Mi vecinita de al lado y su madre 2

Mi departamento es pequeño un dormitorio y una pequeña habitación para sala de estudio que he transformado en un segundo dormitorio, living-comedor, dos baños uno en suite, cocina tipo americana con una pequeña mesa estantería para las copas y tazas además de cajones para utensilio de cocina.
Recién empezando mi carrera de medico cirujano, especialidad en Gastroenterología y en Cirugía Digestiva además de una segunda especialidad en Gastroenterología infantil, y Cirugía Digestiva Infantil...
Estaba ese día casualmente sin turnos y sin emergencias descansando en mi cama leyendo un folleto que me habían pasado en la calle cuando suena mi timbre..., sorprendido me levanto a ver... y encuentro en la puerta a una mujer muy atractiva, quien sonriéndome me dice, soy tu vecina me llamo Valentina, estaba bien sabrosa....
Me solicita si puedo cuidar de su hija mientras va a trabajar. Conozco a Andrea ¿Qué edad tiene?... me responde once años, cumplirá en dos meses más sus doce años. Se llama Andrea me dice Ahora me voy por que estoy atrasada al turno y gracias nos vemos de madrugada, saliendo como una loca por las escalas.
Miro las películas y son de alto contenido sexual sin ser pornográficas, instalo una en el visor y recuerdo a la niña, le digo hay que acostarse a dormir..., me responde me acuesto a las diez de la noche y son las ocho.
Sin hacerle mas caso comienzo a ver una de estas película, no llevaba ni un cuarto de hora y a la mujer dueña de casa, en la película, la tenían dos rufianes que habían entrado a robarle a su casa en cuatro patas dándole uno por el culo y el otro estaba siendo su pene mamado por esta dueña de casa, como se estremecía y gemía esta golosa mujer... había sobre la repisa una foto en traje de baño la mamá y su hija y su cuerpo se veía espectacular mas la película comencé a activarme y pronto estaba excitado, en verdad mas que excitado, necesitaba una hembra a mi lado..., en esos instante la mocosa de once años se sienta a horcada en mis rodillas sonriéndome me dice que soy muy lindo y que ella quiere portarse bien conmigo, tal como lo es con su tío cuando mira esas películas ya que este la sienta en su regazo y la acaricia..., estaba a mas de cien grados de caliente y esta niña que tiene once años, pero representa 14 o 15 años está sentada a horcada en mis rodillas mostrándome su minúscula prenda interior, diciéndome que quiere portarse bien como lo hace con su tío que la acaricia en esas monumentales piernas que tiene y mis manos estaban acariciándole ese maravilloso y gran trasero que tiene para su edad, además este es suave de piel al tacto con mis manos por debajo de su falda, estaba a mil de ardiente, y ella me dice si quiero que se saque sus calzones como le gusta a su tío..., mi pene estaba que reventaba de extendido, riguroso y desplegado por la película y ahora por el actuar de esta chiquilla, se levanta se saca los calzones y vuelve a encaramarse en mis piernas... y me dice que tienes tan duro ahí que me punza..., toca mi pene por sobre el pantalón y exclama ¡oh!, que grande está..., se parece al que se le para al hermano de Grecia cuando estamos jugando con él a los papas y Grecia permite que el se lo clave entre sus piernas..., grita eso si como se cree una mujer descompuesta al sentirse penetrada en sus carnes. Y luego se abraza a su hermano besándolo y le dice rico..., a mi nunca me lo ha hecho... mi pene al escucharla ya explotaba, le digo ¿y te gustaría probarlo en tus carnes?..., no sé y a lo mejor voy a gritar como mi amiga..., más le digo tu himen esta sin romper y eso duele..., a mi no me duele nada por que soy fuerte me dice.... Imagínense como me tenía esa bebita de casi 14 años...
La tenía sin calzones mis manos la recorrían desde sus nalgas hasta su vagina que abría e introducía mis dedos ella solo suspiraba..., logro someter a la presión de mis dedos su clítoris..., ahí gime..., ¡Ah!..., ¡oh!, que haces y suspira entrecortado..., Mm..., Mm..., déjame me esta gustando..., ¡ay..., ay..., mm!, ya déjame... si hice mía a Andrea a pesar de su edad estaba excitado y entusiasmado por ella, después fue el turno de su madre...
