Follarme a mi hermana había sido lo mejor, el morbo y el deseo desatado de poseer a tu misma sangre elevaban el placer a un extremo insospechado...
Relato
Antes de que ingresaran, con mi hermana alcanzamos a escaparnos yo a mi cuarto y ella al baño echando a correr el agua de la ducha para dar a entender que alguien se estaba bañando. Yo me visto y bajo a saludar a mis padres para no levantar sospechas, trate de actuar con la mayor naturalidad posible, pero aún me hallaba algo transpirado tras la tremenda follada que había tenido recién. Fue mi padre quien nota que estaba un tanto agitado y me consulta si había estado haciendo ejercicios, y yo sin pensarlo tontamente le digo que no, me responde: - “Ahh, y tú hermana ¿dónde está?” – Ahí, me percate que mi viejo estaba sospechando algo, mal que mal cuántas veces él habrá tenido que mentir para que nadie lo sorprendiera o llegara a sospechar que se cogía a su propia hija. Fue así como yo también lógicamente mentí respondiéndole – “No lo sé… no la he visto” – Y para respaldar mi respuesta, hago un llamado al segundo piso consultando a viva voz a mi hermana si estaba ahí. Ella hace como que escucha algo, pero no entiende lo que le consultan, respondiendo desde el baño – “¿alguien me habló?” – le respondo – “sí, llegaron los papás y preguntan por ti” – y ella grita: - “Sí, estoy aquí dándome una ducha”. Yo con malicia y complacencia pensaba… si mi papá supiera el verdadero motivo de esa ducha, me mataría!!
Follarme a mi hermana había sido lo mejor, el morbo y el deseo desatado de poseer a tu misma sangre elevaban el placer a un extremo insospechado. Después de esa noche todo había cambiado entre nosotros. El más bajo de los instintos se había despertado, las miradas morbosas con mi hermana se habían instalado en nuestro diario convivir. Es más, ahora hasta podía percibir las miradas de complicidad entre mi padre y ella, y lo mejor de todo era que no sentía nada de culpa.
Solo faltaba nuestra madre – “la putita no iniciada” – y había que hacer algo con ello. Hable con mi hermana y compartí mi deseo de tener una orgía todos juntos incluyendo a mamá. Para ello tendríamos que contar todo a nuestro padre y hacerlo nuestro cómplice para que él se encargara de tender la trampa a mamá y así entrar todos en este juego de perversión familiar.
Al principio mi hermana pensó que estaba loco, que bajo ninguna circunstancia ella contaría lo sucedido conmigo a nuestro padre. Que a pesar que disfrutaba teniendo sexo con ambos, eso no era bueno, y prefería irse de la casa antes que el secreto fuera develado.
Como siempre he tenido habilidad para persuadir a los demás, terminé por convencerla diciéndole que precisamente la única manera de salvar nuestra unión como familia sería entregándonos todos a compartir lo más íntimo de cada uno, de lo contrario tarde o temprano alguno de los 3 cometería un error y tendría que pagar por los actos cometidos, ya sea porque podríamos ser sorprendidos (tal y como lo hice yo con ella y mi padre) o porque la rivalidad naciente entre mi padre y yo por ella me podía traicionar o incluso porque alguno fuese consumido por la culpa. En cambio si los 4 éramos cómplices de una unión sexual consentida, emergería una sinergia y eso jamás nos separaría, forjando aún más los lazos de amor entre nosotros. Una vez más mi hermana cedió a mis argumentos y me manifestó su aprobación.
Fui yo quien habló con el papá contándole todo lo que estaba pasando. Extrañamente no se escandalizo, por el contrario, fue muy receptivo. Me confesó que él sospechaba que algo estaba pasando entre mi hermana y yo, que no se sentía con el derecho a recriminarme ni mucho menos a mi hermana, que no sentía celos, ni tampoco la culpa esperable para estos casos. Mi viejo era un zorro, sabía muy bien jugarse las piezas para salir airoso de una situación delicada. Ahora entendía muy bien de quién había heredado esta inteligente astucia que me definía a mí también.
La idea era poder consumar nuestro encuentro grupal antes de culminar las vacaciones, y en vísperas de los últimos días entre los 3 trazamos el plan perfecto para que nuestra madre se nos uniera al rito familiar del placer. CONTINUARÁ.
Relato erótico enviado por Anonymous el 14 de December de 2007 a las 13:35:08 - Relato porno leído 783711 veces
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PuntoH
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Comentarios enviados para este relato
PuntoH
(4 de October de 2014 a las 19:02) dice:
placerdisculpable.blogspot.com katebrown
(18 de October de 2022 a las 20:43) dice:
SEX? GOODGIRLS.CF
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