Exhibiendo a mi esposa…
Que tal.
Antes de nada les aclaro que en realidad mi esposa ni se presta a las fotos y menos aún que la que les saco las subo a algún lugar. En verdad no es tan difícil pescarla ya que es común que haga algún “descuido” como a la vez es de dormir muy fresca de ropa en verano o en mas de una salida vuelve pasada de copas.
Reconozco que años atrás sentía en realidad molestia cuando veía que alguien le clavaba los ojos al descuidarse y mostrar algo mas, como así también en los casos que usando alguna bikini alguien le clavaba los ojos en forma discreta (o no) o si caminado por la calle o en alguna reunión ocurría la misma cosa. Por varias razones (ya las iré comentando) fui cambiando hasta encontrar esas situaciones muy excitantes, aunque a muchos les parezca raro.
Entre las situaciones que comencé a generar ( y disfrutar ), fue el “exhibirla” en lugares habituales en situaciones comunes pero que se que generan excitación en otros.
Tenemos diferentes trabajos, ella trabaja en forma independiente por lo cual tiene mayor libertad en sus horarios, asi que a veces cuando ella debe hacer algún trámite cerca de mi oficina o algo por el centro, pasa a buscarme por la oficina para de ahí salir a algún lado o para volvernos juntos.
Algunas veces se queda en la oficina esperándome para desde ahí salir, por supuesto de acuerdo a la forma en la que llegue vestida a veces la hago esperar algo de más.
Una de las situaciones por ejemplo, fue al verla llegar de remera y pantalón de tiro corto hacerla entrar a mi oficina y pedirle que se siente frente a mi mientras charlábamos, le comente que debía ver un tema con otra persona del trabajo por lo que saldría unos minutos por lo que le ofreci mi notebook como para que revisara su correo o la usara. Quedo entonces en la posición ideal como para darle un recreo a la gente: sentada de espalda a la puerta de entrada por lo que al salir la deja abierta. Por supuesto que desde el otro lugar iba observando como iban pasando para verla. Sin dudas causo sensación.
Otra vez, charlando en la oficina una de las empleadas me comenta sobre un cliente, mirón obsesivo de empleadas de polleras y sandalias… me resulto cómico en ese momento.
Un día llega a buscarme mi esposa (algo temprano) así que al ver como había vestido decidí “visitar” al cliente mirón ya que se presentaba una gran oportunidad de exhibirla. Le dije de aprovechar la excusa que debía visitar a alguien así ganaríamos tiempo siendo un tema simple de resolver en la oficina de un cliente.
Fuimos a su oficina (muy cerca de mi trabajo), y al llegar a su entramos al office a tomar un café para esperarlo y de paso juntarme con el dejándole a mi esposa cerca. Mi esposa y yo quedamos en los extremos de la mesa (ella haciendo unas llamadas y viendo unos papeles).
Llego el “miron”, se la presente y comenzamos a charlar algunos temas simples y tome unas notas y asi darle tiempo como para que la mire (es mas hasta tuve la suerte que la mesa era de vidrio) el “miron” no podía disimular el clavarle los ojos en las piernas cada vez que yo tomaba alguna nota. Hasta volvió a ofrecernos café como para tomar una mejor posición y asi poder observar mejor el espectáculo de sus piernas.
Esto duro poco tiempo pero lo suficiente como para pescar esas dos fotos y dejar mi morbo al 100%
Como mi marido va creando situaciones en las que me convierte en exhibisionista, llegando al grado, no se si planeado o no, llegar a un extremo en que permito que varios de sus amigos me posean, por todas partes de mi cuerpo.
Relato erótico enviado por Anonymous el 22 de January de 2014 a las 21:38:59 - Relato porno leído 218731 veces