Mientras sus hijas se bañaban, ella se apoya de vientre en un tronco caído con su trasero apenas cubierto por esa delgada y mínima tela de su tanga de baño, y me permite sacar esa delicadeza de tanga..., ya estarán pensando lo ocurrido a continuación..., sí, desnudo su trasero, abro sus piernas, ella para su culo para que mi pene pueda meterse entre sus piernas y llegue hasta su mojada y excitada vagina..., luego mordiéndose los labios para acallar los gemidos de pasión y calentura que querían salir de sus labios, me entrega su matriz la cual clavo y empotro con desesperación ante el cuadro de tener cerca a sus hijas mientras copulo feliz con su madre..., como la poseí, si la mecía al taladrarle irracionalmente su matriz en mi entra y sale de mi pene en su vientre, el hecho de hacerlo delante de sus hijas que jugaban felices en el agua, me había desesperado y calentado hasta exaspérame y la insertaba con desesperación y ella apenas gruñía y gemía ante la presencia de sus hijas deleitando de mis copiosas,
Relato
Una amiga de mi abuela la invita a su finca, mi abuela vivía en ese pueblo por lo que sus amistades de juventud aún perduraban, me lleva en este viaje pues estaba de vacaciones, llegamos a la finca de su amiga y ella vivía con su hija Elvira de 30 años casada con un aburrido y pasmado macho dice, la amiga de mi abuela, de 44 años eso si trabajaba en el pueblo por que los trabajos de la finca dañaban su columna, al último quien lleva esta finca soy yo dice ella. La hija le dio dos nietas de 10 y 6 años y son sus ojos, estas corretean todo el día por todas partes. Parece que no quieres mucho al esposo de tu hija dice mi abuela, a lo que su amiga contesta como voy a querer a un bruto que prefiere trabajar como nueve horas todos los días por unos pocos pesos si aquí, vigilando los trabajos de la finca ganaría lo mismo a lo mejor, pero con menos horas. Mi abuela ríe. Mi hija dice también esta aburrida de él, pero esta casada y debe aguantarlo, es tan insignificante que creo que no cumple las labores de macho con mi hija desde hace meses, y cuando lo hace, me dice mi hija, lo hace mal, esta vive caliente cualquier día le va a poner los cuernos... si no lo hecha de su lado es por las niñas que lo adoran y en verdad es buen padre.
Esa tarde van todos a la poza a bañarse y los acompaño, en ella las niñas se divierten y la mamá de ellas sale del camerino con un traje de baño dos pieza mostrando su cuerpo no esta mal, tenía un bonito trasero paradito aunque sus senos eran medianos y sus caderas sensacionales al caminar.., se mete al agua y su traje de baño al mojarse casi se trasluce mostrando ese maravilloso cuerpo de la madre, eso me excita y comienzo a mirar a esta mujer como una posible conquista, a mis 14 años toda hembra era para mí exquisita, y si se mostraba en traje de baño me excitaba y mi pene comenzaba a extenderse, engrandecer y mi glande se robustecía, y el cuerpo de esta mujer me provocaba, la miraba como hembra y ella noto mi mirada diciéndome que te parece mi cuerpo no te emociona, bastante le digo y por eso estoy volcado boca abajo... ríe y dice gírate para verte, mejor que no hay niños presente... nada dice y vuelve al agua con sus hijas, aprovecho de meterme al agua para apaciguar mi miembro dilatado, al entrar al agua ella mira mi entrepierna y dice parece inmenso, nada respondo... en el agua voy a un sector con arena a sentarme en ella mientras medio cuerpo queda sumergido..., cuando ella jugando con las niñas cae a mi lado, manotea y se afirma de mi entrepierna diciéndome perdona caí mal. Oye me dice esto que toco es grande para tus 17 años, no tengo 17 digo, ¿no?, dice... en eso llegan sus hijas y se va con ellas mirándome y sonriéndome.
Al caer la noche salgo a caminar mirando ese fastuoso extenso manto de estrellas, apoyado en una rama no la siento llegar, bonito cielo de estrella me dice, mas que bonito digo, hermoso manto de estrella. Entre más oscuro mas brillante se ven y tomando mi mano me lleva al fondo de los parrones, lejos de la casa patronal cerca de un cobertizo donde se guardan las semillas de las siembras, eres musculoso y bastante orgulloso en tu cuerpo..., no le digo este cuerpo es así por el trabajo que realizamos con el abuelo y si estoy contento con él, puedo tocar dice apretándome en mi pecho sus manos haciéndome doler, oye le digo duele y si yo aprieto tu gritaras, veamos me dice, apreso sus senos y los comprimo presionándolos, solo gime diciéndome son duros verdad, a pesar de haber alimentado a dos bebes, no los suelto y recorro sus cuerpo, oye me dice, este cuerpo es casado y tiene dueño, si le digo tiene dueño, pero este dueño no sabe como debe satisfacerlo y anda este busca como satisfacerse de sus tormentosos padecimientos, que sabes tu si eres un chiquillo de 17 años, ya te dije no tengo 17, solo tengo 14 años, pero tengo experiencia en estos problemas y se satisfacerlos, no serás la primera, soy una mujer no una niña sin experiencia..., no me gustan las niñas me excitan las mujeres maduras y si son casadas más me excitan, además si tienen hijos me estimulan y me provocan a mis hormonas, deseándolas para aparearme con ellas...
Hace meses que estoy excitada te atreves a satisfacerme y me besa... la atrapo entre mis brazos y la recorro con mis dedos, gime angustiada..., aquí no..., nos pueden ver y abre la puerta del cobertizo entrando a este conmigo abrazada...baja su mano y toca mi miembro... oye este es terrible, es grueso y duro como palo.
