un lugar q no era lo q dijeron... y un viejo q era lo q parecia
Relato
En ese apartado la verdad estaba para quedarme a vivir, unos muebles cómodos, servicio de habitación, buena comida, cálido y confortable, además de tres viejos vergones dispuestos a darme gusto cada vez que pudieran.
Lo único era que el piso, donde yo estaba toda cansada y dolorida, era frio. Pero el resto parecía sacado de la imaginación mas pintoresca, las lámparas tenían forma de cuerpos, desnudos, y los adornos muy delicados eran sumamente sugestivos a la vista… esperen, con esa decoración, esto no es un club, me levante un poco y dije muy confundida.
- Chicos ¿este lugar no es un club de jubilados cierto? – los tres viejos se miraron con complicidad – díganme que es en realidad –
- Es un club para hombres hija – dijo Alan – cuando queremos divertirnos venimos aquí, obviamente no solo hay tenis, futbol 5 y cosas así jeje –
- También podemos traer mujeres que nos diviertan – dijo José – pero hace mucho tiempo que ninguno conseguía una chica como vos –
- ¿A caso me vieron cara de prostitutita barata? – grite enojada
- ¡Ana no digas eso! Nunca te tratamos como prostituta – dijo mi abuelo – sabes bien que vos lo elegiste, no te obligamos ni te convencimos, fue tu decisión darnos gusto –
Me quede helada, tenían razón y yo no sabía qué hacer. En eso Alan dijo
- ¿Podemos seguir preciosa o ya estás muy cansada? Porque nosotros aun queremos mas diversión –
- Antes chicos deberían ir a pagar, recuerden que llevamos más de 2 horas acá dentro y las reglas del lugar son esas – dijo mi abuelo y sus amigos se pusieron la ropa y se fueron a pagar
Yo me pare y busque mi ropa, seguía enojada por lo que avía echo mi abuelo. Me llevo a un prostíbulo como si fuera una mas esperando a que yo pidiera sexo. Pero mientras levantaba mi vestido pensé, en verdad ellos nunca me provocaron, solo hacían bromas y yo los busque. Eso me hacia puta, pero llevaba tiempo siendo la putita de mi abuelo, la diferencia era que esta vez me entrego a otros sin decirme nada. Pero no era ese mi enojo, sabía que me gusto lo ocurrido aun sin saber que era aquel lugar, ¿entonces porque me enoje? Y pregunte.
- Abu, ¿Por qué no me dijo que era este lugar en verdad? –
- Pero te lo dije hija, sabes que no te miento –
- Dijo que era un club para jubilados y es un prostíbulo, me mintió –
- No nena, es un club pero tiene ciertos beneficios, igualmente acá no entras prostitutas solo chicas y mujeres amigas de los socios – me abrazo – no estés mal, sinceramente nunca busque el cogerte entre todos hija, pero si estas mal aquí nos vamos ya mismo –
- ¿Qué pensarían tus amigos si nos vamos? – le dije – después de todo sos su “héroe” en este momento por traerme… si nos vamos creerán que sos un chanta –
- No importa eso, ya se dieron el gusto nena, no les importara otra cosa… además les deje claro que sos vos quien dice sí o no, ni yo ni ellos decidimos –
Me quede pensando, yo estaba jugadicima con mi abuelo, todo lo que hacíamos al principio me parecía mucho, pero mientras me cogía siempre cambiaba mi forma de pensar y disfrutaba como perra. Esta vez podría ser distinta, ya hacía días que pensaba en mí como una puta sumisa, me veía de esa forma y empezaba a aceptar que yo era así en verdad. No tenía nada que ver con el trato que hice con mi abuelo, sino con mi propio gusto por el sexo fuerte y fuera de mi control. Lo pensé un poco y pregunte
- ¿Qué dirían tus amigos si saben que soy tu nieta abu? –
- Seguramente les daría un infarto y buscarían como sacar ventaja de la situación hija, ¿Por qué lo preguntas? –
- Por curiosidad abuelo – no quería decirle que la idea de estar a merced de sus amigos me calentaba – voy a seguir con la fiestita que se montaron tus amigos y vos, pero quiero algo a cambio… ya que no me contaste todo antes de venir me lo debes –
- Está bien hija ¿Qué queras? –
Justo en ese momento se abrió la puerta y entraron los dos, mi abuelo me hiso un gesto de que espere. Yo en vez de vestirme me senté muy sensualmente y espere un puco, ellos hablaron un momento en vos baja. Pero como tengo buen oído los escuche, mi abuelo decía que yo estaba enojada me sentía engañada, pero que si eran caballeros y “generosos” me podían convencer de seguir la joda. Obviamente yo seguí la corriente a mi abuelo, no sabía que planeaba pero pronto me entere. El viejo los hiso darme gusto, es decir, pagaron todo el asunto ellos dos y además me dejaron gastar en lo que quisiera. Pedimos unos postres y vino del bueno, estuvimos casi una hora exprimiéndolos y como era de esperar me trataron como reina. Tras mucho rato de eso decidí darles su recompensa asique les dije.