La madre llega esa noche entra y enciende una tenue luz, al verme despierto me dice me vine temprano ya que lego temprano mi compañera a solicitud mía, espero que mi hija no te haya causado problemas no le digo a sido una amorosa mujercita dándome placeres, pero no modestia, pensando en lo realizado con ella..., córrete y satisfáceme me dice sacándose su ropa, me correré con verte desnuda y saciaré mi pene al ver tan maravillosa mujer metiéndose en la cama..., oye me dice no te pases película te lo digo por que me acostaré a tu lado y quiero mi puesto por que tú estas en él, me traslado de lugar en la cama y la abrazo al meterse en ella, parece que te excitaste al verme desnuda me dice..., si le digo eres una fabulosa hembra y mira mi pene duro por que desea estar en tu vientre..., ríe y me dice quieres cobrar por el favor que me hiciste... si me prometes que me la vas a cuidar otras veces seré tuya, lo prometo digo y abrazo a esa maravillosa mujer, era tan deliciosa como su hija, pero mas madura y eso me gustaba..., diez minutos después Valentina era penetrada por mi pene en su matriz como se meneaba esta hembra, como gemía apasionada carnalmente sus caderas se agitaban lujuriosamente, estaba loca de placer, me gemía y gritaba caliente con mi pene escarbando en su matriz entrando y saliendo con lujuria y pasión... esa mujer que me brindaba su intimidad, la sensación fue lo mejor del momento; esa hembra sentía que sus entrañas eran invadidas por el mástil y no quería que el intruso se le escapara, por lo que apretó las piernas para aprisionar al miembro y contrajo su interior y el masaje le brindaba un placer indescriptible. Una corriente eléctrica recorría ambos cuerpos y el efecto la obligaba a doblar sus piernas alrededor de mi cuerpo y a mi caer fuertemente sobre su cuerpo en la cama..., mientras la hembra apretaba sus piernas alrededor de este, sin soltar al prisionero mástil, completamente envainada . Como nos meneábamos en esa cama si crujía ante nuestras brutales penetraciones... De pronto ella gorgorea un gemido, se comprime y abrazándome me entrega el elixir de sus gritados orgasmos de pasión abrazándome desesperada al entregarme sus líquidos bañándome mi pene. Tres meneos mas mío y caigo agotado en sus brazos bañándole con fuertes chorros de semen, leche y espermas sus entrañas inundándola y estoe líquidos corren fuera de su vagina cayendo por sus nalgas y muslos sobre las sabanas de la cama que cobijaba nuestro encuentro amoroso apasionado satisfaciéndola carnalmente de sus apetitos desenfrenados. Esa mujer era mía... en eso suena el despertador y ella me dice... estoy muerta anda tu y despierta a mi hija para que vaya al colegio... voy a su dormitorio y allí está despierta y me dice con que voracidad has copulado con mi madre..., ahora aquí en esta casa hay dos mujeres que te desean para saciarse sus apetencias carnales..., mi madre y yo, prepárate para mañana... y se levanta abrazándome y besándome entrando al baño desnuda. Miro ese desnudo cuerpo y dijo para mí..., si..., ambas serán mis mujeres, si desean mas detalles lean la Nº 1.
Andrea era una golosa esa tarde apenas llegó del colegio fue a buscarme mamá llega en una hora mas tenemos tiempo me dice... me arrastra a su cama se desnuda mostrándome su delicado cuerpo. Me ayuda a desvestirme, contándome que en el colegio narro su primera penetración a sus amigas Grecia y Sara, unas chicas de su misma edad ya que tienen 14 años, Grecia le ayuda contando también como su hermano se relaciona sexualmente con ella, mientras agarra mi pene cuando sale ardiente al aire apretándolo y luego lo besa, no aguanto mas y le abro de sus piernas, su vagina estaba mojada y recibe muy gustosa mi miembro que se introduce en su vagina quince minutos después gritaba, se meneaba desesperada y gemía diciéndome tuya...soy tuya..., le llega un orgasmo que la hace estremecerse de pasión, entregándome sus líquidos vaginales, me abrazaba rascaba mi espalda con sus uñas, me dejaría marcas, pero bueno algo hay que perder por tener ensartada a este delicioso cuerpo casi infantil meneándose desesperada ante las duras y violentas penetraciones de mi pene en su vientre ... y a su vez recibe mis fluidos seminales en su matriz... me dice tendremos que tener cuidado soy muy chica para embarazarme... cuidémoslos... en eso suena su timbre de la puerta.... nos miramos sorprendidos y trato de vestirme mientras ella tapada con su bata va a ver que sucede.
