vestí de puta y me violaron SOY SANDRA ,somos un matrimonio español sobre 40 años de vacaciones estábamos buscando algún sitio en donde pasar unos días de vacaciones, lo comente con mi marido y el me propuso ir a las islas del caribe y acepte, ya que es un lugar fabuloso por sus playas, sus hoteles y su clima, así que decidimos irnos, contrate un paquete de 6 días y 5 noches en régimen de todo incluido, llegamos a nuestro destino un lunes por la tarde.
Un hotel fabuloso, con unas instalaciones impresionantes cogimos nuestra habitación y como siempre cuando estamos fuera de casa hicimos el amor de muy variadas maneras para pasárnoslo bien y disfrutar de cada momento de vacaciones, así transcurrieron tres días mi marido estaba fascinado igual que yo ya que lo estábamos pasando muy
Relato
SOY SANDRA ,somos un matrimonio español sobre 40 años de vacaciones estábamos buscando algún sitio en donde pasar unos días de vacaciones, lo comente con mi marido y el me propuso ir a las islas del caribe y acepte, ya que es un lugar fabuloso por sus playas, sus hoteles y su clima, así que decidimos irnos, contrate un paquete de 6 días y 5 noches en régimen de todo incluido, llegamos a nuestro destino un lunes por la tarde.
Un hotel fabuloso, con unas instalaciones impresionantes cogimos nuestra habitación y como siempre cuando estamos fuera de casa hicimos el amor de muy variadas maneras para pasárnoslo bien y disfrutar de cada momento de vacaciones, así transcurrieron tres días mi marido estaba fascinado igual que yo ya que lo estábamos pasando muy bien, esa noche, la tercera, decidimos ir a la sala de baile del hotel para disfrutar de la música Sin tener la menor idea de lo que me esperaba.MI marido cogió fiebre y se quedo dos dias en cama .Yo estaba aburrida y salí a divertirme un poco. Me gusta ponerme minifaldas (con o sin medias de red), pantalones blancos y ajustados de los que transparentan, tops cortitos enseñando los tirantes del sujetador...Me encanta comprarme ropa interior pequeña y transparente, de manera que muchas veces se me transparentan los pezones de mis camisetas o bien se me puede ver el tanga asomando por encima del pantalon. En fin, que soy un poco guarrilla a la hora de vestir, pero ya que puedo presumir de cuerpo, ¿no?.
Así que después de cenar, y justo antes de irme sola a la cama, cambié de idea, y decidí conocer algo de la vida nocturna de San Juan. Por lo que me puse un pequeño, y bien ajustado mini vestido blanco de lycra las bragas se me marcaban mucho y decidí quitar merlas , con gran escote sin sujetador ,era un bombon , y como soy rubia y piel clara, cara muy bonita labios de comepollas..., lo que sumado a mi estatura de un metro sesenta y cinco sin zapatos, me hace ver mucho más alta, cuando me puse las plataformas que había comprado, luego agarré mi pequeño bolso de turistas.
Aunque no conozco el Viejo San Juan, , así que decidí ir a la segura, y en lugar de estar caminando por las calles adoquinadas, Habia salido a tomarme unas copas en una sala de festas con muchos tios buenos me sente en la barra , parecia una puta buscando clientes Me senté de lado, y sentí cierto escozor entre mis muslos, muy cerca de mi vulva. Por lo que de manera distraída y descuidada, separé un poco mis piernas, y comencé a pasar mis dedos sobre mi vulva, y parte de mis muslos.
Después de un rato, fue que me di cuenta de que al otro lado de la fila, había un tipo que no dejaba de observarme. Por lo que casi de forma automática, dejé de pasar mis dedos sobre mi coño, y cerré mis piernas. Al tiempo que me dije mentalmente, que bueno que mi marido no está aquí, porque de lo contrario me armaría un alboroto si se hubiera dado cuenta de que el tipo ese me estaba viendo el coño, de manera tan descarada.
