Nuevamente mi tia queda prenada

Transcurre el tiempo y llevo dos meses alejado de mi tía Romina, esta lejanía me habían hecho sufrir, estaba descorazonado y abatido, necesitaba el cuerpo y ls placeres que Romy mi adorable tía y como mujer me daba, mi abuelo lo notaba y trataba de subir mi animo, pero no le era posible, me veía cada vez mas desanimado, su nieto desconocido y ello le causaba pavor por algún mal paso… por último se rinde, conversa con nosotros, diciéndome a mi… deseas saciarte con Romy, la necesitas como tu mujer, tu hembra y eso te esta consumiendo… ganaste no quiero perder a dos miembros de mi familia, pero estas son las reglas a cumplir hoy y todo este año… tanto Romy como tú las cumplirán…, la buscaras cuando mi hijo ande lejos en el sur o en el norte…, eso es unas dos veces máxima en el mes. Luego lo harán en el tiempo que ella no esté en época de parir…, no quiero hijos engendrado por ustedes dos. Otra lo harán solo en casa y cuando todos estén en el trabajo o estudiando y estén ustedes dos solos en casa… si no , no… no deseo rumores…,lo que el abuelo no sabía que yo había construido un refugio en el entretecho de la bodega que no se veía y si era cómodo para una pareja… en silencio nadie sabría que en ese refugio donde estábamos ambos esa pareja se apareaba desesperadamente…, ese día hice subir por la escala insertada al muro a mi tía Romy quien sabía bien lo que sucedería en ese refugio, pero igual de apasionada y excitada que yo sube… mientras yo me daba la vuelta mostrándome en el patio y por la higuera me encaramaba al refugio…

Me recibe en sus brazos mi apasionada, excitada y enardecía tía Romina a quien llamaba Romy, llevábamos casi tres meses de ausencia de apareamiento por darle en el gusto al abuelo, pero tanto ella como yo, su macho no podíamos olvidarnos de nuestros encuentros amorosos, nuestros brazos nos estrecharon en una gozoso encuentro, nuestros cuerpos se endurecieron estimulados y provocados al rozarnos, la tía permite a mis manos recorrer su cuerpo y por último a estas a sacarle sus ropas, mientras sacaba las mías, mis labios besaban a esa mujer desde su cuello bajando por sus senos, su vientre y finalizando estos se asientan en su vagina acariciando y estimulando con lamidos a su clítoris, esa mujer rugía por que no jadeaba ardiente, rugía excitada, sus manos se clavaban en m cuerpo como garras desesperadas por sentir nuevamente ser una perra en celo, sentirse deseada, ambicionada y apetecida era su máximo placer…, se entregaría nuevamente al sobrino de su marido, un muchacho aún con sus 15 años, pero como la estimulaba y la agredía afrodisíacamente, ella con sus 26 años no se opondría mas aun se entregaría entusiasta a los vaivenes del coito que realizara este macho contra su delicado cuerpo, sus caderas extravagantemente se meneaban con lujuria, siseaba y llorisqueaba empachada de placer, estaba siendo nuevamente satisfecha por su macho joven , Leo su sobrino hijo de una hermana de su marido, su macho, su dueño, su amo.

Cada arremetida de este pene en su matriz la hacia hasta abrir los dedos de los pies de satisfacción, si Leo era único como la zarandeaba en la cama la destrozaba en su apareamiento, pero ella era feliz gritaba, gemía, suspiraba entre cortada con ese tronco pene entrando y saliendo de su vagina, la satisfacía totalmente, nuevamente estaba en sus días de preñez y de seguro volvería a fecundarse en su útero de un hijo de su sobrino…, eso a ella no le importaba si tenía uno o tendría cinco hijos de este macho mientras le satisfaciera como solo el sabía satisfacerla, ella sabía los problema de la sociedad si conocía su situación, pero la pasión y el deseo de su amante eran mas fuertes, necesitaba a este macho su cuerpo se había adaptado a él y él era su mal necesario.


El abuelo supo de su nuevo embarazo y llama a Romy, esta le informa que recién ahora tendría sexo conmigo, por lo que según ella ese bebé engendrado en su vientre, miente diciéndole es de su marido. El abuelo feliz con la mentira y nosotros seguimos viéndonos en el refugio cuando hay gente en casa y nadie sospecha que Romy se queja y se desintegra moviendo descaradamente desnuda su cuerpo en manos de su Leo, ese trasero crea su propia vida cuando su macho entre en su vagina groseramente mueve sus caderas ante las arremetidas de su amo y señor de su cuerpo, esas caderas se agitan y arquean desesperadas cortejando al semental que la empotra, si es su puta y este es su amo.

Se queda la hembra a su lado a descansar y se duermen una media hora despierta alterada por su entrega como amante, trata de irse, pero se lo impide el macho que la vuelve acomodar en su cama y ella nuevamente como una sumisa amante recibe entre sus pliegues vaginales la invasión de ese grandioso miembro, nuevos meneos de caderas, suspiros y agitados gemidos son escuchados en esa pieza mientras esa mujer es transformada en la amante de este macho que la satisface y se place en cubrirla con su apasionado erotismo satisfaciéndola entre afligidos aullidos de placer.

Romy sabe que no podrá nunca negarse al coito con su amante y este sabe que es el amo y señor de esta hembra, su tía…, diariamente Leo la lleva al refugio de madrugada, tarde o noche…, y aquí ella es una sensible, vehemente y desvergonzada mujer copulando con su joven semental, su macho.

La desnuda y ambos sienten las caricias de todas las partes de su cuerpo en la entrega sagrada del placer en donde esta hembra mueve encarecida y efusivamente sus caderas al ritmo de las clavadas de su pene del macho, siente esta mujer como de deshonra en manos de su amante, pero no le importa es mas fuerte el deseo de ser empotrada por ese delicioso pene.