Apoyada contra los sacos de semillas le subí su delicado vestido, ella se baja sus calzones que caen al suel, mis ropas inferiores siguen el mismo camino, descubierto mi pene lo agarra y lo lleva con desesperación a su vagina sobándose con él..., cuando puedo meter mi pene en su mi vagina ella se aquieta y se queja al sentir a este abrir sus carnes de esa maravillosa vagina estaba tan mojada que mi pene se resbala hasta su interior sin esfuerzo, caímos sobre los sacos amontonados copulando, el deseo que tenía era inmenso como se quejaba de caliente mi hembra, casada con dos hijas entregada a este adolescente y movía deliciosamente su trasero de una forma fantástica, enigmática y sensual... estaba apasionada por una buen coito, diez minutos a lo menos nos revolcamos en esos sacos, luego ella me dice..., cómeme negro que soy tu puta..., eso mi amor dame duro..., destrózame mi cielo soy tu mujer..., lo que me excitaba mas y más duro la poseía y ella quejido tras quejido hasta entregarse al inundar mi pene con sus segregados líquidos que emanaban de su matriz ardiente, otros doce minutos estuve clavándola y manoseando su cuerpo y succionándole sus senos y me decía..., no mi negro, eso va ser del bebé que me estas gestando..., deja mis senos los llenaré de leche para nuestro hijo..., dame tu leche embarázame ya que el estúpido de mi marido no sabe preñarme..., tanto hablaba que por último me fui vaciando poco a poco en su matriz y cada empotrada chorro de semen que le dejaba en su vientre, no se cuantas veces llene de mis fluidos testiculares, pero que estos me dolían cuando acabamos de aparearnos, me dolían.
Esa noche llego a media noche en la pieza de labores donde había hecho mi cama, venía apenas cubierta por una bata , me desnuda y ella se saca su bata que mujer apenas cubierta por las frazadas de la cama, diciéndome hoy lo hicimos incomodo en el cuarto ahora lo haremos en una buena cama... sobé sus senos, mame sus pezones, bese su ombligo lamí sus vagina jugando con su clítoris y esa mujer berreaba desesperada..., no me hagas sufrir métemelo..., hazme tu mujer..., préñame, soy tuya... tu hembra. Y se abría de piernas mientras la penetraba mi pene, como me estremecía, como trepidaba de pasión en su entrega... gran gemidos y ahogados gritos mientras copulábamos como dos glorioso amantes y éramos felices. .Dos veces regué su matriz con mi semen entre alboroto y quejidos de felicidad de mi desesperada hembra..., si... si..., estoy siendo fecundada por ti, pobre de mi marido el no sabe embarazarme, pero tu ya lo lograste, me has fecundado un bebé en mi vientre, soy feliz. Tres horas después se retira agotada a cama y yo me duermo feliz y agotado.
A la mañana siguiente nos saludamos como que nada había sucedido delante de sus hijas y su madre, me ofrece hacerme un delicioso desayuno con huevos tocino y cebolla, y al servírmelo me dice al oído, para que tengas fuerzas más rato cuando vayamos a la poza....
¿Qué pasó en la poza?
Bueno lo contare..., mientras sus hijas se bañaban, ella se apoya de vientre en un tronco caído con su trasero apenas cubierto por esa delgada y mínima tela de su tanga de baño, y me permite sacar esa delicadeza de tanga..., ya estarán pensando lo ocurrido a continuación..., sí, desnudo su trasero, abro sus piernas, ella para su culo para que mi pene pueda meterse entre sus piernas y llegue hasta su mojada y excitada vagina..., luego mordiéndose los labios para acallar los gemidos de pasión y calentura que querían salir de sus labios, me entrega su matriz la cual clavo y empotro con desesperación ante el cuadro de tener cerca a sus hijas mientras copulo feliz con su madre..., como la poseí, si la mecía al taladrarle irracionalmente su matriz en mi entra y sale de mi pene en su vientre, el hecho de hacerlo delante de sus hijas que jugaban felices en el agua, me había desesperado y calentado hasta exaspérame y la insertaba con desesperación y ella apenas gruñía y gemía ante la presencia de sus hijas deleitando de mis copiosas, abundante y deliciosa en su embutidas en sus entrañas ante mi desesperación de sentirla mía otra vez . Fuimos felices una vez mas al entregarle y ella mojarme mi pene con unos orgasmos que a pesar de morderse los labios salieron de su boca con un ¡ah!...,¡oh!, delicioso Hmm..., las niñas le preguntan que dices mamá ..., nada les contesta ella tratando de regularizar su respiración alterada por la pasión del coito. Se gira me mira y me dice hoy te vas, pero en mi vientre queda un recuerdo tuyo... luego te iré a ver, de mí no te desprendes tan fácilmente, eres mi macho..., el dueño de mi cuerpo. Acariciándome y sobando mi pene le dice gracias te necesitaba. Inmediatamente se mete a la poza a retozar con sus hijas mirándome maliciosamente me dice, ven báñate con nosotras...
Ambos iniciamos a besarnos con toda pasión, con aun más pasión que la primera vez, mientras nos besamos Armando comenzó a tocarme mi zona intima debajo la falda de mi vestido y como consecuencia a esto de inmediato me moje toda, ¡Quiero hacerte el amor! Me dijo suavemente al oído, -Lo sé y también quiero- le conteste.
Relato erótico enviado por putita golosa el 29 de August de 2010 a las 23:31:22 - Relato porno leído 513555 veces