- Supongo que quieren ir a casa a descansar – con mi mejor cara de puta agregue – pero si no están muy cansados podríamos… -
Los tres se miraron y no parecían saber qué hacer, asique para ser mas explicita me puse de rodillas frente a ellos. No duraron más de 10 segundos vestidos el primero en la fila fue mi abuelo, pero antes de poder siquiera tocarle la verga los otros dos me levantaron y diciendo “esta vez te haremos pedir piedad” el pijotas me empezó a penetrar de parada. Ni bien entro la cabeza ya solté un gemido, era enorme y mi abuelo me agarro la cabeza me tiro hacia el poniéndome en posición de chupársela, así quede en el típico inclinadita. Esta vez eran mucho más vigorosos, Alan me seguía metiendo su tronco, José me hacia pajearlo mientras me sobaba las tetas y mi abuelo perforándome la cara. Pero como dije, ya empezaba a aceptar que eso era yo, una puta para disfrute del público, por tanto solo me deje hacer.
La tranca de Alan estaba casi toda dentro y mi abuelo no paraba de bombear, pero José dejo en paz mis tetas y fue cuando empezó lo duro. El vergotas entro a moverse, su verga no estaba toda dentro y con cada embestida entraba un poco mas y mas hasta que sentí sus caderas. En eso mi abuelo se aparto diciendo.
- Hija lo siento, pero esto te va a doler – se sentó junto a José – divertirte Alan, que se arrepienta la puta –
Me agarro de las tetas con tal fuerza que grite y empezó la cogida mas dura de mi vida, con cada vergaso yo soltaba un “hay” de dolor pero el maldito solo me daba mas duro. Tras unos minutos yo estaba a punto de llorar de los bombazos, pero no paraba de darme placer y empecé a pedirle más y más como si estuviera en selo. Los otros dos sorprendidos empezaron a hablar entre ellos y lo poco que les entendí era que no podían creer como yo aguantaba esa perforación con tanta facilidad. Alan se emociono y con cada embestida me hacia dar un paso, hasta quedar sobre el sillón, me arrodille sobre el almohadón y me agarre del respaldo. El vergon empezó a embestirme con tal fuerza que casi me tira del otro lado y quede apoyada sobre el respaldo con las tetas de un lado y mi cuerpo del otro, recibiendo el más doloroso placer hasta ese día sentido. Mis tetas se bamboleaban y en medio de eso mi abuelo y josé se prendieron a la joda, uno en cada teta, mamando sin descanso. De la cogida, que disfrute mucho, casi salgo del otro lado y Alan decidió agarrarme mejor, una mano en la cadera y la otra de la trenza.
