Tangas,hilos y el tremendo culo de la madre de mi amigo (I)

A pesar de que no tiene las tetas muy grandes, lo que destaca sin duda alguna es el tremendo culo que se gasta. No es por exagerar pero, es de las típicas maduras que tienen mejor culo que muchas jovencitas de hoy en día.
Es un culo perfecto. Tiene unas nalgas redondas y bien puestas...es un culo grande y carnoso...de esos que uno da la vuelta para mirarlo sin descaro.
Sabéis que es lo mejor? Que a la muy puta le gusta ir marcándolo llevando pantalones muy ajustados en los que se les marca el tanga, así como leggings que no dejan nada para la imaginación y vestidos muy ceñidos que dejan a la vista estas finas tiras del hilo que lleva metido bien adentro del culo.
Es por ello que a todo el grupo, nos vuelve locos y siempre comentamos cuando nuestro amigo no está presente de que está muy follable y que no nos importaría en absoluto ponerla a cuatro patas como lo perra que es y parece ser en la cama.

Es así como un día comencé con el fetiche de buscar cada vez que podía esas prendas tan intimas y diminutas que se pierden en el interior de su riquísimo culo, rozando completamente con ese ojete que seguramente más de una vez a tragado verga.
Aquellos que han experimentado esa sensación de adrenalina al buscar y poder ser pillado me entenderán perfectamente. Los que aún no se atreven, les invito a hacerlo.
La sensación es indescriptible.
Me acuerdo que la primera vez, llegué a casa de mi amigo y su madre andaba en la cocina con uno de sus hijos menores (5 años) haciéndole la merienda (momento que aproveché para observar esas nalgas que se comían literalmente esos leggings deportivos que se perdían en el interior de su culo.
Subí a la habitación de mi amigo para esperarlo y de repente no sé cómo, me vi con las ganas de entrar a la habitación de enfrente...en busca de algún juguetito sexual o algo que me confirmase lo puta que es su madre.
Esa incertidumbre de no saber si hacía mucho ruido o si alguien subía me tenía el corazón en un puño...sin embargo,mi erección se hacía cada vez más presente. De repente...abro la puerta del armario y ahí estaba...una prenda diminuta, doblada con esmero y por lo visto, esperando ser la siguiente presa en penetrar la raja de esas enormes nalgas. Encima, era super morbosa... fina, transparente y de color negro en el hilo...con un color rojo estilo colegiala en la parte de adelante. Toda una putita que provocaría mil y un corridas a su marido provocándolo de tal manera con esa prenda. No lo dudé ni un segundo y me la guardé en el bolsillo.
Sin embargo...mi excitación me hizo seguir buscando...así es como pude encontrar en uno de sus cajones...un indeterminado número de tangas, hilos, culotts, y braguitas transparentes...semejante zorra estaba echa la madre de mi amigo...toda una madurita batida en mil batallas a la que le encantaba lucir su culo, el cual, hoy en día...no dudo en absoluto que lo debe de tener bien abierto.
Las interminables pajas y las corridas que he tenido gracias a su madre y a la carita de puta tragadora de semen y practicante del sexo anal...son indescriptibles...lo mejor es que no han sido las únicas experiencias...Continuará.