SUPE QUE QUERIA ENTREGARME SU VIRGINIDAD por Felipe pan

SUPE QUE QUERIA ENTREGARME SU VIRGINIDAD por Felipe pan

Desde hace tiempo que tengo la necesidad de relatar esto que me sucedió en el vestuario del club Social y deportivo
De nuestra Ciudad, hace ya cuatro años y guarde hasta este momento en el más hermético de los secretos.
Yo por esos años. Me había recibido de ingeniero electromecánico.
Sin muchas posibilidades de trabajo por no contar con experiencia, el amigo más intimo de mi padre, tesorero del club
Me ofreció que me encargara del mantenimiento del Club, como en la ciudad pese a ser bastante importante nos conocemos casi todos. Prácticamente toda la comisión me había visto crecer y correr por al institución.
Comencé la labor como se acercaba la temporada de piletas, tuve que poner en condiciones. Estaba casi todo el día no tenía horario, la paga era buena, yo cuidaba todos los detalles de mi trabajo para no defraudar.
Paso un buen tiempo y todo marchaba sobre ruedas, el trato con todos los planteles era bárbaro, yo me encargaba de que las calderas funcionaran dado que eran un poco vetustas, y precisaban mucha atención.
Un día estando en arreglo, de una de las calderas que separaba un tabique, del vestuario de mujeres siendo tarde, sin que nadie me viese, escucho Una conversación de dos de las chicas del equipo de hockey (Luciana y Marcela). Donde hablaban de sexo y de las experiencias que habían tenido. Luciana le contaba a Marcela como su primo de Buenos Aires la había desvirgado (con lujo de detalles, dijo que a ella le gustaba masturbarse, y que el la había sorprendido haciéndolo, y que allí se denudo y se metió en su cama y le pidió que le chupara la verga que sino contaría todo, primero no querría pero después se la puso en la boca y se la comenzó a chupar, al lo primero le contaba parecía asqueroso pero después dijo que le empezó a gustar, los sabores de los jugos que entraban en sus boca, dijo que el primo le pregunto si le habían chupado su cotorra y ella dijo que no, y allí el primo le fue lamiendo sus pechos y bajo hasta su chochi ( eso fue lo que la perdió le dijo a Marcela). (Yo trataba de no producir ningún ruido, porque de la forma que Luciana relataba me había puesto al palo).
Le dijo que al abrir los labios de su vagina y poner su lengua, lamiendo y penetrando , cada vez mas rápido la hizo venir con un orgasmo que había sido diferente ( la emoción y la vos que le ponía al relato casi me hizo acabar en seco) , a los que le producía masturbarse, y allí quedo a merced de su primo que sin mediar nada le dijo que su primo se le subió y le abrió su vagina empezó a penetrarla con un pene enorme que portaba, produciéndole ardor y dolor ,pero un placer inmenso que hasta ese día le decía a Marcela que jamás olvidaría y que en cada relación que tiene es distinto pero sus orgasmos son profundos e intensos. Me encanta hacer el amor
Marcela le dice a Luciana que ella sabia, que era virgen y que hasta ahora lo único que había echo era sexo oral a un novio que había dejado y nada mas, le cuenta que se masturba fantaseando con el hombre que ella quería entregarle su virginidad
Porque el no sabia nada pero ella estaba enamorada y si le pedía hacer el amor, se entregaría sin ningún tapujo,
Luciana empezó a decirle que contara quien era, (yo también porque si era amigo por lo menos darle una pista, para que se comiera ese bombón, que era espectacular, 16 años recién cumplidos, rubia 1,65 m, cola formada cintura de avispa, ojos celestes.) como verán yo tengo a todas las del equipo bien observadas pero Marce era una de las que mas me calentaba,
Su cola jugando al hockey me ponía al palo.
Pero Luciana la jodio tanto, que dudaba, pero insistió, tanto que por allí escucho decirle a Marcela que le jurara que no le iba a contar a nadie, su secreto, Luciana contesta que lo que le había contado, también merecía no divulgarlo, ella no dudaba por eso se la había contado (yo para ese momento estaba mas ansioso que chusma de barrio, por saber el nombre del que tenía una oportunidad de comer ese bocado).
Marcela con vos trémula le dice el hombre que no me deja dormir es Ricardo el ingeniero del club, (cuando escuche lo que les relato casi me desmayo, el hombre que la desvivía era yo) se pueden imaginar en ese momento, por el relato de la otra faltaba que me masturbe porque me hizo calentar. Al escuchar eso quería pegar la vuelta hasta vestuario y cocerla sobre los bancos. O debajo las duchas en fin.
Luciana le dice que no era tonta a ella también le gustaba yo, pero le dijo que estaba todo bien que no se preocupara, (yo era todo oídos, atento a los detalles y tan excitado, con mi pene por explotar).
