No hace mucho, mis amigos yo nos encontrábamos en la plaza del pueblo bebiendo cerveza y contando chistes, la mayoría de nosotros ya salimos de la escuela superior y esperamos entrar a la universidad o en algún instituto técnico. Ya serían cerca de las doce de la noche, cuando apareció la patrulla de la policía, y nada más de verla supimos que era hora de retirarnos, pero como lo cierto es que la mayoría de nosotros ya nos encontrábamos un poco picados, y con ganas de seguir bebiendo.
Relato
Andrés nos comentó que podíamos ir a una casa propiedad de su familia, en las afueras del pueblo, así que la mayoría de nosotros aceptamos y como quedaba cerca nos fuimos a pie.
Así que después de que entre los que decidimos aceptar su invitación, reunimos lo suficiente como para comprar par de cajas de cerveza, salimos del pueblo y tras caminar casi como unos quince minutos, llegamos a la casa. Apenas llegamos los cinco, pusimos las cervezas en la nevera, y seguimos contando chistes y bebiendo, pero después de un buen rato de estar tomando, y volviendo a contar los mismos chistes tontos, comenzamos a hablar de mujeres, que si fulana si la afloja, que la hija del carnicero le gusta que le den hasta por el culo, que una de las maestras de la escuelita es lesbiana, y su esposo no lo sabe. Bueno ya nos encontrábamos algo más que tomados, cuando el mismo Andrés, diciendo que tenía mucho calor se quitó la camisa.
Al poco rato la mayoría de nosotros lo habíamos imitado, y eso fue motivo para seguir riéndonos, pero del gordo, ya que por lo grande de sus pechos, parecían un par de enormes tetas. Y en medio de la jodedera Efraín, le pregunto a manera de broma, que si se las dejaba tocar, a lo que el gordo contesto en sin ponerse bravo, que sí, siempre y cuando Efraín a su vez también le mamase la verga. Ya para esos momentos habíamos bajado más de media caja de cerveza entre nosotros cinco, y las palabras del gordo nos trajeron a la memoria, cuando siendo más chicos, en ocasiones nos masturbábamos todos juntos, y en más de una ocasión, alguno de nosotros se la hacía a otro, y viceversa.
Entre cerveza y cerveza, no me acuerdo quien fue el primero en quitarse los pantalones, pero después de un buen rato ya todos estábamos en interiores, contando o mejor dicho inventando cosas sobre algunas de las mujeres del pueblo, al punto en que alguno de los muchachos se comenzó a masturbar. Era prácticamente como cuando todos éramos adolescentes, y porque no lo voy a decir yo también me puse a jalar mi tripa.
Entre las cervezas, y lo que estábamos inventando, no sé precisamente quien sacó varias bolsitas de la sabrosa, y que sin perder tiempo nos pusimos a fumarla, y entre la cerveza que habíamos bebido, el estar hablando de sexo, y estar masturbándonos, nos comenzamos sentir mucho más excitados, en mi caso cuando escuché a Andrés preguntarme si me gustaría que él me la hiciera, al mismo tiempo que yo a él, sin pensarlo mucho le respondí que sí. Realmente o por lo menos yo no deseaba acabar de inmediato y así se lo hice saber a mi amigo, el cual me pidió lo mismo. Suavemente agarré su verga, al tiempo que él agarraba la mía ante la mirada de los otros tres amigos nuestros. Y mientras nos las jalábamos mutuamente, de momento veo que al gordo tras quitarse los grandes boxes que aun tenía puestos, entre Efraín y Ricardo comenzaron a acariciar sus grandes pechos, incluso Efraín hasta se los comenzó a besar o lamer como si fueran las tetas de una mujer, al mismo tiempo que Ricardo nuestro otro amigo que nos acompañaba y Efraín acariciaban y agarraban la verga y las bolas del gordo.
Así que entre los cinco de momento nos encontramos participando de una orgía, a medida que Andrés y yo nos continuábamos masturbando mutuamente, tanto él como yo poco a poco nos fuimos pegando más él uno al otro, al punto que sin dejar de masturbarnos comenzamos a besarnos. En mi vida yo había besado a otro hombre, pero poco me importó en ese instante, ya que se sentía tan rico que mi amigo me estuviera haciendo la paja, que el besarnos fue como algo extra, dentro de nuestra excitación.
