Sus piernas en mis hombros se movían desesperadas acompañando las entradas de mi pene en su matriz luego solo gemidos y mas gemidos de repente un grito y con mi pene hasta el fondo de su vientre grita mis orgasmos, mis orgasmos… me vas a embarazar estoy en … mis días… de fertilidad… ¡ah … oh … ah… tuya! Abrazándome casi me asfixia y baja sus piernas abatida de pasión y gozo…Durante mis seis meses de internado y práctica en esa posta fue semanalmente mi mujer y veía como crecía su vientre.
Relato
Recién recibido de médico cirujano, debo hacer una práctica de seis meses en una zona rural para optar a una de las tres especialidades ofrecida por una clínica.
Al aceptar fui enviado a una zona rural casi perdida en el mapa es en una isla del sur con una posta bien organizada en su creación, con una pequeña casa para el médico de zona compuesta por un comedor-cocina, una sala pequeña de escritorio, un dormitorio bien compuesto, baño pequeño pero completo. Eso si adosado al edificio de la posta rural. A mi llegada no había otro médico por lo que pase a ser medico jefe de esta posta.
Todo bien durante la primera semana hasta una disputa entre la paramédico que ejercía como enfermera jefe y matrona ambas de unos 40 a 45 años con mis 25 años a cuesta era asediado por ambas mujeres maduras, era el motivo de su disputa…, las llamé de a una y conversé con ellas. Frida paramédico con 40 años y dos hijos deseaba atenderme bien a ver si la atendía a ella separada de su marido, sus hijos de ocho y cinco años, al cuidado de su madre, necesitaba el apoyo de un macho. Había puesto sus ojos en mí, no sabía como era este nuevo medico como macho alocado y lo único que quería era montarse al máximo de mujeres. Vivía casi al lado de la posta y su rival 42 años matrona madre soltera de un chico de 17 años que vivía con su abuela en la ciudad.
De esta conversación saque en limpio que ambas estaban sin macho desde hace mas de seis meses cuando se fue el medico anterior que las consolaba a ambas. Bien de ahora en adelante sería el consuelo de estas hembras.
Matilde la enfermera tenía un cuerpo algo grueso, pero sus formas estaban a los ojos de los machos con un soberano trasero, dos hermosos y grandes senos además de ser impertinente en su trato por estar deseosa de sexo, impetuosa y animada por poseerme.
Tuvo su oportunidad un sábado en una emergencia me sacaron de mi cama y ayude al nacimiento del bebé y Matilde se fue conmigo a beber un café a mi casa y de ahí a la cama sin oposición ninguna por parte de Matilde…, esta mujer estaba desesperada…,
En la cama no se movía se transformaba en una acróbata de circo como se enrollaba, se mecía, se trepaba en mi cuerpo pidiéndome más … mas me araño mis espalda cuando comenzaron a llegarle los espasmo de sus orgasmos… gritaba, lloraba gemía al recibir en sus entrañas las emisiones de leches que inyectaba en sus matriz, se ante tanta pasión arquea en la cama llena de pasión, buscando la forma de que mi pene la satisfaciera lo mas profundo posible, esa noche fue la primera de las muchas noches que cohabite con ella, cada encuentro nuestro creo que hacia temblar esa posta rural…
Bien recién llegado y ya disputado por dos mujeres mayores me complicaron en mi persona no sabia como actuar frente a esta gente mas aun cuando una madre de un paciente Verónica tiene veinte y nueve años me complica con una solicitud, su hijo mayor de 13 años estudia en un instituto para-militar y como ella lo encontró enfermo lo mantiene en casa, y en ese colegio solo valen las licencias otorgadas por los médicos, me solicita una como un gran favor, logro mostrándome esas hermosas piernas que tiene la licencia, cruzaba y descruzaba las piernas mostrándome hasta sus calzones. Pero dos semanas después vuelve y ahora es para ella ya que este lunes falló al trabajo y debe llevar justificación médica al día siguiente… viene a medio día, le digo que para mi es complicado por que me controlan mis licencias, pero con halagos y fingimientos de cariños logra la