SERIE 4 - En el colegio- SPH HUMILLACIÓN PENE PEQUEÑO

Es muy incomodo para mi escribir de esto, pero aún así me excita recordar lo que paso y que mejor que compartiéndolo con ustedes para que comenten sobre mi.
Sucedió antes de las vacaciones de verano, momentos en los que nuestra clase estaba en clase de natación. Puedo decir que yo era uno de los mas altos del salón, practicaba deportes y era esencialmente un chico bien formado. pero.... si, tenia el pito pequeño. Esto en realidad no era un problema en la vida diaria, solo que en natación y con el traje de baño de la escuela era muy fácil ver el "estado" de la entrepierna de cada chico. Bueno, yo me ponía un pequeño colchoncito para agrandar mi parte intima, y logre buenos resultados. La gente me miraba y era uno de los mas populares. En esos momentos en lo que íbamos a cambiarnos, me saluda mi amiga Luisa a lo lejos. Ella era una amiga mía desde los 6 años, y ahora teniendo ella 13 años era una chica bien desarrollada. Con un largo cabello castaño, Sus ojos se parecían a un dibujo de anime, grandes y muy expresivos.

-Apresúrate que ya comienza la clase en 5 minutos.

Era linda a su manera, pero sin mentirles les voy a decir que estaba un poco ilusionado con ella. Me cambie y me puse un traje de natación de látex, debido a que el del colegio se había perdido en mi casa. Llegue entonces a la piscina, en donde mis compañeros me conocía por ser un experto en clavados.
-Sáltate una Alex - me decían
-Esperen a que el profe llegue y de ahí salto.
- Salta, no te hagas el terco- me dijo Luisa.
Bueno, Luisa me lo dijo y acepte sin decir mas, con ella no se podía porfiar. Entonces llegue al trampolín para saltar, pero estaba mojado. Me resbale al saltar y me caí de espalda. Me golpee la columna, y entonces se hizo silencio. Luisa nado y llego donde estaba yo, me ayudo a salir de la piscina y con ayuda del profesor que acababa de llegar me llevo a la enfermería. Tenía un dolor inmenso en mi espalda, y no podía dejar de quejarme. Llegamos a la enfermería, donde nos esperaba la enfermera Ivanna que nos atendió rápidamente. Me subieron a una cama y le comenzaron a contar a la enfermera lo que nos había ocurrido. En el acto, la sr Ivanna envió al profesor a la piscina para evitar cualquier otro accidente y le pidió a Luisa que se retirará, pero por mas que le decía, Luisa con los ojos llorosos dijo que quería quedarse. Entonces la enfermera dijo que tenia que revisarme y me dijo que si quería que lo hiciera delante de Luisa. Bueno, yo pensé que solo era un procedimiento de rutina, pero acepte. Entonces la sr ivanna le pidió unas tijeras a luisa, que rápidamente se las dio.

- Ahora tenemos que cortar tu traje de baño, dado que no podemos quitártelo debido a tu estado actual.

Yo me quede de una pieza. No pensé que lo decía de verdad pero comenzó a cortar mi traje y yo me di cuenta que Luisa también se dio cuenta de lo que estaba pasando. Ella se puso roja, pero aun así seguí mirando.
-¿Que es esto?
Mierda, estaba tan preocupado por Luisa que me olvida del colchoncito que puse para que mi pene se vea grande. La doctora lo dejo a un lado y siguió cortando la tela. Luisa también estaba con curiosidad del porque me había puesto eso. La doctora siguió cortando y dejo una pequeña pieza de tela que cubría mis genitales. Bien , genial, al menos no pasaría vergüenza delante de Luisa, pero ella parecía algo decepcionada por no poder ver mi pene.

