Luego de muchos años por fin dimos ese paso tan peligroso pero a la vez tan deseado por ambos, despues de limitarnos a espiarnos o encuentros accidentales llego el día en que no pudimos volver atrás y disfrutamos consientemente el uno del otro olvidando los tabues y restricciones que impone la sociedad.
Relato
Desde muy chica note la diferencia entre mis hermanas y yo, tanto fisicamente como en la manera de comportarnos había algo que no encajaba en las caracteristicas que deben existir entre hermanas de la misma sangre. A los doce llevada por la curiosidad descubri el secreto que mis padres guardaban, no era hija de quien creia mi padre si no de un hombre que había abandonado a mi madre mientras ella estaba embarazada y a
Luis sin importarle su embarazo le propuso matrimonio y darme hasta su apellido y todo lo que yo necesitara. Mi madre acepto casarse con él y con el pasar del tiempo ella se enamoro profundamente de él y formaron una linda familia de la cual me sentía afortunada de pertenecer.
Me hice una chica muy linda, como les dije totalmente diferente a mis hermanas en varios aspecto, mi piel era blanca y el cabello castaño, tenia pecas en mi rostro y espalda, linda cara y mientras crecía fuí adquiriendo un lindo cuerpo tal como el de mi madre quien se caracterizaba por conquistar las miradas de los hombres principalmente por su hermoso trasero y yo tambien iba por el mismo camino.
Luis me consentía en todo lo que yo quisiera, sobre todo luego de descubrir la verdad acerca de mis raices, pensaba que él trataba de compensar el hecho de no ser mi padre dandome cuanto capricho saliera de mi boca pero con el paso de los años comprendí que había algo más detrás de aquello y no se como no puse reparos en detener aquello, por el contrario lo persuadí para que fuera más atrevido y mientras más obtenia de él era más permisiva en situaciones que llegaron a escapar de mis manos.
Luego de enterarme de toda la verdad comenzaron a suceder cosas anormales, extraños encuentros con material erotico y luego un poco más porno fueron minando mi mente y así comence a transitar aquel camino pernicioso y de lujuria que aún teniendo esa corta edad mi mente logro analizar y usar para el disfrute en soledad y usando mi imaginación me convertí en una niña muy caliente y de mente sucia perdiendo parte de los valores que alguna vez había comenzado a acumular.
Una tarde a solas en casa descubrí entre mis libros del colegio una pequeña revista,era un comics porno, inmediatamente entre a mi habitación y comence a ojearlo, era increible la situación que plateaba,la historia de una niña de 11 años enamorada de su padre. La chiquilla valiendose de el estado de embiaguez en que había llegado su padre una noche logro introducirse en su habitación y aprovechandose que este dormía profundamente se dedico a tocarlo y lentamente logro poner erecto el pene del hombre y así comenzo a chuparlo habilmente pues espiaba a su madre mientras ella le hacia lo mismo y poniendo en practica aquellos conocimientos se monto encima y restrego aquel enorme miembro en la entrada de su cuca humedeciendola con sus propios flujos hasta lograr penetrar un poco, solo el glande pero lo disfruto al maximo hasta volverse loca y casí despertar a su padre. Aquel comics le hizo ver desde otro punto de vista a su padre y lejos de haberle causado alguna repulsión aquella situación lo que hizo fué excitarla como nunca antes, se recosto de espaldas acomodando varias almohadas en su espalda y mientras observaba aquellos dibujos tan bien logrados comenzo a frotar su clitorís hasta lograr tener el mejor orgasmo que había conseguido en su corta busqueda del placer.