Categorias

Relatos Eróticos

Ultimas fotos

Photo
Enviada por narrador

Photo
Enviada por ELCASUAL

Photo
Enviada por rodolfosalinas


 

Valentina y Ana. Tercer Parte

Relato enviado por : arzk el 21/09/2016. Lecturas: 4151

etiquetas relato Valentina y Ana. Tercer Parte   Primera vez .
Descargar en pdf Descarga el relato en pdf
Resumen
Nuestro tercer dia juntos, de como le rompí la colita a Valentina...


Relato
Tercera parte
Esa noche nos acostamos los tres en mi cama, la sensación de los cuerpos desnudos de Valentina y Ana pegados a mí era maravillosa, nos quedamos dormidos rápidamente, o al menos eso recuerdo. A la mañana siguiente me despertó la deliciosa sensación de una boquita en mi pene, cuando abrí los ojos vi a las dos hermanas divirtiéndose con mi miembro. Valentina estaba a mi izquierda, en posición de perrito y con las nalgas al aire mientras que Ana estaba a mi derecha acostada en la cama boca abajo, ambas se turnaban para darle lamidas a mi verga y en ciertos momentos pude ver sus lenguas tocándose cuando se enredaban en mí.
Ana fue la primera en notar que yo estaba despierto y me sonrió muy tiernamente, yo estiré mis manos para acariciar las caras de ambas al tiempo que les preguntaba que hacían, ellas respondieron que despertaron y cómo estaban aburridas decidieron ponerse a jugar conmigo. Las dejé seguir hasta que quisieron, yo estaba disfrutando mucho y al parecer ellas también, le dije a Valentina que se acomodara sobre mí y comenzamos un delicioso 69, yo le metía los dedos en su peluda vaginita al tiempo que saboreaba toda su humedad, no tardó en empezar a escurrir sus deliciosos líquidos mientras la masturbaba y mientras tanto ambas seguían dándome la mejor mamada de mi vida. Después de un rato me entraron muchas más ganas de coger así que decidí poner a Valentina boca arriba para penetrarla mientras le decía a Ana que se colocara sobre su hermana mayor, poniendo su pequeña vagina en la cara de Vale y mientras su hermana le daba una sesión oral ella podía lamer mi pene y el clítoris de Valentina mientras la penetraba; sobra decir que la sensación combinada de mi verga metida en una niña apretadita de tan sólo 14 años mientras una nena de 8 daba lamidas suavecitas y la visión de ambas niñas ante mí, desnudas y haciendo toda clase de perversiones, me tenía a mil, normalmente aguanto bastante antes de sentir ganas de correrme pero todo eso era demasiado para mí así que empecé a disminuir el ritmo para calmarme, no quería terminar todavía.
Me separé de ambas para calmarme pero les dije que continuaran mientras me movía alrededor de la cama para poder disfrutar del espectáculo en diferentes ángulos, me acerqué a la cara de Valentina y pude ver el placer que le provocaba lamer la pequeña rajita de su hermana, arrimaba su cara a la entrepierna de Ana y se esforzaba por meter la lengua profundamente. Ana por su parte estaba disfrutando de la lengua de su hermana mayor pero estaba un poco quieta, así que le empecé a dar instrucciones de cómo masturbarla, le enseñe como mover los deditos dentro de ella y donde lamerle el clítoris para darla más placer a Vale, ya que su manita era muy pequeña podía meterla casi toda en el coño adolescente de su hermana mayor, yo me masturbaba suavemente y tenía unas ganas tremendas de correrme pero me estaba exigiendo a mí mismo contenerme pues habían sido dos largos días de cogidas y quería reservar semen para más tarde.
Las dejé seguir con su juego hasta que se cansaron y me dijeron que era hora de desayunar, así que así fue, no nos molestamos en vestirnos y por mi casa rondaban dos pequeñas nenas desnudas como si fuera lo más natural del mundo. Después de desayunar el calor era tremendo así que quisimos bañarnos, esta vez no hubo demasiada acción en el baño y salimos directos hacia la recámara, yo aún no había eyaculado así que mis ganas de coger eran tremendas.
Lo primero que hice al llegar a la cama fue lubricar a Ana para cogerla, había decidido correrme en su rajita y llenarla totalmente. La acosté en la cama boca arriba con las piernas abiertas y comencé a darle suaves lamidas desde el ano hasta llegar al clítoris. No pasó mucho tiempo hasta que la sintiera lista así que levanté sus pequeñas caderas hasta acomodar mi pene en su vagina y comencé a penetrarla suavemente, mientras todo esto sucedía, Valentina se tocaba suavemente, yo veía su rajita adolescente cubierta de vellos mientras sus pezones coronaban sus preciosos pechitos y se movían al ritmo de su respiración cada vez más agitada al ver que me cogía a su hermanita. No llevaba ni cinco minutos y estaba a punto de correrme pero no me decidía a hacerlo pero cuando Vale comenzó a tener un orgasmo que le hizo salpicar pequeños chorritos no pude más, descargué totalmente dentro de Ana y ella sólo abrió mucho los ojos al sentir mi semen llenado su interior.
Fue delicioso pero ciertamente agotador, mi pene inmediatamente perdió dureza y me recosté en la cama entre las dos niñas, ellas se acomodaron para que nuestras cabezas quedaran a la misma altura y nos dedicamos a darnos besitos, incluso los tres al mismo tiempo, este jueguito tan rico comenzó a darme ganas de nuevo y sin dejar de besarnos comencé a masturbar a las dos al mismo tiempo, Ana a mi derecha y Vale a la izquierda, la rajita de la pequeña aún estaba escurriendo semen de mi corrida y eso lo hacía especialmente resbalosa, aunque Valentina se mojaba más cada vez que introducía un par de dedos en ella. Finalmente la mayor se volvió a correr mientras que la pequeña sólo disfrutaba, su joven cuerpecito no estaba listo para tener orgasmos tan seguidos como los de su hermana en plena adolescencia.
