Aquella calida mañana, un momento inolvidable de pasion y pecado. Ambos dimos rienda sulta a nuestros mas sucios deseos sin imporarnos nada. Dejenme compartirles esta experiencia pecaminosa del momento en que suduje a mi antenado y lo provoque hasta que me hizo suya.
Relato
Llamenme Teresa, aunque todos nomas me dicen Tere. Soy una mujer algo madurita, tengo cuarenta y dos años de edad, mexicana, vivo en la ciudad de Mexico. No dire que soy una modelo pero si soy algo atractiva a pesar de mi edad, soy blanca, tengo cabello negro largo, ojos negros, me gusta remangarme un poco las pestañas, poseo labios rosados naturales, casi no me maquillo porque no me hace falta, gracias a que me he cuidado aun no tengo ni rastro de arrugas. Igualmente gozo de un cuerpo decente, no poseo grandes pezones pero si luzco unas bellas piernas y unas nalgas deliciosas, la verdad si provoco miraditas todavia y me encanta pues soy asi algo golosa y no me da verguenza decirlo, soy una mujer liberal, desde mi juventud he gozado del sexo hasta donde he querido, me encanta el sexo y sentirme mujer. Pero tambien soy humilde, no soy altanera ni mucho menos petulante, pues nada mas soy ama de casa, no tengo carrera profesional alguna asi que solo me dedico al hogar que actualmente tengo. Hace un par de años atras me presentaron a un viudo soltero que recien habia fallecido su esposa en un accidente, un hombre apuesto y caballeroso, nos estuvimos viendo algunos meses hasta que iniciamos una relacion formal, en poco tiempo ya estabamos comprometidos. Por ello supe de su hijo el cual conoci, un chico cerca de los veinte años, igual de guapo que su padre y muy varonil, debo de decir que a el no le gusto para nada la idea de que su padre y yo estuvieramos a punto de casarnos a menos de un año de la muerte de su madre, por esto mismo al principio no le agradaba. Es mas hasta podria decir que me odiaba, me trataba con mucha frialdad e indiferencia, constantantemente me retaba y no me respetaba para nada, al grado de decirme muchas groserias incluso a la hora de comer.
En fin... Nos casamos y aunque le costo asimilarlo ahora era yo su madrastra, en esos dias recien habia entrado a la universidad asi que solo nos veiamos por las noches y eso era lo mejor por su parte, pues por mi parte nunca me importo que me odiara aunque si quise hacer las pases en varias veces. Pero bueno al paso del tiempo se calmo el asunto, el ya no me retaba como al principio e incluso llegamos a hablarnos de “tu” aunque el siempre me decia “Tere” Todo sucedio durante las vacaciones de verano del año pasado, con mas frecuencia estaba en casa, nuestra relacion mejoro mucho y a su padre o sea mi esposo le encanto que ya no me odiara. Francamente todo comenzo cuando una tarde llevo a su novia a casa, una chava de su edad, guapa y sensual, sin duda tenia muy buen gusto, por algunos dias estuvo llendo a casa, a veces se quedan en su recamara por algunas horas, esto la verdad me provoco morbo, no pude evitarlo pues asi soy mal pensada. Sabia que ellos ya tenian intimidad como todos los jovenes de hoy en dia, esto me hizo animarme a espiarlo y que bueno que lo hice pues no me desepciono lo que vi, esa tarde pude ver como su novia, le bajo el cierre y le estaba chupando su miembro, no saben lo excitada que me senti al verle el pene a mi antenado, era bello y su novia se lo comio todita. La verdad quede mas que satisfecha con lo que vi, desde ese momento inicie a husmear entre sus pertenencias cuando no estaba, entre otras cosas encontre unas peliculas porno y un par de cajas de preservativos, con esto confirme que era un chavo sexualmente activo. Desde ese instante de alguna manera me hizo ver a mi antenado con ojos de deseo, empece a fantasear en como se sentiria que un joven como el me hiciera el amor, cada dia mis deseos eran mas, cada que mi esposo me hacia el amor solo pensaba en el y en su delicioso pene que habia visto.
El tiempo pasaba y sus vacaciones estaban a punto de terminar, solo me quedaba una semana para intentar lo que fuera, asi que sin importarme nada una noche me le insinue como toda una puta. Yo estaba vestida con un sueter negro cuello de tortuga, una falda beige corta y portaba unas zapatillas negras de tacon alto. Durante la cena le estuve dando discretas miraditas pero al parecer no se dio cuenta o si lo hizo me ignoro, ahora el tiene veintidos años de edad. En fin al terminar de cenar estaba como loca por seguir insinuandomele, para mi suerte mi esposo se fue a bañar y ahi supe que debia intentar todo pues era ahora u nunca. Directo me fui a su recamara, el estaba nevegando en su computadora, primero comence a platicar lo mas natural que pude pero estaba muy inquieta y nerviosa y eso lo noto pero no me dijo nada. En ese instante le puse seguro a la puerta, el se extraño por esto pero yo le dije -Shhh, tranquilo tu padre esta bañandose, quiero hacerte algo mi amor!- Confundio no me dijo ni una palabra, en ese momento me inque ante el y puse mi mano en su miembro, -Que haces Tere? Me dijo asustado y confundio. -Tranquilo, vi como tu novia te la chupo el otro dia, ahora es mi turno mi amor, se que te gusta! Baje su cierre y libere su pene semi erecto en mis manos, era tan suave y fragil, me encanto su textura, al verlo vi que ya no tenia el frenillo por el que supe que efectivamente ya lo habia utilizado y esto me excito aun mas.
