre, con mucha insistencia lo que provoco que salí era casi en paños menores a ver quien era. Me puse un short, y nada mas antes de abrir pregunto quien era se escucha la dulce voz de mi vecina, muy amiga de mi madre, que me grada físicamente.
Al abrir y verme así note que repaso mi humanidad de arriba abajo, se detuvo en mi pedazo, sin embargo no me di cuenta de que tenía una erección enorme a lo cual ella si advirtió, por la expresión de su rostro lo que me trajo a la realidad y tratar de ocultar mi descomunal paquete.
Se produjo un silencio por un breve instante por la situación me pregunto por mi Madre le conté por que no estaba exclamó “que lastima quería ver que si, le podía prestar una olla de barro” agrego que mi madre siempre le prestaba a lo cual yo le dije que si que me diera un instante, le pedí que pasara a la cocina...
Caminado para la cocina yo detrás de ella, me di cuenta del vestidito que me llevaba, resaltaba su culito, y para mas no llevaba sostén resaltaba sus pechos enormes, que se marcaban en el escote de una camisita, corta ajustada, eso hizo que mi sable se pusiera de punta.
Quiero aclarar que ella tiene unos 26 añitos, una figura que todo hombre desearía poseer, como dije tiene un culo precioso y unos pechos que no te caben en las manos ...
Ella caminaba de forma sensual, cosa exacerbo mi calentura mirándola, mover de esa forma todo lo puesto hizo que mas que mirarla ...pasara a un estado de deseo, mientras revolvía todos los cacharros, le pregunte que manjar iba a cocinar ella me dice manjar me estas cachando, vos que sos un experto podes cocinar exquisiteces, me da vergüenza, voy a hacer una pollo a la portuguesa, y lo hago en la olla de barro, por que no lo quema bajo, Yo seguí, con el tema, dándole algunos consejos, que no voy a relatar no vale la pena ni interesa, si interesa que la charla sirvió para hacerla entrar en la charla y a medida que a charlábamos la cosa comenzó a entrar en el doble sentido, ella entró en el juego al punto que di por sobre entendido, que podía pasar a las acciones en concreto, cuando luego de darle la olla de barro, y gira apoyo mi pedazo, en los cantos de sus glúteos, ella se detiene, en clara respuesta a mi provocación, me acerqué mas mientras la abrace besándole el cuello, con delicadeza sutil pase mis manos a sus dos pomelos, apoyando mi bulto, ella dejo la olla y comezo como soltar el aire en un resoplido largo, y quietita se dejo llevar
mis manos subían y bajaban desde su cintura, pasando por sus pechos, rozando sus pezones duros como un roca, hasta llegar a su cara y acariciarla, sin dejar que mi miembro duro, pasara por la raya de su culo, preguntándole que le pasaba.
Sin más ella se giro en una entrega total me dice “sabes cuanto hacia que quería que me avanzaras y me tuvieras así” mientras una de sus manos buscaba mi pene como una loca, me besó con una tremenda entrada de su lengua en mi boca, al cual yo respondí apasionadamente. Su deseo se acentuó que encima de mi short su mano jugaba con mi pene. Al punto de reventar; la excitación del momento. No parábamos de besarnos, ya la situación era incontenible, ella me miró, mientras no dejaba de sobar mi pedazo, En un instante paró un segundo para quitarse el vestidito que llevaba. Ahí ataque sin piedad, esos dos enormes pechos, que se los repase con manos y lengua para mi solo, hasta que una mano mía bajo en un sencillo movimiento su tanga que acabaría por bajar, del todo luego de introducir un dedo en sus labios vaginales, estaba todo lleno de flujos, ya mis dedos eran arietes que entraban y salían en esa vagina empapada, me abalancé como un niño hambriento continué mamando sus dos tetas mientras ella me acariciaba el pelo, luego de hacerla estremecer, casi en un estado de erupción me dijo "ahora es mi turno", me tomo de la mano, me llevo hasta un diván me sentó en el... allí me arranco los el short y empezó ha hacerme una de las mejores mamadas que jamás me hayan en mi vida.
Me miraba mientras se tragaba de golpe todo mi pene, después lo sacaba jugaba con su lengua sobre la cabecita , ya apunto de estallar, mientras con una mano me hacia una paja increíble y su otra mano estaba acariciando mis bolas ... después se la metió de nuevo en la boca e incremento la velocidad y yo a punto de soltar todo lo que llevo mas dentro, me empezó a mamar de tal manera, me pese yo estaba tan en el limbo que de una que le llene la boca, yo me corrí, tan dentro de su boca, que hizo arcadas, pero de
Pronto ella me miró, hizo una pequeña pausa puso cara de satisfacción, y se iba tragando toda mi leche., todavía con mi pene en su mano la miró y me dijo " Así me gustan las vergas, grandes, duras y gordas"
Después se levantó, se acomodo todo, se lavo la cara en la pileta de la cocina termino de vestirse, sin entender nada perplejo le dije " y queres dejarme sin comida, así te vas " Papi Queda mucho del día todavía, creías que va a ser la único que vamos a hacer hoy, tengo que cocinar a la tarde vengo otra vez, vamos a terminar la fiesta como se debe terminar" fue el comienzo de una relación a sexo pleno, inigualable.-.