Ocasionalmente le daba un vistazo a los otros, y a diferencia de nosotros, no tan solo se estaban besando y acariciando por todas partes sino que ya Efraín mantenía la verga del gordo dentro de su boca, propinándole una sabrosa mamada, al tiempo que Ricardo, estaba colocado tras el gordo, acariciando sus pechos y restregando su verga contra las nalgas del gordo, que se movía de lado a lado como si realmente ya lo tuvieran clavado.
Pero entre Andrés y yo surgió una pequeña diferencia, tanto yo como él queríamos comerle el culo al otro. Hasta que llegamos a un punto que ni él ni yo, queríamos ceder en ser el primero. Ya a mí se me estaban quitando las ganas, cuando Andrés me propuso que lo hiciéramos a un mismo tiempo.
La verdad es que cuando lo escuché, pensé este me quiere coger de pendejo, y ya estaba a punto de mandarlo al coño de su madre, cuando comenzó a decirme, mira yo nunca lo he hecho, pero se me ocurre que si los dos nos recostamos, tu sobre mi o yo sobre ti, pero en lugar de cara a cara, yo coloco mis pies hacía tu cara y tu colocas tus pies hacía mi cara.
Tras pensarlo por unos segundos, imaginándome como quedaríamos, pensé que quizás si era posible que eso funcionara, me di cuenta de que mi verga alcanzaría su culo y la del el mío. Sin demora alguna, y sin dejar de pajearnos, nos colocamos en esa posición, al principio nuestras vergas chocaron la una contra la otra, y por un corto rato nos las restregamos mutuamente, pero tras Andrés y yo abrir nuestras piernas, y doblarnos, nuestras respectivas vergas quedaron justo frente al esfínter del otro, poco a poco mutuamente comenzamos a movernos, y fue cuando comenzamos a sentir a un mismo tiempo, como nos penetrarnos el uno al otro.
En cierto momento estuve ganas de hasta quitarme, por el dolor que me producía la verga de Andrés penetrando mi culo, y pienso que él sentía otro tanto igual, pero al mismo tiempo, el placer de estar penetrándolo a él, hizo que continuase sin fijarme tanto en el dolor.
Entre doblar un poco más las rodillas, e ir empujando nuestras caderas, finalmente tanto Andrés como yo, nos habíamos penetrado por completo el uno al otro, hasta que comenzamos a movernos rítmicamente, y el placer fue en un franco aumento. Sentía como su dura y caliente verga me entraba y salía prácticamente por completo de mi culo, mientras que la mía lo hacía dentro del suyo. Con nuestros brazos nos apretábamos más y más, sin dejar de decirnos mutuamente lo mucho que nos gustaba estar haciendo eso. Hasta que al centrar mi vista en nuestros otros amigos, vi claramente que al gordo Efraín continuaba mamando su verga, como si fuera un cabrito muerto de hambre, mientras que Ricardo abandonó las grandes nalgas del gordo, y se encontraba penetrando a Efraín, salvajemente por el culo, que movía sus nalgas de manera frenética, mientras que Ricardo, que sin vergüenza alguna se besaba con el gordo.
De no ser por lo incomoda de nuestra postura, creo que Andrés y yo lo hubiéramos seguido hasta acabar el uno dentro del otro. Pero cuando Ricardo que le daba por el culo a Efraín, propuso alegremente que hiciéramos un tren, tanto Andrés como yo aceptamos, sin pensarlo mucho. El gordo también se apuntó, y finalmente Efraín también aceptó pero con la condición de querer ser la locomotora. De inmediato él se puso en cuatro, de tras de Efraín se colocó Andrés y tras Andrés yo, seguido de Ricardo y finalmente el gordo. Por largo rato nos mantuvimos en el tren, dando y recibiendo al mismo tiempo, o por lo menos Andrés, Ricardo y yo, mientras que el gordo y Efraín se colocaron en los extremos, siendo el Gordo quien se lo introducía a Andrés, y Ricardo se lo continuó metiendo a Efraín, mientras que yo me quedé en todo el centro, por largo rato disfrutando de lo mejor de los dos mundos.
