Por andar de buscona, me despidieron en mi trabajo… ( CON fotos)

Bueno no es que yo fuera puta, ni mucho menos, pero si para obtener un aumento debía acostarme con alguien, estaba bien dispuesta hacerlo, aunque no le dije nada a nadie, sobre mi idea. Por lo que cuando llegó el día de la fiesta, me vestí como dicen, para matar. Llevaba una mini de color rojo, y una semitransparente blusa, sin sostén. Además de un ajustado mini tanga, que apenas y cubría mi depilado coñito. En fin sin mucha ropa encima para en caso de que se me presentase la oportunidad, meter mano rápidamente. Bueno la fiesta se fue desarrollando de lo más bien, mientras que yo busqué tener un encuentro cercano con el gerente general.

Finalmente se me presento la oportunidad, y mientras los dos charlábamos, noté que clavaba sus ojos en mis tetas. Yo haciéndome la tonta, no le presté mayor atención, pero cuando me invitó a que viera la suntuosa biblioteca, ni tonta ni perezosa, gustosamente acepté. Durante el trayecto, le hablé de mi deseo de ser promovida, de ganar algo más de dinero y de lo agradecida, que yo era.

Apenas pasamos la puerta de la biblioteca, la cerró tras nosotros con llave, y de inmediato comenzó a besarme. Ya al poco rato el gerente, me había ido quitando toda mi ropa, y en el sofá de la biblioteca, me recostó, separó mis piernas, y bueno me penetro divinamente. Yo actué como si hubiera sido el mejor polvo que hubiera disfrutado en el mundo, en fin hice hasta lo imposible para que se acordase de mí.

Yo disfrute de un buen orgasmo, y me quedé en la biblioteca, completamente desnuda, mientras que él regresaba a la sala a compartir con el resto de los invitados. Ya me había aseado en un pequeño baño, y estaba yo por comenzar a vestirme, cuando un par de mis compañeros de trabajo entraron a la biblioteca, encontrándome completamente desnuda.

Fue cuando uno de ellos me dijo, o lo haces con nosotros, o todo el mundo se va a enterar que estabas aquí teniendo sexo con el esposo de la hija del dueño, la jefa de personal. Yo me quedé paralizada, ya que ignoraba que ella fuera su esposa, y mucho menos la hija del dueño de la compañía. Así que en cosa de segundos debí tomar la decisión de, o dejar que ellos se acostasen con migo, o sencillamente despedirme de mi empleo.

Como se lo podrán imaginar decidí quedarme en mi empleo, por lo que aun en contra de mi voluntad accedí tener sexo con mis dos compañeros de trabajo. Pero no conformes con eso, a medida que comenzaron a besarme, y acariciarme toda, me dijeron que yo estaba muy tensa, por lo que prácticamente me obligaron a que bebiera un poco más. Ya después de un corto rato mientras se lo estaba mamando a uno de ellos, el otro me enterraba su verga por mi coño, bueno la verdad es que lo disfruté en parte. Pero al ellos terminar conmigo, quizás por hacerme una maldad, mientras me volvía a lavar en el pequeño baño, se llevaron mi ropa. Dejándome totalmente desnuda en la biblioteca.

Yo no sabía qué hacer, hasta que la puerta se abrió, era otro de mis compañeros, que al verme y sin esperar a que yo le dijera algo me preguntó, riendo. Que me das si te devuelvo tú ropa, automáticamente le dije lo que tú quieras, pero avanza, que no quiero que me vallan a encontrar desnuda aquí. Él me dio un trago, y me dijo bueno ponte en cuatro, que siempre desde que te conocí he querido darte por el culo. Yo la verdad es que me lo sospechaba, por sus constantes comentarios, fuera de lugar sobre mis nalgas. Así que no me quedó más remedio que hacer lo que él me dijo, y aun en contra de mi voluntad tuve que permitir que me penetrase por el culo, dolorosamente.

No podía creer lo que me había sucedido, así que mientras me vestía, y maldecía a mis compañeros de trabajo. Al salir de la biblioteca, me encontré a la jefa de personal, quien me detuvo y me dijo, el lunes temprano, sin falta en mi oficina. Yo estaba súper asustada, pensé se enteró de lo mío y su marido, hasta aquí llegó mi trabajo.

El lunes al llegar, a la oficina fui a ver a la jefa de personal de inmediato. Apenas entré, me entregó un cheque con mi total liquidación, y cuando le pedí una explicación, me dijo. Bueno mi esposo me comentó que usted es la candidata perfecta, para prestar servicios profesionales a nuestra empresa. Pero sin ser nuestra empleada. Yo la verdad es que no comprendí, pero cuando me siguió diciendo, necesitamos una puta como tú, que nos de un servicio de manera discreta, la verdad es que no sabía si me insultaba o me alagaba. Pero cuando continuó diciéndome. en muchas ocasiones, necesitamos digamos que damas de compañía para nuestros clientes especiales. Y al ver en el video, como te comportaste con los tres compañeros de tu oficina, entendemos que tiene lo necesario para ocupar esa posición, solo que recibirás tu pago en efectivo, con gastos de representación, y de manera formal no tienes que ver nada con nuestra empresa.

Bueno deje de trabajar de manera formal, y ahora gano mucho más de lo que ganaba como secretaria. A mis compañeros de trabajo, me parece que debido al mismo video los despidieron….