Luciana le pregunta si había insinuado o buscado entablar amistad con migo, a lo que Marcela le contesto que no sabía como
Entonces Luciana le dijo que inventara cualquier excusa para charlar.
Salí de la sala de Calderas, con una idea fija satisfacer los deseos de Marcela. Sin que ella sospechara que yo estaba al tanto de su debilidad, para con migo.
Pasaban los días y ella no había echo nada, ni se me había arrimado. Investigue algunos gustos y actividades. Para ver por donde entrar. En el Club ni me arrimaba a partir de saber lo que escuche lejos de todas (porque a Luciana le gustaba y como era bastante puta, se podía pudrir el pastel, conociéndome que seguro si cuadrara me la cojería también)
Averigüé que ella salía a correr, unas ves por semana, así que ese día me pongo a correr sabiendo por donde andaría como para encontrarnos de casualidad. Echo que se produjo a unos diez Km. De la ciudad, cuando me vio se paro súbitamente, se quedo mirándome, nerviosa, yo me arrime, romper el hielo le dije que había empezado a corre porque estaba muy sedentario y que no sabía que ella le gustaba correr.
La invite a corre juntos y rápidamente acepto al la otra semana el día indicado estaba puntualmente, salimos al trote
Sin insinuar nada, así por varias semanas. Todo igual yo notaba que se derretía. Cuando le hablaba o la miraba. Entre en confianza, la empecé a embromar, hacerla reír con chistes y pavadas invento una lesión en el músculo, ella se acerco para ayudarme y cuando estaba a mi alcance la tome de la mano y con mucha delicadeza le di un beso en la boca, que la sorprendió pero respondió abrazándome y repitiendo con otro beso, introduje mi lengua en su boca, la deje por un instante, logrando un sus piro de ella. Me comporte la becé varias veces, pero nada mas .Le pedí vernos, pero en la ciudad era difícil le dije que me esperara, en la salida del pueblo al otro día que tenia que ir a buscar un repuesto .Del lavarropa industrial del club. Ella iba a inventar algo para estar con migo. A la hora acordada esta en el lugar, la hice subir a la camioneta y Salí rápidamente para la otra ciudad. Mi camioneta era con vidrio polarizados, así que pasaba bien par la intimidad, y los alcahuetes(ella me ponía con mi pene erecto cada ves que la veía, se me hacia agua en la boca) mientras viajábamos ella estaba cerquita mío, la acariciaba en la piernas ,y pase un brazo por sobre ella y le empecé a tocar una teta, acariciarla a jugar con su oreja , mientras cuando podía le daba un beso profundo, la cosa fue subiendo las temperatura de ambos ,en la entrada había un hotel por horas al que enfile sin dudas, la mire antes de entrar y no me dijo nada así que proseguí, entramos a la habitación y nos empezamos a besar y a manosear yo una mano acariciaba los lugares íntimos en un segundo nos despojamos de toda la ropa .
Comencé a besar todo le pase mi lengua desde el pie hasta su cola, le chupe con muchas ganas su chochita, que la hizo venir mojando mi lengua, y relamiéndose del placer, la puse par que nos chapáramos mutuamente cosa que me alegro porque tomo mi verga y la puso en su boca, y chupo y lamió chupo, muy rápido ,igual que yo , no pude aguantar y le deje mío semen en su boca, lo cual no era mi intención , ella escupió todo en una toalla, le dije que me perdonara pero no pude aguantar, que la deseaba mucho me dijo que le había gustado por que a mi dio placer, nos quedamos jugando le puse mi de dedo en su cosita y lo empecé a meterle y sacarle, se empezó a excitar, producía suspiros, gemidos . La puse en posición y empecé a meter mi verga en su conchita, con delicadeza fui atravesando hasta el fondo, sentí como me mojaba con sangre cuando atravesé su himen, sentí su queja de dolor me abrazo y me mordió en tres partes de mi cuerpo, cuando sentí que ajustada pero se amoldaba comencé a entrar y salir con suavidad tratando de producir el menor dolor y que solo sintiera placer. Yo sentí una de sus venidas por que me abrazo y me hizo quedarme unos instantes sin mover pero tuve que sacar mi trozo porque no aguantaba y tuve una acabada que recuerdo con gran placer, había consumado sus deseos, y yo una de las cosas que todo hombre desea alguna vez en la vida. La cosa siguió por muchos meses, termine haciendo de ella un juguete sexual, terminé consumando todo un día me atreví y le pedí hacerle su cola, eso fue fogoso e intenso le dolió mucho pero después era una de las cosas que mas le gustaba hacer en la cama
Habida de sexo durante meses ya nos encontrábamos en cualquier momento que se presentaba, y el sexo era desenfrenado
Ella dejo la ciudad porque se hizo profesional del hockey y se encuentra fuera del país hace rato que no se nada de ella,-