Regalo.... por mi graduación.

Mi graduación.
Después de que estudié duro y parejo en la Universidad de Abogacía durante seis años , logre el titulo de abogado, de familia media, y sin casi familia, solo mi mama, y un hermanito menor, los que ayudaron mucho económicamente, para que me graduara, eran Denia, y Marcos, sin hijos. Ah! Denia una vecina, muy amiga de mi mama, desde que se instalaron allí, que mi logro ellos lo vivieron como parte de ellos. Señora madura de unos 45 años de lindas y duras lolas, unas caderas importantes y una cola para ser admirada con un marido mayor que estaba sumí inválido; desde que la conocí, siempre la miré con ganas, En mis viajes de vacaciones, ella siempre aparecía por casa, por la estrecha amistad con mama, como vivía al lado, siempre había alguna excusa.
Llego el día que me volví a mi casa, para que compartieran mi logro, solo por un tiempo ya que ya había hecho, algunos trabajitos para un Bufete de la capital, y tendría oportunidad alli de trabajar.
Al llegar me recibieron los míos y ella. Su esposo, muy enfermo no, vivieron los abrazos los besos las felicitaciones, la felicidad, era total, vino el sosiego nos sentamos a tomar algo fresco yo estaba agotado, muchas preguntas, ella estaba tan integrada que se manejaba como uno mas de la familia yo de reojo la miraba con la atención que se merecía, como vestía con ropa de entre casa, la que era muy llamativa me permitía mirar sus gomas, que se mostr5aban apetitosas, sus caderas, formadas, con unos muslos. Que marcaba, un estado de esplendida mujer, Mi mirada era mas o menos descarada y ella cuando lo advertía sonreía disimuladamente y cambiaba de ubicación.
Mis ojos no se separaban de ese cuerpo hermoso, tentador yo suponía mal atendido según el estado de su esposo, el comentario de mi madre que en una oportunidad, me dijo de lo que cuidaba a marcos, y se desvivía por el.
Con mi madre, conversaban sobre mi futuro del cual me preguntaron y les respondí que seguramente te quedaría a vivir en Bs. As.
Al rato se acercaron otros vecinos, que se enteraron, de mi llegada trajeron alegría los amigos y demás vecinos. Ella paso asegundo plano, al rato se retiraba y en la despedida, mientras me daba un beso en la mejilla, me decía: Queremos cenar en casa para celebrar tu titulo. Con Marcos (su marido). Me alegró, saber que Denia me tenia mucho afecto, invitadme, junto con su marido, a cenar, Pasaron unos días, en una de esas visitas frecuentes, me invitó a cenar al día siguiente Era mucho lla ayuda en muestra de agradecimiento Compré un ramo de flores para Denia y una botella de buen vino para el marido
Mas o menos a la hora acordada toqué a su puerta. Ella que abrió, estaba hecha una diosa. Pelo largo suelto sobre sus hombros, Camisa semitransparente, dejaba relucir su sostén negro, en el que sus senos, aparecían mas apetecibles, que nunca, pollera ajustada corta que marcaba perfectamente su culo. Me besó en ambas mejilla su perfume me embriagaba, mientras. Agradeció por las flores, la que me mostraron un rostro iluminado, y complacido, le entregue la botella de buen vino, comento “la aprovecharemos en la cena, no te aflijas”, llamó a su marido, quien bajo lentamente las escaleras con un andar cansado y vacilante. me saludó eufórico dentro de su estado de salud y nos sentamos a cenar. Toda la comida habló Marcos, Denia iba y venía para servir, como a veces rozaba mi hombro o mi brazo, me di cuenta que era como con intención. En un momento, mientras servia los postres me atreví como en devolución del convite, con mucho disimulo, acaricié sus piernas, llevando mi mano hasta sus muslos, ella, sin acusar, es mas acompaño,, mi caricias, siempre sirviendo postres dijo” espero lo saborees, está hecho especialmente para vos”. La indirecta provocadora me excito que me acomodé la pija que quería romper mi pantalón de lo inflada que estaba.
Como la cosa no daba para mas, Denia trajo café tomamos en la sala y se despidió Marcos, diciendo estoy algo cansado, no te pierdas eh” “no,. No vendré” subió, lentamente a su dormitorio y Denia me acompañó hasta la puerta. En mi estado de ebullición, cuando acerco sus labios en el beso de despedida, yo le partí la boca con un beso casi apasionado, con mis manos en sus lolas. Diciéndole, “estas divina”• y ella , en voz alta, diría que casi gritando dijo Adiós, hasta mañana, mientras, con su mano me hacia señas que me quede. Pego un portazo, que retumbo. Nos besamos con pasión y calentura, se separo, haciendo seña de silencio me señaló que me siente en la sala, ya volvía.
