Soy una mujer de 39 años casada y sin problemas en mi matrimonio en el cual mi m

Es mi octavo mes de embarazo, el médico me ha dicho que debo suspender toda relación amorosa vaginal para no dañar al bebé, Cristina la tía tendrá que complacer a su sobrino mientras pase mi período de gestación y reposo.

La tía Cristina enferma y debe cuidarse por mas de quince días en cama, yo embarazada sin poder saciar al lobo hambriento de sexo de mi joven amante, la tía enferma y mi muchacho sin pasión voluptuosa es un macho encerrado exaltado, ardoroso, es después de meses de ternura carnal amorosa que él podía elegir dama hoy se encontraba en sequedad, no tenía hembra donde descargarse, nos acariciaba desesperado y ya estábamos dispuestas con la tía de entregar nuestros traseros a pesar de degustarnos esas penetraciones a este semental

Se activa Cristina y trae para superar el problema a una de sus compañeras de labores Irene una madura mujer de 30 años que a pesar de llevar varios años casada aún no puede concebir. Es una mujer no muy agraciada en su cuerpo, un poco gruesa, pero ella deseaba concebir un bebé y no tiene ningún respeto por su marido, ni reparo en dejarse manosear, besar y agredir sus miembros corporales por mi joven muchacho…

Visita a Cristina un día de lluvia y como esta muy mojada esta le dice que se saque esa ropa mojada y la tienden al calor de la estufa, mientras ella se resguarda bajo las mantas en la cama a su lado de su amiga, llega el semental del sobrino e igual proceso su ropa al calor de la estufa y él entre las frazadas de la cama ya ocupada por estas mujeres, menos mal que es una cama de dos plaza matrimonial, bastante apretados están estos tres cuerpos en ese lecho… los roces son ineludibles y nuestros semental se desespera y estimula, prontamente su pene responde con fiereza alargándose y desarrollándose en su grosor, Irene siente esas carnes ardientes, duras, gruesas, punzándole sus muslos y al acomodarse al darle espacio lo siente entre sus muslos, mira a Cristina y esta le dice, aprovecha es una apasionado, tierno y vigoroso macho… ah…, es un poderoso semental, te cubrirá y te preñará si estas en tu días fértiles… las últimas palabras tocan los recónditos pretensiones en Irene de ser madre…

Se acomoda en la cama dejando que este muchacho adolescente trabaje su cuerpo, pronto está sin calzones y estremeciendo de excitación ante los ternuras sensuales y carnales de ese sobrino de Cristina, quien ella casi doblaba en la edad la trabaje preparándola para penetrarla, siente a este besar con sus labios sus piernas, luego esa cabeza se entromete entre sus piernas, su vulva es atacada y la lengua de esta busca en su cavidad su clítoris , en verdad era amoroso y tierno en su actuar apasionado este juvenil macho, cinco minutos después la tiene desesperada por querer ser penetrada y su clítoris casi saliéndose de su vagina, no se entera cuando el pícaro de su adulador macho cambia sus lengua por su miembro en la entrada de su vagina, solo siente como esta es invadida y dilatada al ingresar esa monstruosa cabezota que tiene por glande en su estrecha caverna dilatando y raspando sus pliegues vaginales al introducirse salvajemente en su vagina haciéndola abrir su boca dando paso a los desesperados suspiros que escapan al sentirse asaltada por esa masa de carne, músculos y venas entrando en su entrañas, como la dilata, piensa que la va a partir en dos, entra deleitando a la dama en su apareamiento sin oposición , ella solo gime y suspira encantada con la desfloración de su matriz, siente esa carne en el interior de su cuerpo, la siente golpeando en sus penetraciones a la altura de su estómago, las penetraciones son poderosas y violentas haciéndola gemir de pasión y dolor, pronto la tiene este juvenil ejemplar de 16 años moviendo desesperadamente su cabeza de un lado a otro, mientras siente su vagina mancillada que se abre y cierra alrededor de ese pene que la tiene apasionada en su deleite carnal, el macho la besa, chupa sus senos chupa su cuello mordiéndola suavemente, pero ella sabe que la llenara de contusiones y esos cardenales tendrá que ocultarlos de su marido, de ese cornudo marido, mientras sisea y menea sus caderas desesperada ante los desesperados puntazos de ese pene en sus carnes, Dios si ese mini macho la esta estropeando deliciosamente su vagina en una enlace que muy pronto la llevara a entregarles sus fluidos amorosos, como puede este muchacho saciarla mejor que su marido, ella seguía entregada a este semental agitando desesperadamente sus caderas en una entrega fabulosa que la hacia gemir , sollozar, suspirar y abrazarlo con desesperación cruza sus piernas por las caderas de este su macho desde ahora y abraza su cabeza besándolo, acariciándolo y sintiéndose una esclava entregada a su amo, si amo de su cuerpo, en una despreocupada entrega ella entrega sus fluidos que sus orgasmos con gritos y gemidos anuncian su grandiosa rendición a ese poderoso macho que la regará con sus espermas preñándola ya que esta en sus días de fertilidad. Siente en esos instantes como este juvenil macho riega sus entrañas con su tibia leche y ella se siente en el pináculo de los placeres y embriagada por las delicias del coito se entrega totalmente a este semental.

Ese mes Irene visita cada día sábado a Cristina y por supuesto ahí la espera Leo, cohabitando ambos unas horas para luego marcharse… Irene se entera que esta embarazada y suspende sus visitas a esta casa agradecida de estar preñada por este nóbel sabroso y potente macho.

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