Cuando nos acercábamos a los 40 tuvimos un subidón y nos interesamos por el mundo libertino.
Relato
Lentamente fuimos experimentando alteraciones de libido sucesivas que culminaban en algo que para mi se convirtió en obsesión.
Y es que quería experimentar verle a ella con otra persona.
En la cama le expresaba mis pensamientos y nos poníamos a cien los dos .
El mayor fetiche de ella al ejecutar mis pensamientos era recordar un compañero de trabajo que la acorralaba cuanto podía .
Y la obsesión llegó a ser real . La introducción del amante se me hacía cuesta arriba aunque todo lo que me había contado de lo reailizado entre los dos a ella le había satisfecho.
Eran casi amantes sin compromiso . Las veces no las contó pero más de diez seguras .
Estaba reconcomido por la fantasía de verla poseída por el hombre y mis orgasmos al estar encima de ella eran más rápidos de lo normal.
Ella cerraba los ojos y un buen día se le escapó PEPE , el tal PEPE era el amante . Soñaba con él cuando estaba conmigo.
Y mi fantasma me perseguía y quería verla cuanto antes .
Y al fin llegó el día . Ella lo había preparado todo y en aquel hotel parecía que eran habituales .
En recepción les saludaron por sus nombres .
Ya instalados , me acurruqué en un pequeño sofá mientras ellos comenzaron el rito del amor , que consistía en deleitarse mutuamente donde todo valía .
Mi presencia la consintieron pero bien callado .
Lentamente la pareja ya en la cama se entregaban al placer .
Por delante , por detrás y de medio lado . Estar de espectador cambia la perspectiva .
Fuen una clase de gimnasia total . Mi miembro había salido hacía un rato del escondrijo y forzaba por deleitarse mientras yo lo impedía .
Al final estalló . He de confesar que yo solo miro a ella y a su rostro. Y cuanto mas goza más me empalmo.
La sesión duró unas tres horas .
Se despidieron cortésmente y fuimos a casa.
Mis nervios a flor de piel recordaban la escena y después de cenar , ya en la cama la besé y le introduje
mi polla y admiré su belleza y su placer .
Me dió las gracias por todo y dormimos juntitos.
Ahora los polvos son distintos . los dos somos conscientes de que el amante copula con ella y a veces lo llevo mal . Es una sensación de morbo y repudio .
Pero la excitación con ella es permanente , es mi musa, mi amante y la amante del otro.
Todo muy complicado pero lo sobrellevo con estupor , alegría y ganas . Muchas ganas con el otro y a la
vez conmigo.
yo le metia la verga en el culo una otra ves mientras ella le mamaba la verga ami compadre como una puta desesperada por momentos ella dejaba de mamarle la verga ami compadre por que el ya estaba a punto de venirse para luego mamarle el queso humedo y rojo de mi esposa
Relato erótico enviado por Anonymous el 24 de February de 2010 a las 00:07:43 - Relato porno leído 144229 veces