Pero casi al mismo tiempo, sin dejar de ver al curioso que me estaba ligando, continué diciéndome a mí misma. Pero como marido no está, para aguarme la fiesta, continué haciéndome la distraída, Yo en medio de mi borrachera, y a manera de una pequeña travesura, volví a separar mis piernas, lo suficiente como para dejar que el tipo ese continuara clavando sus ojos entre mis piernas, para ver parte de mi coño,No bien me había sentado, cuando un par de jóvenes, de aproximadamente 25 o 28 años, casi de inmediato me buscaron conversación. Bueno como me encontraba sola, y no fueran a pensar que soy una anti social los dejé que me acompañasen en la mesa en que yo me encontraba, por lo que ellos dos en muestra de su agradecimiento, me invitaron unos trago es de que comencé a bailar tanto con ellos, me gusto la manera en que ambos me apretaban contra sus cuerpos, y a medida que seguimos bailando y bebiendo, yo continuaba divirtiéndome de lo lindo, sin pensar ni por un segundo en mi marido. Cuando el show del imitador de Elvis terminó, ellos dos me invitaron a seguir la fiesta en su apartamento incluso me pagaban 300 dolares para que follare con ellos .... Quizás en otro momento les hubiera dicho que no, pero como me estaba divirtiendo tanto, acepté. se me hizo un poco tarde y regresaba a toda prisa por una calle muy oscura de un barrio muy marginal, , alguien salio de detrás de un coche y me empujó hacia un callejón. Sin poder reaccionar me colocó un esparadrapo ancho en la boca para que no gritara y me ato las manos con una cuerda. Tirando de mi por la cuerda que ataba mis muñecas, me introdujo en un portal del callejón y me subió a un piso en la primera planta. Una vez que llegamos a una habitación vacia me arrojo al suelo. Yo trate de levantarme y salir de allí corriendo pero el hombre, que iba vestido con gabardina y pasamontaña negros me agarro y zarandeo para que lo escuchara:
-Escucha bien lo que voy a decirte puta . Si quieres salir viva de aquí, tendras que hacer todo lo que yo te ordene. Obedeceme y mañana por la mañana podrás irte a tu casa, no me obedezcas y...¿te a quedado claro puta veterana?
Yo estaba aterrorizada y movi la cabeza afirmativamente, mi familia, que se encontraban a solo dos manzanas del hotel. El hombre era de constitución fuerte, por lo que más valía hacerle caso.
-Esta noche unos amigos y yo vamos a disfrutar de tu cuerpo. Intenta portarte bien y todo pasara rápido. Si nos pones las cosas difíciles, te haremos mucho daño y puede que no salgas de aquí ¿entendido?.
Volví a responder afirmativamente, mientras iba tomando consciencia de mi situación y las lagrimas no dejaban de correrme por las mejillas. ¿Qué se proponía este hombre?¿De que amigos hablaba? El hombre se incorporo y salió de la habitación, dejándome tirada en el frío suelo. Casi al instante volvió a aparecer con una cámara de vidio y un trípode, que coloco en una esquina de la habitación. Después de ponerla a grabar se acerco a mi, me arrancó mi vestido blanco y me dijo -perra no llevas ropa interior que putón eres ....
En ese momento aparecieron por la puerta tres hombres negros totalmente desnudos y con sus pollas tiesas. ¡Madre mía, vaya pollones que tenían! Todas debían de medir entre 30 y 40 cm de largo y eran muy gruesas. En ese momento me quería morir, ¡esos cabrones me iban a destrozar!. El secuestrador se dirigió a mi: "Ahora, gran puta, vas a dejarte hacer lo que ellos quieran".
El primero de los negros se aproximó, yo intente levantarme del suelo pero con las manos atadas me resultaba muy difícil. Me agarro por los tobillos y me separo brutalmente las piernas, abriendo melas hasta no poder más. Otro de los negros se aproximó también y mientras el primero me mantenía abiertas las piernas, me chupaban los pechos y mordían mis pezones un negro en cada pecho . Entonces, sin más demora, el negro que tenía entre mis piernas coloco su pollón en la entrada de mi raja y sin usar ningún tipo de lubricante me empezó a meter su gran capullo. Yo notaba como me iba llenando poco a poco pero al gritar solo se me escuchaba un gemido por culpa del esparadrapo que llevaba en la boca.