- ¿Pero qué haces animal? – le grite – mi pelo –
- Cálmate yegua que te voy a domar – me respondió – este es el rebenque en tu concha y en mi mano las bridas. Ahora a galopar –
Saco casi media verga y la volvió a meter con todas sus fuerzas tirando de mi trenza para que entre completa. Solté un sonoro grito y lo repitió varis veces, con cada embestida yo gritaba con menos fuerza. Me estuvo cogiendo con tal violencia que perdí la noción de todo, mi cabello me dolía mi concha ardía y mis tetas latían, pero Alan seguía su labor dando con todas sus fuerzas. Termine media erguida casi en el aire, sostenida por el pelo y su pija bien adentro, los otros dos ya solo miraban cuando empezó el latido de verga q decía que estaba por acabar. Sin sacarla me agarro de las tetas y se giro, moviéndome con él, se dejo caer sobre el sillón y me empezó a hacer saltar sobre su matraca bestial, en segundos acabo y como antes fue poco porque nada salió de mi cuando empezó a desclavarme. Me dejo casi caer al suelo y yo estaba desfalleciente, los otros dos me levantaron y me sentaron en la mesa, me recostaron y empezaron a recorrer todo mi cuerpo. Yo no podía moverme, como dijo mi abuelo, me hico arrepentir pero no de la cogida, sino de no poder seguir. Mi cuerpo no respondía y solo quería recuperar fuerzas para volver al juego.
En eso golpean la puerta y mi abuelo sale a ver qué paso, los otros dos se vistieron y trataron de vestirme. Cuando mi abu entro dijo que el mozo estaba afuera, los gritos fueron demasiado y querían echarnos, no pudimos hacer nada. Me vestí como pude y juntos salimos del club, a mi abuelo lo reprendieron con no entrar al club en 3 meses y a sus amigos con 6 por escándalo. Entonces mi abuelo me subió a un taxi y me llevo al departamento, dormí todo el viaje y cuando llegamos me acompaño hasta arriba. Por suerte nadie nos vio, se quedo un largo rato para ver si estaba bien y como era obvio me fui a dormir enseguida. Me respete poco después toda adolorida y me metí en la bañera para relajarme.
Fue el final ideal y solo pensaba que pasaría después de eso… veremos
Si les gusto ya saben chicos, un comentario, para que siga escribiendo, espero sus palabras mojada y ansiosa… besos
A partir de ese momento ya no pude ver a mi sobrino como tal, sino ya lo veía como un hombre que deseaba cogerme sin control, a cada oportunidad que mi sobrino tenia lo aprovechaba para ver mi cuerpo, esto era cuando me cambiaba, bañaba, entre muchos otros momentos que tenia para verme y lo más lascivo era que yo no hacía nada para evitar que me viera, al contrario cada vez que me bañaba dejaba la puerta abierta para que me viera y así en la ducha con la certeza que me estaba viendo yo hacía movimientos sensuales e incluso con el pretexto de lavarme mi zona intima yo me la tocaba con tanta sensualidad que sin duda sabia que él tenía su pene bien erecto desde donde estaba viéndome.
Relato erótico enviado por putita golosa el 27 de July de 2010 a las 23:14:27 - Relato porno leído 309834 veces
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notengonombre
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Comentarios enviados para este relato
phantom_n
(21 de April de 2015 a las 02:41) dice:
WOW, que cachondo, realmente usaron tu cuerpo como quisieron, como si fueras un juguete sexual, no sabes como me gustaria darte verga hasta dejarte adolorida la vagina y apretarte las tetas hasta que te duelan como en tu relato, mientras escribo tengo la verga dura de pensar en como te usaria de deposito de mi leche... creo que somos de distintos paises asi que no pasara en vivo, pero me gustaria tener mas contacto contigo ademas de esta pagina, si te interesa enviame un correo a nicolas.javier.1989 arroba outlook.com, me dices que vienes de esta pagina, te espero katebrown
(18 de October de 2022 a las 21:47) dice:
SEX? GOODGIRLS.CF
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