Es su amiga Sara..., sabes le dice, me tienes encharcada mi vagina de solo pensar como te hizo el amor ese macho violentamente y sació tus anhelos de ser pareada, como me gustaría que lo hiciera conmigo... cuéntamelo de nuevo..., oye le dice Andrea ¿Por qué mejor no te acuestas con él y gozas en vez de estar mojada tu vagina sin pene se mojaría con un pene entrando y saliendo en ti y tu gritarías como bestia lesionada. Su amiga la mira sorprendida y le dice ¡esta aquí!, ... si, dice Andrea y le mete al dormitorio donde estoy a medio vestir.
Sara me mira atónita alterada en su cometido como mujer y me dice tontamente..., ¿lo harías conmigo?... La jale y recosté atravesada en la cama con sus pierna fuera de ella...
Me puse de rodillas y la hice abrirse de piernas levantándole su falda plisada escolar, quedando frente a su vagina, separado solamente por sus bragas de color rosadas con encaje, eran bonitas, pero de diseño infantil Sin detenerme la jalé del trasero hacia mí y hundí mi cabeza entre sus piernas. Ni bien me acerqué noté lo caliente y húmeda que estaba esa vaginita que yo estaba a punto de comerme. Pegué mis labios a sus bragas y la besé, la lamí comenzando por su clítoris hacia abajo continuando así por un buen momento, la comencé a chupar y disfrutar. Tome su braga por los lados y se la quité deslizándola por sus esbeltas piernas, suaves como era toda su piel. Cuando vi por primera vez esa rajita frente a mí pensé estar soñando. Estaba totalmente depilada, apenas estaban naciendo sus vellos vaginal, era pequeña y estaba tan húmeda que solo quería comerla toda. Pegué nuevamente mi boca a ese sexo que tanto había deseado todo este tiempo. La comí desesperadamente, mi boca y mi lengua no parecían satisfacerse de ese húmedo placer, mi lengua disfrutaba de su clítoris rosado al igual que mis labios. Sara se retorcía de placer, se cogía los pechos, temblaba de placer y sus gemidos poco a poco fueron convirtiéndose en el compás que marcaba la melodía erótica. Desnude su torso y acaricie sus pequeños senos, mas se revuelve y gimió gritando de placer..., ella empezó a gemir un poco más fuerte. Nuestras respiraciones entrecortadas llenaban el ambiente y mi pene quería ser bañado en sus jugos vaginales que precian ríos como manaban, puse mi pene en sus pliegues vaginales, en su desesperación ella me toma de mis glúteos y me atraca a su cuerpo enfilándose violentamente mi pene en su vagina, gran griterío al sentir como este pene cual puñal lastimaba sus entrañas, quieto por favor que me duele gime... me aquieto unos instante y luego entraba y salía cada vez con más facilidad. Estaba disfrutando cada momento de aquel acto sexual con esa niña-mujer. Ella aparentemente también disfrutaba la situación y no dudaba en demostrarlo. Sus gritos, sus gemidos y su respiración lo decían todo. Alborotada me abraza, besa y menea su trasero acompañando mis penetraciones con gusto y placer..., estaba mas que excitada y meneaba su trasero, sus senos se movían al ritmo de mis entradas y salidas de su matriz, comienza a sollozar y en un gran lamento me avisa que por primera vez sus entrañas están deleitándose con un orgasmo salvaje que viene de sus alteradas hormonas, hoy satisfaciéndose con este macho.
Como se satisfacía esta chica con mi pene entre sus piernas... suspiraba, gorgoreaba, codiciaba ser satisfecha por mi pene y llegan sus orgasmos violentamente como se meneaba ante el placer del coito, como me abrazaba desesperada pidiéndome tu leche..., dame tu leche... quiero ser tuya... ante las suplicas mis testículos no pueden mas y se vacían en las entrañas de esta muchacha, con gran placer de ella que gritaba y gimoteaba satisfecha. Luego relajo Sara se sienta y me atrapa besándome y me dice por fin fui tuya... por fin un macho me apareo...
Respira profundo y me dice ¿te gusto?, a mi mamá le encanta el sexo por que en las noches lo hace con papá y en el día es visitada a veces por su primo y otras veces es el vecino que se aparea con ella.
Cuéntame cuantos años tiene tu madre digo, se caso joven me dice mi padre tiene 55 años y mi madre es joven tiene 33 años y es flaca, pero tiene un trasero de película dice riendo..., en eso llega Valentina la madre y me retiro a mi departamento, pensando en esa madre de 33 años con un admirable trasero que gusta del sexo.