Al poco, yo me notaba ya con la vagina llena y al mirar hacia abajo para ver si ya me había metido toda su polla...¡madre mía, si solo me había metido la mitad! En ese momento, de un bestial golpe de cadera me la insertó hasta el fondo. Yo creo que nunca he sentido tanto dolor como en ese momento, pensé que me había desplazado los ovarios hacía arriba de la brutal embestida. Entonces la volvió a sacar por completo y la metió con fuerza hasta el fondo. Estos movimientos los estuvo repitiendo como unos cinco minutos mientras yo no paraba de pensar que en uno de esos golpes me iba a partir por la mitad.
Entonces el negro que estaba a mi lado y que me había quitado mini vestido me quitó el esparadrapo de la boca, pero justo cuando me disponía a gritar me abrió la boca con una mano y con la otra guío su polla a mi interior y me introdujo todo el capullo impidiendome gritar. Entonces empezó a meter poco a poco parte de su tremendo pollón y no me había metido ni un cuarto todavía cuando su polla rozó mi campanilla. Entonces la retiró un poco, pudiendo coger yo un poco de aire, pero enseguida volvió a introducirmela un poco más, hasta el principio de mi garganta.
Me dio una arcada y el negro volvió a sacarmela ligeramente para repetir la operación metiendome cada vez un poco más. Con cada introducción me daba una tremenda arcada al notar su polla rozandome la garganta hasta que, pasados unos minutos me acostumbre, y su polla empezo a bajarme por la garganta cada vez más. El muy cabrón la dejaba metida durante unos segundos impidiendome respirar con normalidad, mientras el otro negro seguía violandome con dureza dilatando mi coño hasta límites insospechados.
Cuando yo creía que nada podía empeorar el negro que me estaba follando el coño me levanto las piernas y el cuerpo hacía el techo, de modo que quede solo apoyada en el suelo con la cabeza y la nuca, mientras el resto del cuerpo se me quedaba en posición vertical. En esta incomodísima postura el cabrón siguó follandome, mientras se acercaba el tercer negro. El primer negro se movió un poco hacía delante para dejar al aire el agujero de mi culo a completa disposición del tercer negro. Coloco su megapollón en la entrada de mi esfínter y se dispuso a metermela por mi ano.
Yo intentaba gritar pero el pollón que tenía introducido en mi garganta no me dejaba. Lloraba como una niña pequeña pero no me servía de nada. El tercer negro me empezo a introducir su polla por mi estrecho orificio anal, abriendomelo poco a poco, pero al tener la vagina ya repleta de polla resultaba mucho más dificil introducir nada por mi culo. Aún asi, el pollón se fue introduciendo suavemente hasta que los huevos hicieron tope y la dejo ahí metida. El culo me ardía, no sabía como era posible que aquello me hubiera entrado del todo. Nadie puede imaginar lo que yo sentía en ese momento.
Tenía un pollón gigante follandome violentamente mi coño, otro enorme metido hasta el fondo en mi culo, y uno más violandome brutalmente mi garganta, sin contar en la posturita que tenía, casi haciendo el pino. Aquello era más de lo que nadie podía soportar. Así estuvieron durante más de media hora y además los muy cerdos iban cambiandose de agujeros, con lo que la polla que había estado en mi boca pasaba a follarme el coño, la que me jodía la raja pasaba a mi culo, y la que violaba mi ano pasaba a follarme la boca, con mis consiguientes arcadas y asco que me producía que una polla que había estado metida en mi culo pasara a mi boca. Cuando me iba a desmayar, los negros empezaron a terminar, cada uno en su agujero.
El primero que eyaculó fue el que me follaba la boca. Como la tenía tan adentro de mi garganta, creo que su primer chorro me llegó directamente al estómago. Mientras la sacaba lanzó un segundo chorro en mi garganta que fue bajando nuevamente hacia mi estómago, un tercer chorro inundo mi boca dandome de lleno en mi campanilla y produciendome una nueva arcada, el cuarto chorro me cruzo toda la cara desde la barbilla hasta el pelo, el quinto y el sexto fueron a parar a mi ojo derecho y a mi mejilla inquierda. Los siguientes chorros ya fueron muy débiles pero sirvieron para acabar de mancharme toda la cara.