Mi pene estaba lo suficientemente duro de nuevo así que esta vez decidí cogerme a Vale mientras ella le lamía la rajita llena de semen a su hermanita, Ana estaba boca arriba en la cama y su hermana de perrito con la colita parada hacia mí, cuando se agachaba a lamer, sus nalgas se abrían deliciosamente, así que mientras me la cogía comencé a jugar con su colita, primero lubriqué muy bien un dedo y forcé la entrada, ella pegó un gritito pero se dejó, al parecer le estaba gustando, cogíamos lentamente y al cabo de varios minutos ya había logrado meter dos dedos en su dilatado ano. Ella levantaba más la cadera pidiendo un poco más y fue así como decidí cogerla por detrás, le saqué mi verga empapada en sus jugos y comencé a forzar la punta en su ano, ella no se movía pero cuando mi glande entró pegó un brinquito y me apretó fuertemente, le pregunté si quería seguir y ella dijo que no sabía, que sentía rico pero también raro, entonces la lubriqué intensamente y fui metiéndole mi verga en el culito. Cuando le dije que estaba toda dentro ella dijo que le gustaba sentirse así de llena. La presión en mi pene era maravillosa, Ana se había levantado y estaba con la cara muy cerca de mi pene mirando asombrada como el culito de su hermana estaba recibiendo mi verga, no sé si fue intencionalmente o no pero se tocó su propio ano cómo preguntándose si le cabría; así que le dije que se pusiera de perrito junto a su hermana y mientras cogía suavemente a Vale comencé a juguetear en el culito de Ana, sin embargo no logré meter más de un dedo y la pequeña se quejó demasiado así que lo dejamos.
Le dije que se acostara cerca de Vale y le diera besitos, así que eso hizo y mientras yo estaba sintiendo tan rico que no podría aguantar demasiado, terminé por explotar en el culo de Valentina y después lo saqué con cuidado, dejando un ligero rastro de semen al salir. Nos fuimos al baño a darnos una ducha rápida los tres y al salir nos quedamos en ropa interior, yo sólo con un bóxer negro, Vale llevaba únicamente una de mis playeras, lo que marcaba sus pezones de manera increíble por lo duritos que estaban y Ana llevaba unos calzoncitos blancos muy inocentes y una blusita rosa muy pegadita de tirantes. Nos sentamos a ver televisión, como a la media hora Ana se quedó dormida así que la recosté sobre mis piernas, su cara muy cerca de mi pene. Eso me provocó una erección, aunque no demasiado firme, aun así Vale aprovechó para sacarme la verga de la ropa interior y se puso a manosearme, de repente acercaba mi pene a la cara de su hermanita pero sólo la acariciaba suavemente con mi miembro, se veía que se estaba divirtiendo. Pasamos un buen rato en esos jueguitos y viendo tele intermitentemente, pero después nos empezó a dar sueño y decidimos ir a la cama, dejamos a Ana dormida donde estaba y me recosté con Vale, yo boca arriba y ella junto a mí, de lado y con una pierna cruzada sobre mi pubis.
Pasaron menos de dos horas y despertamos con hambre, después de cenar nos sentamos de nuevo a ver televisión, parecía que nuestras ganas de coger se estaban terminando, por mi parte tenía erecciones continuas pero no demasiado firmes, cuando manoseaba a Vale la notaba húmeda pero no mojada, y Ana se mantenía tranquila. Se me ocurrió una idea de repente, así que rápidamente revisé mis películas xxx y elegí una ligera para mostrársela las niñas, era sólo sexo normal, sin demasiada violencia y con poca historia, pero para ellas fue algo totalmente nuevo, Vale me preguntó si me gustaba como se veía la vagina de las chicas de la película totalmente depilada y yo le confesé que sí. Se miró la entrepierna y me dijo que le quitara los pelitos, después de meditarlo un momento le dije que sería mejor que la rasurara porque así no le dolería pero le advertí que probablemente tendría comezón en los próximos días.
Nos fuimos al baño los tres y comencé a rasurarle cuidadosamente toda su rajita adolescente, tardé unos pocos minutos, durante los cuales ella parecía disfrutar de mis dedos manoséandole cada rincón de su vagina, nalgas y ano. La enjuagué con agua tibia abundante asegurándome de darle un suave masaje para calentarla, Ana y yo admiramos el trabajo finalizado. Debo admitir que la visión de Valentina con sus pechos pequeños coronados por sus pezones que parecían estar siempre duros y su vagina ahora sin un solo pelito a la vista era increíble, así que en ese mismo momento la levante y la cargué de frente, la penetré así de pie y sin miramientos, ella pegó un grito de puro placer y mientras me la cogía así, enfrente de su hermanita experimenté una sensación de morbo demasiado intensa así que me puse de tal manera que las nalgas de Vale quedaran en la cara de su hermana y le dije a Ana que le metiera un dedo en el culito, ella fue muy obediente, debido a su pequeño tamaño le fue mucho más fácil y yo podía sentir el dedito de Ana deslizándose en su hermana mayor, le dije que lo metiera y sacara despacio primero y luego fue aumentando la velocidad, después le dije que metiera dos dedos y eso bastó para desencadenar el orgasmo de Valentina, pese a que apenas y me movía dentro de ella, la masturbación de su hermana en el ano le hizo tener una corrida espectacular, con contracciones deliciosas que aprisionaban mi pene y los deditos de Ana.
Cuando Vale se calmó la baje y posteriormente decidí cogerme a Ana ahí mismo, lubriqué mi pene con ayuda de los jugos de su hermana y la cargué, sobra decir que era mucho más fácil que su hermana mayor pero ligeramente más complicada la penetración, aun así nos las arreglamos y después de tenerla firmemente ensartada en mi pene comencé a moverme para sentir la vagina de una niña de 8 años recibir mi miembro dentro de ella, Vale estaba frente a nosotros, le dije que se acercara y pegó su cuerpo al nuestro, con la espalda de su hermana en su pecho y yo comencé a besarla sin dejar de cogerme a Ana, el morbo una vez más hizo de las suyas y no tardé demasiado en correrme dentro de la pequeña, quien tuvo algo parecido a un orgasmo dadas las contracciones que sentí.
Después de volver a limpiarnos les dije que esta noche no sería conveniente dormir en mi casa puesto que su mamá y su abuela podrían llegar temprano al día siguiente; después de platicarlo un poco las niñas aceptaron y las acompañé a su casa, me despedí de ellas y las dejé instaladas mientras yo regresaba a mi casa a descansar del maravilloso fin de semana que habíamos pasado juntos.
Tuvimos algunas oportunidades más en los siguientes meses, no tantas como yo hubiera querido pero con gusto relataré todas mis experiencias si se animan a comentar o votar los relatos. Saludos