licencia, le digo que estas la tengo en casa y debe acompañarme, acepta, pasamos por la puerta de comunicación a mis aposentos y ella delante de mi movía exageradamente sus caderas mirándome de reojo y sonriendo me decía que a ella le agradaban los médicos sobre todo cuando la examinaban en ropas interiores…, al pasar por mi dormitorio la cojo de un brazo y le digo entonces te examinaré y le comienzo a sacar su blusa quedando en corpiños … me mira sorprendida y se deja correr el cierre de su falda que cae al suelo, la tengo solo en calzones sujetadores, tiene buen cuerpo y a aceleradamente me dice doctorcito soy casada y mi marido me calma mis pasiones dos veces por semana, pero se deja abrazar caliente le beso su cuello y respiro pausadamente en sus orejas oliéndole su perfume, ella cierra los ojos dejándose acariciar me repite doctorcito soy casada, no me impide que la recueste en la cama, me mira asustada sabe lo que vendrá que será penetrada por mi duro y tieso pene que en esos momentos sale al aire al caer mis pantalones, ve lo grueso y prolongado que es, sabe que al penetrarla será maltratada por este y le dolerá arrullarlo en su vientre, abre bien sus piernas preparándose a su entrada, siente como el macho besa su vagina y juega con su clítoris es la primera vez que le hacen esto y le gusta…, comienza a ronronear como gata en celo, grita al ser penetrada por ese colosal miembros en sus carnes vaginales y siente como este macho se las dilata ocupándole su vagina, entre gemidos y suspiros apasionados acomoda ese pene en ella antes de que comience su entra y sale…, se lo sacaba hasta casi salirse y nuevamente la clavaba con fuerza haciéndola gemir y estremecerse de dolor y pasión, se está entregando al doctor y comienza a mover excedida y casi indecorosamente sus caderas es bien montada por el macho y esto la perder el juicio, moviéndose furiosamente y precipitadamente su cuerpo como si fuera una puta en burdel…, ese medico la esta excitando y debilitándola no recuerda mas, no se acordó que era casada ni que tenía hijos solo gozaba desesperadamente siendo penetrada a placer por el joven medico a lo menos por diez minutos, gemía y lloraba de placer y sentía como sus entrañas se retorcían acomodando al pene para entregarle sus orgasmos que llegaron precipitadamente a su apareamiento y su matriz se trastornaba recibiendo los chorros de semen caliente que el macho vaciaba en ella. Gritaba de placer y gozo abrazando desesperadamente a su doctor, refunfuñando de satisfacción en sus brazos. Se había entregado a un nuevo macho, ya no solo su marido se deleitaría de su cuerpo, este médico también sería dueño de sus placeres y entregas.
Tres meses en esta posta y hasta hoy, Matilde y Frida me arrullan y sacian mis apetitos sexuales en la cama de mi departamento vecino a la posta de la posta solo me falta de sus cinco mujeres dos son muy mayores Tránsito de 55 años mantienen el aseo y ornato, además de Gloria otra mujer mayor de 58 años quien es la encargada de la bodega entregando remedios y la leche a nuestros pacientes…, faltando solo pasar por mi cama a Orietta, una mujer de treinta y un año casada con un terrateniente de 58 años en segundas nupcias y este a pesar del empeño de ella no quiere mas de sus tres hijos, que ya tiene y son mayores 25 el menor de ahí para arriba…
Un día sin querer Orietta me solicita un os apuntes de una enfermedad y le digo que se los puedo facilitar sin problemas, pero que los tengo en casa y si me acompaña a buscarlos…, va conmigo…, Orietta es un poco imprudente y me revisa la casa entera, finalizando en mi escritorio donde le pregunto si todo estaba en regla. Ella me confidenció que el medico anterior varias veces la invito a la casa, pero ella no vino… ahora tu me invitas y vengo a la primera ríe nerviosa, no se por que lo hice…, será le digo en broma por que soy mas buen mozo y ella ríe nerviosa refregándose las manos y los apuntes me dice… ahí en ese cajón le digo y ella se inclina en el cajón buscándolo y me