La hermosa muchacha estaba echada en el piso, sobre su estómago...Vestía una camiseta blanca sin mangas y shorts de denim muy cortos. Sus hermosos pies estaban desnudos, con los tobillos atados y las plantas mirando hacia el techo... plantas duras, curtidas, amarillentas, que mostraban incontables marcas de quemaduras y algunas cenizas... Los fumadores se le acercaban y apagaban sus colillas en sus plantas, sin siquiera mirarlas, como si fuesen simples ceniceros...la muchacha apretaba los dientes y su rostro mostraba un gesto de dolor con cada quemadura, pero no dejaba escapar ni una palabra, ni un quejido.
De vez en cuando un fumador jugaba un poco... Acercándose a los "ceniceros", limpiaba los pies de la chica con la mano, retirando las cenizas que las cubrían...examinaba la superficie de sus plantas, la delicada forma de sus pies bellos, largos, delgados y de arcos pronunciados... le acariciaba las plantas y sentía con placer lo duras y ásperas que éstas eran... definitivamente los pies de esta preciosa muchacha hacía mucho que habían olvidado lo que eran los zapatos. El hombre sonreía, se notaba claramente que disfrutaba lo que veía y lo que sus manos sentían. La chica temblaba, ya que sabía que aquéllos que inspeccionaban sus plantas eran los más temibles, los peores...
El tipo buscaba un lugar sin quemar en las plantas de la muchacha y, lentamente, colocaba el extremo encendido del cigarrillo sobre éste...apenas tocando la piel curtida, pero sin presionar mucho para no apagar la llama. Aspiraba el cigarrillo para avivar el fuego y regresaba a su diversión.
Durante media hora el cenicero había sido exclusivamente suyo...multitud de puntos rojos cubrían esas superficies de cuero vivo. La bella muchacha había sufrido una tortura terrible, pero ni una palabra había escapado de sus labios... aunque las lágrimas rodaban por sus mejillas. Luego el hombre limpió las cenizas de nuevo, besó apasionada y largamente ambas plantas y las lamió...desató a la chica y le dijo:
"La noche ha terminado mi amor, ya podemos ir a casa"
La figura de Carla recortada por las luces que le venían del interior de nuestra casa, marcaban a la perfección sus curvas y sus largas piernas... Ella, esperando ahí, en el portal, ansiosa por recibir a Luis y Antonio para que le den caña delante de mí, hacía que mi morbo trepase hasta el cielo......
Relato erótico enviado por domo54 el 18 de January de 2009 a las 17:00:00 - Relato porno leído 40514 veces
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dg2001
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Comentarios enviados para este relato
katebrown
(18 de October de 2022 a las 20:14) dice:
SEX? GOODGIRLS.CF
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