El semen me resbalaba por el pelo, las orejas, la barbilla...El segundo en acabar fue el que me violaba por el coño. Con su pollón bien adentro empezo a disparar chorros de semen caliente que empezaron a llenarme todas mis entrañas, el útero, las trompas, la vagina, no quedó ni un solo centímetro de mi interior que no fuera bañado por el abundante esperma. Por último eyaculó dentro de mi culo el tercer negro. Era como si hubieran metido una manguera dentro de mi ano y la hubieran abierto, aquello no parecía tener fín. Chorros y chorros de semen corrían por mis intestinos, parecía que iba a reventar por algún sitio. Los tres negros salieron de la habitación y me dejaron allí tirada en el suelo, sin fuerzas para moverme ni para gritar, chorreando semen por todos mis agujeros. Rios de esperma salían de mi coño, mi culo y mi boca. Yo creía que por fín todo había acabado, cuando el hombre que me secuestro y que había estado grabando toda la escena, salió de la habitación y al poco regreso con dos perros gigantescos, dos pastores alemanes que enseguida soltó y ambos se acercaron a olerme.
Con las pocas fuerzas que me quedaban conseguí arrastrarme hasta un rincón pero no podía hacer nada más. Horrorizada contemple como el hombre se me acercaba y me volvía a poner el esparadrapo en mi boca cubierta de semen para que no gritara y se aseguro de que las ataduras siguieran en orden. Basto con unos minutos oliendome para que los perros comenzaran a desenfundar sus pollas rojas.
Eran dos pollas enormes de unos 30-35 cm, gruesas y con una gran bola monstruosa en su base. Siempre me había dado mucho asco todo lo relacionado con la zoofília...¡y ahora estas dos bestias me iban a violar! Yo estaba arrinconada en una esquina y no tenía escapatoria. El primer perro se me subió encima y con su gran peso me aplastaba contra el suelo y me inmovilizaba totalmente. Intento montarme en la posición del misionero sin mucho éxito, su polla golpeaba en los alrededores de mi coño sin precisión, pero el semen que tenía por todas partes sirvió para que en una de sus embestidas su polla resbalara dentro de mi vagina.
Entonces empezó a follarme como un loco. ¡Vaya pedazo de bestia! ¿Qué se había creido, que yo era una de sus putas perras? El perro me la metía y me la sacaba a toda velocidad y con mucha violencia, metiendo en cada embestida un poquito más de su verga. Ayudado por el semen que aún quedaba dentro de mi coño su polla roja entraba cada vez más hasta que en una gran embestida logró meterme su enorme bola. ¡Joder que dolor, me parte, me parte!-llore para mis adentros, con mi vagina dada de si al máximo. ¡Vaya pedazo de polla canina que tenía incrustada hasta mis ovarios! Entonces sin previo aviso el perro se quedo quieto y yo pude notar como empezó a correrse dentro de mi. Litros de leche canina inundaron mi interior, pero como la bola de la base de su polla se me había introducido, hacia perfecto tapón, de manera que tenía mi coño sellado.
¡Litros de esperma perruno inundándome y sin poder darle una salida! La tripa se me empezó a hinchar debido a la cantidad de líquido que me estaba introduciendo el puto perro y yo sin poder hacer nada. Cuando el perro hubo terminado de descargar, paso la pata por encima de mi y se quedo enganchado por su polla dándome la espalda. ¡Que situación tan degradante, yo abotonada con un enorme perro y el cabrón del secuestrador grabándolo todo! Cuando el perro se pudo soltar, sono un plof al salir su enorme verga y un chorro de leche salío disparado de mi coño.