Romy sabe que su macho necesita mas acción del que ella puede darle y busca ayuda en una de sus amigas, Florencia es una mujer mal casada ya que su marido le causa mas dolor que placer en la cama a pesar de sus dos hijos, esta hembra necesita ser recompensada en las labores sexuales por u buen macho y ese macho será su Leo…, Florencia con sus 23 años y sus hijos de 5 y tres años pasa varios días sola ya que su marido viaja como chofer de un bus de recorrido interprovincial a varias ciudades distantes ausentándose dos o tres días de casa, aquí aprovecha Romy y clava la espina de la apetitos deshonestos gozadores carnal en su amiga, primero es ella quien activa a esta mujer con sus caricias y hace satisfacerse con sus caricias a esta, luego le dice que ella necesita mas para satisfacerse y ella es capaz de dárselo, pero ella debe estar de acuerdo y desearlo. Florencia ya esta activada sexualmente y a todo lo que le dice su amiga ella dice si… se enardece Florencia en sus afirmaciones y Romy trae a su amante para satisfacer, recompensar y regocijar a esta impetuosa y ardiente hembra…, al comienzo Florencia se opone, pero las caricias de su amiga ayudada por su amante terminan por mermar su oposición, Romy se queda en la pieza anexa con los chicos de su amiga, mientras escucha como su Leo hace gemir, suspirar y gozar a su amiga escuchando el rechinar del catre donde la empotra su macho y los niños escuchan los alaridos de placer de su madre…, si Florencia es vorazmente recompensada y Leo el macho sabe que visitara a una nueva amiga diariamente.

A la mañana siguiente casi de amanecida vuelve Leo de vista Florencia duda y casi se opone pero recuerda su buen pasar en el enlace del día anterior y abre su puerta, entra excitado el macho, apenas traspasa la puerta mira a su delgada conquista vestida con un delgado camisón que nada cubre por que se trasluce, vestida con un sujetador y un diminuto calzón, las manos de este se deslizan sabiamente por ese cuerpo ansioso y no demora mas de tres minutos en tener a esta hembra sisear entregada a sus hábiles dedos, apoya su cabeza en su hombro y siente ella como es alzada en brazo y trasladada a su cama donde es acomodara y su débil camisón rueda por el suelo, siente como este macho se apodera de su vagina y esa lengua voraz entre en busca de su clítoris quien responde entusiasmado a sus caricias, Florencia es una entregada mujer en sus brazos… no sabe en que momento se cambió la lengua por ese impetuoso y ansioso pene en su vagina, solo siente como sus carnes vaginales son abiertas y entra este tronco taladrando sus pliegues carnales haciéndola abrir su boca ardiente de pasión y deseando ser copulada.

Tenía unos muslos que me excitaron al ser mostrados, comenta Leo, mi pene brinco acariciándola en sus pliegues Tengo que haberlo hecho muy bien pues Florencia se quejó complacida gimiendo y suspirando, oye con cuidado mis hijos duermen al lado… luego suspiros de entrega, gemidos de placer, resuellos placenteros y mis carnes son apretadas por sus manos, luego estas casi destrozan las sabanas estragándolas entre sus dedos contraídos por el placer de las penetraciones en su matriz del pene del macho que la llevaban a la delicia y agrado de un delicioso goce que ella recompensa con dos seguidos orgasmos entregándose al macho y mojándole su pene con sus fluidos. Ante estas galanterías el macho la recompensa con chorros de semen en su matriz que ella recibe gustosa con gran bullicio y placer. Siente una pequeña mano en su brazo al ser saciada por el macho mira y ve a su pequeña hija a su lado sonriéndole, la toma y refugia en sus frazadas diciéndole que este señor me da masajes para aliviar mis pasiones le dice besándola, ella se acurruca al lado de su madre y se duerme…, Florencia me mira angustiada no te preocupes le digo es muy pequeña para comprender este acto y aprovecho de ubicar mi pene entre sus maravillosos muslos abriéndolos para ensartar su vulva, se opone al principio y después se relaja permitiendo la entrada de mi pene en su vulva, suavemente esta se abre camino en su vagina y la repleta llenándole su vagina con mis carnes, sacándole suspiros de pasión y entrega a la madre, con su hija entre sus brazos Florencia es nuevamente penetrada a lo perrito media incomoda por la presencia de su hija, pero recompensada con los movimientos ansiosos y calientes del macho…, al sentirse empalada a través de su incomoda posición por mi pene comienza a arañar la almohada y mover su cabeza desesperadamente de lado a lado, no pido permiso y ataco sus senos apresando entre mis dedos los pezones los gritos se escapan de sus labios, depravado, infame que haces reclama gimiendo excitada antes mis caricias, ya no me hagas sufrir mas y hazme tuya, estoy a mil de caliente hazme tu puta, clávame tu pene en mi vagina, pero… ahora o… ándate, como la clavaba…, gemía susurrándome soy tuya, soy tu mujer, ¡oh!, ¡ah!, infame me has convertido en tu puta…, ahg…, dame duro, empótrame fuerte quiero ¡oh, ah!, sentir mis orgasmos en eso ella acelera sus movimientos suspirando fuertemente me gime ¡ah! Mis orgasmos soy tu mujer… ¡ah!. Riégame mi vagina con tu leche, acelerando sus vaivenes de caderas al tiempo que excitada menea absorbiendo con sus pliegues vaginales mi pene que no resiste mas vaciando ríos de semen tibio… mientras ella abrazada cariñosamente a su hija entre sus brazos. Si se entregaba a su nuevo macho con su hija entre sus brazos estaba ansiosa y caliente deseando a este semental.