Después del tren, al gordo se la siguieron mamando, mientras que yo sin mucha presión por parte de Ricardo, dejé que me clavase su verga, al tiempo que yo se la mamaba a Efraín. Sin temor a equivocarme, creo que ninguno de nosotros cinco antes habíamos hecho algo similar ni parecido. Cuando me desperté ya cerca de las 9 de la mañana, tenía sobre mi cuerpo al gordo, y en mi boca la ya mustia verga de Efraín, toda mi cara estaba llena de leche, y mi culo completamente abierto, como si fuera una ponchera, de las veces que me clavaron mis amigos sus vergas. Después de darme un duchazo, me vestí y me marché sin hacer ruido.
Ya estando en mi casa, comencé a ver como todos y cada uno de mis amigos regresaba a la suya, sin decir nada, ni tan siquiera saludar. Como a las dos semanas, los cinco nos volvimos a reunir, pero en licorería, volvimos a comprar cerveza, y como si nada hubiera pasado entre nosotros, regresamos a la casa de los padres de Andrés, ya casi llegando se nos sumaron José, Ernesto, y Vicente el flaco. Todos continuamos bebiendo, después fumamos, y no había pasado más de una hora, cuando Efraín y yo por perder una apuesta, nos encontrábamos completamente desnudos, y sin que a ninguno de los dos nos lo pidieran cuando el resto de los chicos sacaron sus vergas, nos pusimos a mamar, no pasó mucho rato cuando todos se quitaron la ropa, y nuevamente dejé al igual que Efraín y José que más de uno de nuestros amigos nos diera por el culo. Lo único de todo es que José es el hermano de mi novia, Ernesto y el Flaco son primos míos, así que todo quedó en familia.
Entramos al cuarto y empezó todo, él me tomó por detrás y empezó a tocar mis nalgas y me susurraba cosas al oído: ¡eres una puta q aprenderá de mí!, ¡eres mi perra! Y yo se lo confirmaba le dije q seria su perra, el me volteo y quedamos frente a frente, y acercó su boca a la mía, pero mas q besarme su lengua paseaba por mi boca.
Relato erótico enviado por Putitacachonda el 29 de December de 2009 a las 23:34:17 - Relato porno leído 140722 veces
Aventuras en Paris
Jesús y Pablo marcharon a Paris para poder vender el video. Dejaron a sus tres amigos en una casa que habían alquilado en un pueblo muy pequeño en Huesca. Los dos habían quedado con Pierre, un ejecutivo muy interesado en esta clase de material.
Relato erótico enviado por mena55 el 24 de August de 2008 a las 13:55:00 - Relato porno leído 114311 veces
Si te ha gustado Por andar de ociosos… vótalo y deja tus comentarios ya que esto anima a los escritores a seguir publicando sus obras.
Por eso dedica 30 segundos a valorar Por andar de ociosos….
narrador
te lo agradecerá.
Comentarios enviados para este relato
jorge luis sepulveda
(8 de May de 2011 a las 04:47) dice:
buen relato. quiero una reunion asi. Juan Lozano
(5 de April de 2011 a las 17:58) dice:
Buen relato, la única inconsistencia que encuentro es cuando se penetran mutuamente por primera vez con Andrés, ya que el pene erecto es imposible doblarlo hacia atrás, salvo que nohaya erección completa. rafalectosex
(4 de April de 2011 a las 01:27) dice:
espectacular este relato y muy excitante katebrown
(18 de October de 2022 a las 20:03) dice:
SEX? GOODGIRLS.CF sucker
(10 de April de 2011 a las 09:00) dice:
mm no entendi eso dela penetracion mutua entre tu y andres quisieras explicarmela al detalle porfa sucker
(10 de April de 2011 a las 09:00) dice:
mm no entendi eso dela penetracion mutua entre tu y andres quisieras explicarmela al detalle porfa andresacosta86
(10 de April de 2011 a las 05:51) dice:
Uff excelenteee aunque esa pose de penetracion mutua me la imaginoo uyffff que ricooo va tocar practicarlaaa
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