regala una preciosa vista de su culazo…, y al agacharse el hermoso valle de sus senos se ven a la perfección, tienes buena delantera y precioso culo digo… como me dice nerviosa y atracándola contra el escritorio le digo eres una mujer de bonito cuerpo y aun no eres madre sabiendo que eran sus máximas aspiraciones de ser mamá, si me dice aun no soy mamá a pesar de mi empeño a lo mejor algo falla en mi cuerpo por eso quiero estos apuntes…, atracada aún contra el escritorio le propongo si le doy un tratamiento y será mamá a los nueve meses, sus ojos se abren y con sonrisa en la cara me dice cual e ese tratamiento… la cojo de sus caderas la siento en el escritorio empujo su cuerpo sacándole sus calzones a la vez que mis labios besan su vagina y lamen su vulva grita no se si de susto, pasión o asombro… luego sisea déjame nunca le he puesto los cuernos a Mario… sigue oponiéndose sin gran esfuerzo… déjame Mario es mi marido no tu…, me abre mas sus piernas para que mi lengua llegue a su clítoris y sisea … soy de Mario, pero no se opone a que la acaricie con mis manos y mi lengua, se agita tratando de pararse de mi escritorio me opongo bajándome mis pantalones y dejando libre mi colosal pene, ella lo mira y me dice es tremendo Mario lo tiene a la mitad, y se disponer a ser sometida por este abriendo lo que mas puede sus piernas para recibirlo en su vagina y útero, diciéndome no me entrará me romperás… entera. Trato de penetrarla, pero es estrecha y debo tomarla en mis brazos y la traslado a la cama en donde le subo sus piernas a mis hombros para poder penetrarla mejor… como vocifera …, no me duele…no me partes… por fin logro penetrar en su vagina de un impulso hasta la mitad, grita, gime llora no se si de dolor o de ardiente pasión, pero me abraza mordiéndome en mis labios, transformo sus mordiscos en besos, ella permite la entrada de mi lengua en su boca entrelazando nuestras lenguas, me besa apasionada diciéndome…, me estas partiendo con tu pene…, pero es glorioso nunca Mario me ha abierto así. Sus piernas en mis hombros se movían desesperadas acompañando las entradas de mi pene en su matriz luego solo gemidos y mas gemidos de repente un grito y con mi pene hasta el fondo de su vientre grita mis orgasmos, mis orgasmos… me vas a embarazar estoy en … mis días… de fertilidad… ¡ah … oh … ah… tuya! Abrazándome casi me asfixia y baja sus piernas abatida de pasión y gozo…Durante mis seis meses de internado y práctica en esa posta fue semanalmente mi mujer y veía como crecía su vientre.
tenia 30 años cuando trabajaba en hospital coincidi una cchica de 20 años hacia un mes mas o menos habia casado eso dato me valio pues mi polla se calento que estuvimos hablando cosa sin importacia hasta que ella saco el tema del sexo pregunto si tenia pareja le dije que no me dijo chico como yo parecia atractivo no la tenia a medida que iva hablando me iva yo acercando a ella cuando quiso darse cuenta yo ersta ya tocandole una teta ella dio cuenta me dio un beso y yo correspondi con un morreo mientras iva abrendo su blusa i se la quitaba ella perdio en tuiempo me solto el cinturon y bajo el pantalon se agacho me saco la polla penzo hacerme una mamada hastaponermla biewn tiesa yo pensaba en otra cosas que fllarme su coñito la desnude cintura para abjo me agache comi coñito hasta que se corrio en mi boca me pedia mas entonces me incorpore entre sus piernas y puse en su entrada de su coñito se la hunidi hasta los cojones empece a moverme suave de atras a lante cuando llevaba un tiempo metiendosela ella se empezo a correr yo estaba casi cerca de hacerlo se lo dije iva ella dejo correte dentro quiero quedarme embafraza q
Relato erótico enviado por Anonymous el 23 de May de 2011 a las 16:47:08 - Relato porno leído 32271 veces
Hace poco en la empresa en la que trabajo, pase por una experiencia entre extremadamente loca por una parte, mientras que por la otra bien gratificante.
Relato erótico enviado por narrador el 23 de June de 2011 a las 16:32:14 - Relato porno leído 26087 veces