Una muchacha me persigue 3 y su madre

Al verla en la escala esperándome parecía una niñita por su diminuto físico. Grande fue su sonrisa al verme

Abrí la puerta del piso y la invite a pasar, al cerrar la puerta considero Gigi la madre que esa era la orden y cual gato mimoso se abraza y refriega contra mi cuerpo provocadora y me dice anoche no pude dormir pensando que hoy estaría junto a un semental que me estimula, que deseo sentirlo en mi cuerpo, quiero ser tu hembra…, mi marido es un negativo macho… solo piensa en él y punto sin mirar a la mujer que se retuerce esperando mas caricias y llegar a sus orgasmos.

De ti como te alaba mi hija, estoy loca de tanto escuchar su relato al preguntarle como perdió su niñez. No, no me enoja alguien tenía que ser el primero, pero hacerlo de esa forma maravillosa y acariciada hasta llegar al cielo mientras el macho la zamarrea y destroza su cuerpo es único

Ven me dice llevándome a la cama donde me desnuda y espera que la desnude… lo hago, venía con un juego de ropa interior diminuto y se menea excitada y deseosa de apareamiento carnal.

Nos besamos en la boca, me agarró la cara con las dos manos y comenzó a besarme, esta vez su lengua buscaba abrir mi boca.
Siguió besándome, esta vez con furia, abría mi boca con su lengua, me besaba el cuello, me tocaba los pechos, yo estaba en la gloria, no sabía que hacer al respecto. Y él seguía, esta vez, aprovechando que estaba semi desnuda en la cama comenzó a tocarme las piernas, que son mi punto débil, me agarraba la cola, me la apretaba, mientras continuaba besándome, no se en que momento me abrió de piernas y apoyó todo su miembro contra mi vagina por encima de la biquini que tenía puesta. No se en que momento, me agarró la mano y la llevó a su miembro me la hizo agarrar y ahí comencé a sentir que ya no podía, y a esa altura, ya no quería pararlo. Comencé a retribuir sus besos, abrí mi boca y le di mi lengua mientras seguía agarrada a su miembro que estaba que explotaba.
Gigi arrebatada y excitada entregada siente como el macho la agarró de la cintura, me levantó hacia él, me saco los calzones, mientras besaba mis pechos ya fuera de los sujetadores, metió su mano entre mis piernas, tocaba mi vagina ya húmeda de tanta excitación, bajó su cabeza y comenzó a lamerme mi vagina, que hermoso que lo hacía, ya fuera de mi me tiré para atrás y comencé a gozar, me saqué toda preocupación de mi mente y quedamos los dos desnudos de ropa y de pensamiento solo mi mente pensaba en el placer de sentirme abrumada por ese tremendo pene.
Al cabo de un rato de lamerme y hacerme gozar hasta el cansancio, abrió mis piernas y comenzó lentamente a penetrarme, lo que le pedí es que lo hiciera salvajemente.
Pude sentir como toda su hombría entraba en mi de un solo impulso arrancándome un suspiro de dolor mezclado con placer al sentir todo su aparato abrirse camino entre la paredes de mis entrañas, él empezó a entrar y salir moviendo su cadera en circulo mientras con la boca chupaba mis erectos pezones mientras yo le tenia sujetado de sus nalgas empujándole mas y mas adentro de mí.
Sentí que él me levantaba las piernas con sus brazos y metía más rápido su pene en mi vagina que estaba escurriendo jugos por todos lados. Esta situación hizo al poco tiempo que mis caderas comenzaran a convulsionarse, me meneaba escandalosamente y le enterrara mis uñas en su espalda; gritaba y no se de donde saque fuerzas para levantar con mi cintura ese cuerpo él advirtió que se venia mi orgasmo y acelero sus maniobras terminamos juntos muy agitados abrazados y besándonos como no queriendo que se terminara el momento. Ese delicioso y conmovedor momento de mi entrega a este desde hoy mi macho.
Pensaba que había transcurrido horas con Gigi pero no solo media hora y había sido una jubilosa media hora… esa mañana se queda copulando conmigo toda la mañana, dormía a ratos y luego la poseía, ella solo me decía no embaraces a mi hija… y a ti le decía y ella respondía cuantas veces quieras soy tu mujer y tienes ese derecho.