Otros relatos eroticos Primera vez

A mis 12 años, con unas chavas de 12 13 y 14, algo nuevo para mi, mi iniciacion hacia el sexo, practicamente una orgia con ellas y con mis amigos, simplemente algo que recordare por el resto de mis dias.
Relato erótico enviado por Anonymous el 08 de June de 2004 a las 09:55:40 - Relato porno leído 465022 veces

el amigo de mi papa me desvirgo

Categoria: Primera vez
Cuando senti que el me puso su verga en mi entrada lista para metermela me estremci de placer.
Relato erótico enviado por Anonymous el 23 de April de 2010 a las 18:09:14 - Relato porno leído 335434 veces
En mi fiesta de 15 años en un vochito de mi misma edad me hicieron mujer y fue el comienzo de una relación intensa.
Relato erótico enviado por Anonymous el 09 de July de 2004 a las 00:33:10 - Relato porno leído 242207 veces
La lleve a su recamara dentro los aposentos de la iglesia, ella repetía que era una locura pero también ya estaba caliente, lo note por su humedad que tenía ya en su vagina, ella me dijo que nunca había estado con un hombre y que no sabía ni como se hacía el sexo más yo le dije, “No te preocupes mamacita yo te guio” le subí totalmente su vestido y le abrí sus sexys piernas.
Relato erótico enviado por reycolegial el 07 de September de 2009 a las 16:44:00 - Relato porno leído 201020 veces
Soy jardinero en una mansión hace muchos años, los chicos crecieron con migo pero llego el día que Lucrecia la mayor se convirtió en mujer..-
Relato erótico enviado por felipepan el 15 de June de 2012 a las 00:27:20 - Relato porno leído 191665 veces
Si te ha gustado Valentina y Ana. Tercer Parte vótalo y deja tus comentarios ya que esto anima a los escritores a seguir publicando sus obras.

Por eso dedica 30 segundos a valorar Valentina y Ana. Tercer Parte. arzk te lo agradecerá.


Comentarios enviados para este relato
Este relato no tiene comentarios

Registrate y se el primero en realizar un comentario sobre el relato Valentina y Ana. Tercer Parte.
Vota el relato el relato "Valentina y Ana. Tercer Parte" o agrégalo a tus favoritos
Votos del Relato

Puntuación Promedio: 0
votos: 0

No puedes votar porque no estás registrado