Me encanto sentir como en mis manos con forme se lo iba masturbando fue creciendo mas y mas hasta que en pocos segundos ya estaba al cien de su capacidad, duro y bien listo. Comence por besarle el glande y suavemente inicie a chuparsela, nunca olvidare el sabor de aquel pene joven y tierno que estaba en mi boca, el suspiraba quedito de placer, era maraviloso para ambos, se lo estuve chupando por mas de diez minutos hasta que senti como tenzo su pene y solto todo su leche en mi boca, con gusto saboree hasta la ultima gota, que rico me supo. -Ahora es tu turno mi amor!- Le dije, en ese momento remangue mi falda y me acosto en la orilla de su cama separando mis piernas, imagine que no se atreveria a tocarme pero me equivoque, como loco se acerco a mi iniciando a tocarme mis piernas, llegando a mi zona vaginal inicio a comer si con bragas puestas, fue increible! Mis calzones estaban mojadisimos de su saliva combinado de mis fluidos vaginales, sin duda lo mas lindo fue el momento en que me hizo venir, introdujo uno de sus dedos en mi vagina y solo basto un poco de movimiento para que estallara en un riquisimos orgasmo, no se imaginan las ganas que tuve de decirle que me hiciera el amor en ese instante pero al pensar en su padre tuve que detenerme. -Espera, ya mi amor, papa nos puede ver!- Le dije, lo bese en los labios, me acomode mis bragas y falda, sali con cuidado de su recamara cuidando que su padre no nos viera, por suerte estaba en nuestra recamara viendo la tv. Toda esa noche estuve pensando en ese momento, sin imaginar que a la mañana siguiente por fin se cumpliria mi deseo de ser follada por el.
Eran poco mas de las 9:00 de la mañana, mi esposo estaba desayunando para posteriormente ir al trabajo, mi chico amado aun no se lebantaba. Tras irse mi esposo yo me dispuse a lavar la ropa sin imaginar la hermosa cogida que estaba a punto de resivir. Yo estaba casi desnuda, solo tenia puesta una camisa azul rayada y mis bragas nada mas. Ni tenia zapatos ni nada, estaba metiendo la ropa a la lavadora, por el ruido de la misma ni escuche como entro al cuarto, en cuanto senti como el me abrazo detras tomandome mis pechos, por un momento me sorprendi pero no dije nada, solo me deje llevar, el apachurraba mis senos como si fueran un par de frutas queriendolos exprimir, me voltee de frente, nos miramos a los ojos y dije -Por fin!- El sonrio y dijo solo un si, muy deliciosamente inicio a besarme mis senos, mientras a su antojo con su mano derecha me tocaba la vagina sobre mis bragas, ambos estabamos como locos, el aflojo mis calzones y los dejo caer hasta mis pies, no espero mas, se quito el boxer liberando su hermoso pene. En ese momento yo me retranque sobre la lavadora entregandole mis nalgas, por unos segundos me chupo el culo, luego escupio en mi ano y al fin habia llegado el gran momento. Senti claro como puso su pene entre mis nalgas y empujo suave, sin duda gracias a la elasticidad de mi culo se le facilito y me le introdujo toda entre mis nalgas, no podia creerlo por fin estaba siendo culeada por mi antenado, su pene entraba y salia de mi ano provocandome olas de placer, se podia escuchar como chocaban sus testiculos contra mis nalgas.
Luego el me acosto sobre el piso, usamos unas sabas sucias para que no sintieramos el piso frio, se poso encima de mi y comenzo a penetrarme vaginalmente. Sin duda el me estaba haciendo el amor con todo, al sentir que iba muy rapido le dije -No espera, lento!- Yo no soy tu novia que quiza te pide asi, yo quiero que dure mas para sentir mas, quedate quito dentro de mi un momento amor! Ame ese momento como su pene estaba dentro mi vulva quito, mientras me besaba los pezones, al poco tiempo continuo la accion, una y otra vez me la metia y sacaba sin parar hasta que senti como todo ese loquido caliente ihundo mi vagina dandome increible placer. Ambos nos miramos sin decirnos nada, sabiamos que habiamos pecado pero no nos importaba.
Relato erótico enviado por Anonymous el 14 de December de 2007 a las 13:35:08 - Relato porno leído 783541 veces
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Comentarios enviados para este relato
AAA264
(27 de May de 2012 a las 22:13) dice:
UH BUEN RELATO KE SUERTE DEL MUCHACHO phantom_n
(22 de May de 2012 a las 09:11) dice:
buena aventura, a pesar de la culpa se ve que disfruto mucho cogiendote y tu siendo cogida kalichin
(19 de September de 2012 a las 06:52) dice:
buena suert katebrown
(18 de October de 2022 a las 19:53) dice:
SEX? GOODGIRLS.CF
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