Mi pene reventaba y quería salir de su lugar .A los minutos bajó con ropa de dormir. Me besó suavemente en los labios, me ofreció su cuerpo en el abrazo y al oído dijo” Marcos ya está dormido, despertará mañana cerca del medio día, ya lo mediqué” me tomo de la mano me condujo a una habitación, que me dijo que era cuarto de huéspedes,
Se sentó a mi lado, en el borde de la cama, la abracé por los hombros y busqué su boca, ella jugó con su lengua entrecruzándola con la mía y me dijo “te quiero dar este regalito especial de graduación “ desprendió su camisón dejando libre sus pechos erectos y grandes. Los besé y los pezones se empinaron. Parecían uvas .Ella buscó mi pija hasta dejarla libre me empujo suavemente para quedar tendido, se puso, de rodilla sobre la cama me hizo una mamada inolvidable. Yo acariciaba su cabello y mi mano llegaba a sus senos, las bajé, pase debajo su tanga , con un dedo el culo divino estuvo a mi alcance. Rocé su canal posterior, encontré su agujero hermoso, tras lubricarlo con mi saliva se lo introduje. Ella, entre chupada y chupada me dijo “tenes pretensiones nene, eso es el postre y me dejé llevar por sus caricias tanto hizo, que acabé en su boca como vaca lechera, se tomó la mamadera llena y después lamió el tronco hasta que quedó limpita toda la zona.
Se acomodo a mi lado, completamente desnuda ,me besaba, mientras desprendía mi camisa, besaba con suaves mordiscos mi pecho a la vez me apretaba y acariciaba alternativamente mi pene. Devolví las caricias besando su cuello, sus pechos, su abdomen era divino, plano y tentador. Con mi lengua repase todo su cuerpo desde el ombligo hasta el clítoris, ella se desesperaba y tenia gemidos sucesivos. Mi boca se prendió de su clítoris, Su concha derramaba jugos en abundancia, y la llevé a un orgasmo apoteótico. Sus manos apretaban mi cabeza y mi lengua se perdía en su concha. Su cuerpo transpirado se pagaba al mió que estaba igual. Se acostó, abrió sus piernas y me dijo “cogeme, amor, por favor cogeme”.
Jugué con la verga dura sobre sus labios vaginales y sus contracciones eran evidentes, aparecían cada dos roces. Se la puse despacio y ella movió su pelvis para ser penetrada totalmente. Cuando la tuvo adentro, sus caderas comenzaron un movimiento alienante. Tomé sus nalgas y empujé su cuerpo sobre mi y regulé el ritmo de entrar y salir de esa concha divina. Cuando estaba por acabar le dije “no aguanto mas, amor”, y ella, con pasión dijo “lléname de leche, amor, lléname de leche, sabes cuanto hace que no se moja” fue casi juntos llegamos al orgasmo. Fue magistral, sus brazos apretaron mi espalda mientras mis manos quedaron adheridas a su culo. Nos besamos largamente y abrazados le dije no quisiera que esto acabe. Ella , besando mi cuello dijo “no amor, aun falta el postre y abrazados quedamos dormidos. Desperté a la madrugada, ella desnuda lucia lo largo de la cama toda despatarrada Besé sus pechos ,su abdomen y lamí su clítoris. Ella ronroneando, acarició mi cabeza ,se agachó chupó mi pene llenándolo de saliva, se dio vueltas , puso un almohadón bajo su vientre y me dijo úsalo, es tuyo , este es mi regalo de graduación. Me coloque detrás de ella, Puse la cabeza de la pija en su esfínter cerrado, se vía que del tiempo, estaba como virgen jugué un poco y ella, moviendo sus caderas lo introdujo. Gritó , me quedé quieto y después de unos momentos de quietud, sentí sus esfínteres haciendo presión sobre mi carne dentro de su culo. Lloraba se reía al mismo tiempo. es hermoso ser culeada, decía, es hermoso y aceleraba el ritmo circular de su divino orto. Acabó dos o tres veces y luego de incrementar el movimiento dijo: lléname de leche, amor, lléname el culo de leche .Acabé dentro de ese orto y ella llegaba a su orgasmo final. Quedamos tendidos y rendidos. Me besó largamente. Dijo te das cuenta que aparte de ser abogado, ahora tenes amante La miré a sus ojos y le dije te tomo la palabra, ahora sos mía.
Si amorcito, mucho tiempo esperé, algo así, poder tener alguien que me atienda ahora soy tu amante.
Al poco tiempo,quedó viuda y se mudó a Bs. As. Vive en el edificio de al lado de mi estudio.