- Bueno, vamos a tener que revisar todo.
Y comenzó a tocar toda mi cintura y a revisar mi espalda. En eso la enfermera hizo un movimiento con el codo que hizo volar la pieza de tela al piso. Entonces me di cuenta que mi pene, después de haber pasado el frió en la piscina, el golpe en la espalda y pasear con el frió que tenia por media escuela hasta la enfermería, se había encogido a estados ínfimos. Luisa estaba haciendo un esfuerzo por ver, pero la doctora me estaba tapando al revisarme. Esperaba yo que en su mas ínfima misericordia la doctora se diera cuenta de que yo estaba desnudo.Entonces ocurrido lo imposible.
- Luisa, quédate y cuídalo un momento, tengo que hacer una llamada a su casa.
La doctora se aparto y Luisa me vio en mi infinita pequeñez. Ella me vio a la cara , y con sus ojos fue bajando hasta que se posaron en mi entrepierna. Sus ojos, como los de una gato se abrieron enormes y su pequeña boca hizo un rictus de risa, que rápidamente tapo con su indice.
-Dios, este mmm tienes frió no?
Directo en mi ego, ella sabía que lo tenia chiquito. Yo había esperado que por su inexperiencia no se diera cuenta de que mi tamaño era anormal, pero igualmente se dio cuenta.
- si, es que esta haciendo mucho frío, aparte del golpe que me di.
- Te han crecido pelitos no?
-Bueno , yo ya no soy un bebe, tengo tambien trece años.
-Pero parece que es lo único que ha crecido jeje.
-Ya te dije que es por el frió, si tu tuviera un pene también se te hubiera encogido.
- Lo bueno es que lo aceptas, esa es la primera fase para poder superarse a uno mismo. Me recuerdo cuando eramos niños, ¿te acuerdas cuando jugábamos en el rió de mi casa de campo?
- Si me acuerdo, pero que tiene que ver eso con..? - Luego mire a mi pene
- Bueno, es que , pero no te molestes ¿vale?, lo tenias del mismo tamaño que ahora.
- No es cierto, si ha crecido, solo que como mi estatura es mucho mayor a la de antes parece pequeño.
- No, te lo voy a demostrar.
Entonces agarro unas pinzas de la caja de enfermería y comenzó a tirar mi pene con eso. Tiro tan fuerte que comenzó a dolerme.
- AU suelta por favor que me estas haciendo daño.
- Lo siento, pero creo que si ha crecido, aunque sea un poco.
No nos dimos cuenta que la enfermera nos estaba mirando, entonces Luisa se dio cuenta y comenzó a tartamudear.
- Eesstee, bbueno,... ya lo cuide.
Luisa roja como un tomate trataba de explicarse con la enfermera. Es cierto que ver a una chica jalando el pene a un joven de 13 años era algo que no pasaba todos los días, pero la enfermera paso de Luisa y se dirigió a mi.
-Tanto te ha dolido que ahora vuelve a estar super pequeña, que son... 2 centímetros??? jajaja,
Me puse rojo yo también, junto con Luisa, pero eso no estaba por acabar, todavía tenia muchas cosas que decir esa vieja enfermera de mierda.
- Ahora ya veo porque te habías puesto eso en el pilin, querias que las chicas pensaran que ta tenias normalita, pero no vez la decepción que le ocasionaste a Luisa.
- Nooooo, esttte, si sabia de eso.
-¿Ya se lo habías visto?
-No, es que una almohadilla se nota y entre las chicas siempre hablamos de que Alex la tenia chiquita, bueno, solo eran rumores, hasta que...

Mi mundo se derrumbada,¿Todos sabían que la tenia pequeña? que asco de vida.

- Ahora tus padres van a venir, necesitas ropa, levántate y búscala.
-Pero no tiene una bata al menos?
-Esta no es una tienda querido, es un enfermería.
-Yo le puedo ir a buscar su ropa- dijo Luisa
-Aun asi, el esta bien, ya no necesita la enfermería así que sal de aquí

La enfermera hija de perra me obligo a salir y aun rogándole que por favor esperara ella a que luisa fuera a buscarme mi ropa, ella me boto de la enfermería.

- Mis padre se van a enterar de lo que estas haciendo
-Tus padres no se van a enterar de nada, o esperas que ellos se sientan orgullosos de un hijo de ese calibre.
-Cálmate Alex, espérame aquí que voy a buscar tu ropa.

Desnudo y en la puerta de la enfermería, tapándome mis miserias con las manos, espere a que Luisa llegara. Efectivamente ella regreso corriendo con mi ropa que había dejado en el vestuario. Cuando me disponía a ponerme mi calzoncillo, sonó la campana, era la salida de los niños de inicial. De repente sale de una esquina una niña y su madre. La niña que venia salando se dio cuenta de mi desnudez.

- Mira mami, un chizito, un chizito!!!
- No hija es un pilin, como el de tu hermanito, solo que mas pequeño.
-Pero el es tan grande, que mono es su chizito.
- Lo siento, ella es muy precoz en estas cosas- me dijo la madre - La verdad, lo siento mucho- y lo dijo mirando mi pene.

Finalmente cambiado, me acerque a la dirección donde mis padres me esperaban, me preguntaron que es lo que había pasado y si me sentía mal, si necesitaba un doctor o algo.

- Bueno, yo regreso a clases, adiós!- me dijo Luisa
Pero cuando levanto la mano derecha para decirlo, ella inconscientemente junto su indice y su pulgar, haciendo la señala universal del pene pequeño. Ella se dio cuenta y se tapo la boca para evitar una risa. Nos estábamos yendo cuando de repente se acerca corriendo la enfermera.
- Espera, te olvidas esto- Entregándome( mierda) la almohadilla que era para agrandar mi pene.
- Hey que es eso- me dijo mi madre.
-Estee, es una almohadilla de maquillaje que encontré.
- Dámelo, que me falto un poco de arreglo por salir rápido.
Saco ella un poco de polvo para maquillarse la cara, usando la almohadilla que le di.
- Esta un poco usado, y huele a maní, de donde lo sacaste.
Un uppercut directo al orgullo, hasta mi madre estaba en mi contra. Le dije que lo encontré en el comedor y no dije mas. En el carro de mi padre, mire a la ventana cuando nos estábamos yendo y vislumbre a la enfermera mostrando el meñique antes de voltearse y regresar al colegio. Así termino mi "pequeña" aventura, comenten si es que les ha pasado algo similar o si la tienen pequeña, seria una gran ayuda para mi saber que otros la tienen así. Adiós.