Poco a poco mi vagina fue volviendo a su posición habitual mientras seguía expulsando parte de la corrida del perro. Sin poder reponerme de la gran follada del primer pastor alemán, el segundo ocupo su lugar y con mucha mejor puntería que su compañero y gracías a lo mojado de mi zona, de una sola embestida me la endiño...¡pero por mi ano!¡joder, puto perro cabrón, pues no me estaba dando por el culo! Yo me sentía como una puta cerda, me habían violado tres pollones negros por todos mis agujeros dejandome bañada en semen, y luego me había fornicado un gran chucho corriendose dentro de mi. Ahora me estaba reventando el culo una polla grande y roja de un puto perro asqueroso, así que me sentía realmente como una perra, una puta barata, una zorra de 17 años que había sido violada, humillada, degradada...
Estaba yo en estos pensamientos, cuando un gran dolor en mi ano me hizo volver a la cruda realidad. Parecía como si me desgarraran mi conducto anal y es que el bulbo del perro había desaparecido dentro de mi culo, dejandome lo más abierto que podía llegar a estar sin romperse por algún lado.
En ese momento el pastor alemán comenzó a soltar su semen en el interior de mi culo. Yo notaba como se iban deslizando sus chorros dentro de mi, llenando mis intestinos como si me hubieran aplicado un enema, pero en vez de con agua con leche de perro. Cuando terminó, pasó la pata por encima y se quedó abotonado, como su compañero, pero este no se limitó a esperar para poder sacar su rabo de mi culo, sino que empezo a tirar para soltarse.
El muy cabrón me estaba destrozando mi ano, quería sacar una cosa que no podía salir y me estaba causando un dolor y un ardor inimaginable. Yo lloraba y lloraba, pero no podía hacer nada. Al cabo de unos minutos, que a mi me parecieron horas, el perro pudo sacar su polla de mi agujero y abandonó la habitación siguiendo los pasos de su compañero. El semen del perro me había entrado tan adentro que casi no expulse nada, ya que lo mantenía retenido en mis entrañas.
El hombre del pasamontañas se acercó a mi, me desató y me quitó el esparadrapo (que me dolío debido al semen que ya se me había secado), y me dijo que me había portado muy bien, que no dijera nada de lo sucedido o el video llegaría a mi marido . Yo casí no me podía mover, pero como pude me puse el mini vestido y los zapatos de tacon alto y salí de allí casí arrastrandome. Ya había amanecido cuando pisé la calle, así que intenté recorrer las dos manzanas que me separaban de mi hotel tapandome lo más posible para que la gente no reparara demasiado en mi lamentable estado, ya que estaba toda despeinada, con el cuerpo cubierto de semen reseco y chorreando la leche del perro por mi culo, que ahora ya empezaba a expulsarlo y me bajaba por mis muslos sin parar.Creo que eso fue todo lo que me sucedió aquella noche de verano que nunca podré olvidar, pero todo fue culpa mía por vestir como una puta borracha,
Creo que eso fue todo lo que me sucedió aquella noche de verano que nunca podré olvidar.
Enterré mis uñas en la espalda de Carlos, era increíblemente doloroso. Las dos vergas lograron entrarme en la chucha pero no completamente.
- Aguanta zorra. Aguanta que te las vamos a meter las dos.
- No… me duele.. duele… no.. paren…
Relato erótico enviado por culona69 el 01 de February de 2012 a las 23:57:40 - Relato porno leído 203143 veces
mientras tanto los demás hicieron un circulo en mi con sus vergas y empecé a lamer cada una de ellas, eran muchos pero le di una buena mamada a todas esas vergas, las más ricas eran por supuesto la de mi suegro, el señor de barba larga y la del gordo
Relato erótico enviado por culona69 el 26 de October de 2011 a las 00:00:07 - Relato porno leído 155782 veces
Monté sobre el señor y él empezó a lamerme los pechos con muchas ganas, se veía que le gustaba. Todo el tiempo los señores me estuvieron diciendo cosas como: "Ah que rica jovencita", "Uy hace cuanto que no tocaba una piel así"
Relato erótico enviado por culona69 el 07 de March de 2012 a las 00:00:07 - Relato porno leído 135528 veces