Dos veces mas la tuve ensartada con mi miembro contra el colchón de mi cama como berreaba mientras subía sus piernas en mis hombros que hembra iba a tomarla de sus caderas y no se por que deslizo mis manos a sus muslos apoyándome en sus exquisitos glúteos y la alzo al asiento, me dice oye me estas agarrando mis carnes de mi trasero, creo le digo que esas carnes vinieron a mis manos querían ser acariciadas, me mira a los ojos y se ríe… eres un conspirador te estas aprovechando de mi, la acomodo en la cama y arreglo sus piernas trasformando los almohadones de la cama, al bajarlos su cuerpo cae hacia atrás y sorprendida abre sus piernas recogiéndolas me mostraba ese delicioso y caliente pasillo su vagina. Gruñí excitado al ver esas preciosas piernas abiertas mientras metía las manos entre ellas, se las estaba acariciando…, ella resuella a mi contacto y me mira sorprendida y asustada, yo estaba en las nubes acariciando esos muslos, los acariciaba con placer… ella rezonga no tan fuerte me haces doler…suave, la miro y veo que no reclama…, me mira diciéndome el estúpido de mi marido no me acaricia y hace como dos meses que no conozco el placer de ser apareada por un macho…, bueno ya sabrás como están mis adrenalinas deseando un macho… así que acaríciame suavemente, saxo su calzón y meto mi cabeza entre sus muslos…, tirita y se sacude angustiada, se siente la mujer mas deseada del mundo, la mujer mas feliz del mundo, sentía esa lengua entrando en mi vagina al encuentro de mi clítoris que se fortaleció y se vivificó, estaba siendo explorada salvajemente por un macho y lo peor me gustaba como lo hacía y quería más…, gemía, gruñía, suspiraba alterada en mis hormonas agarre su cabeza y la apresé contra mi vulva mientras me bamboleaba enloquecida de pasión por ser apareada…, su pene se acomodo entre mis piernas abiertas… me metía sus manos entre mis senos, me sentía en el línea alta de los placeres, me quita la blusa y se adueña de mis senos lamiéndolos y mordiéndomelos, le ruego sin dejar marcas…, son tuyo digo. Ensartada recibía las atenciones del joven macho quien en esos momentos se preparaba a ensartarme su feroz y descomunal miembro en mi vagina, desesperada ante ese descomunal miembro que entra en mi cuerpo abriéndome me abrazaba al macho gimiendo y pidiéndole si, rómpeme mi sexo como me lo rompiste al comienzo del día, y abría lo que mas podía sus piernas pare devorarse ese pene en su vagina, con grandes suspiros de pasión y entrega como una colegiala me entregaba a mi astuto macho, sentía su pene que me llegaba hasta mi garganta en cada arremetida era de este varón su hembra caliente, ella sin darse cuenta me abraza apretándose contra mi cuerpo con sus brazos ligados a mi cuello, mis hormonas se revolucionaban en mis venas, ante estas escenas mi pene se despabilada y comienza a estimularse y pronto me duele de sentir lo soberbio de su crecimiento ante esta mujer semi desnudas y en proceso de desfallecerse por un coito, no lo pienso dos veces y me desnudo…, la apresa entre sus brazos a la estimulada prima quien incitada, excitada y ansiosa de macho no opone resistencia y será presurosamente atacada por este macho, quien desea penetrarla de un golpe son su pene en sus carnes vaginales…, al sentir este miembro clavando a su cuerpo esta mujer se trastorna ansiosa del placer del coito, permitiéndome los libres movimientos de macho cabrío y prontamente la tengo ensartada hasta juntarnos ambos en un apareamiento majestuoso, gime, solloza, se encorva y arquea apreciada como mujer y siendo deliciosamente manoseada y cubierta por este macho, su dueño…, quien no se detiene en sus movimientos a pesar que le solicita calma…, calma cuando le llegan sus orgasmos enrollándose en el cuerpo del semental y fundiéndose en un solo cuerpo a este macho ella una sumisa amante recibe entre sus pliegues vaginales la invasión de ese grandioso miembro, más meneos de caderas, suspiros y agitados gemidos son escuchados en esa pieza mientras esa mujer es transformada en la amante de este macho que la satisface y se place en cubrirla con su apasionado erotismo satisfaciéndola entre afligidos aullidos de placer recibiendo en sus entrañas los chorros de leche vaciados por el vigoroso y resistente primo en sus entrañas vaginales. Trata de retirarse ella le pide que la acompañe por esa mañana, agotado duermen hasta el atardecer, ahora es ella quien despierta, trata de levantarse…, se lo impide el macho que la vuelve acomodar en su cama y nuevamente siente ella ese miembro hurgando en su vagina abriendo sus paredes hasta llegar a su matriz, grita, nuevos meneos de caderas, suspiros y agitados gemidos son escuchados en esa pieza mientras ella como mujer es transformada en la amante de este macho que la satisface y se place en cubrirla con su apasionado pasión satisfaciéndola de placer Es de ahora en adelante su ardora amante. Si ahora se levantan el debe atender su turno y ella volver a casa… al levantarse Gigi siente los maltratada que esta después de tanto sexo convulsionada escandalosamente por el macho, pero debe ir a su casa como puede se mueve, volverá otro día.