Mi hija abandonó los estudios, y decidí darle un susto. ( CON fotos)

Pero le dije de inmediato, que yo no iba a mantenerla el resto de su vida, que como ya ella era lo suficientemente adulta como para tomar sus decisiones, también lo tenía que ser para, trabajar y mantenerse.

La verdad es que aunque le busqué trabajo en muchos lugares, lo que a Veronica le gusta son dos cosas, y me lo dijo muy claramente. Una es fiestear, y la otra follar y no precisamente en ese orden.

Yo estaba descorazonada, hasta que hable con su padre, mi ex marido. Y cuando le conté lo que sucedía con nuestra hija, sonriendo me dijo, no hay duda que salió a mis hermanas.

Yo me sorprendí, ya que ignoraba que mi ex tuviera familia, es decir hermanas, y fue cuando él me confesó que sus hermanas se dedican al oficio más antiguo del mundo, y lo peor de todo es que es el quien las administra.

Yo me quedé sin saber que decir, hasta que de momento se me ocurrió. Bueno de tal palo tal astilla. De haber sido un chico, le diría que hiciera lo que le diera su real gana. Pero que me impide decirle lo mismo a mi hija. Me preguntaba yo.

Así que fue cuando decidí, decirle que si ella quería ser puta, que fuera la mejor. Por lo que con la ayuda de su propio padre, la encerramos en mi habitación, y comenzamos a charlar con ella.

Pero al ver, que lejos de asustarse, con esa idea le pareció magnifica. Mi ex, y yo le dijimos que le íbamos a mostrar lo que le esperaba en el futuro si decidía dedicarse a puta.

Veronica se sonrió, y con un gesto algo vulgar nos dijo, Ok manos a la obra. Yo la verdad es que no tenía ni idea de que hacer, fue su padre quien pidiéndome que lo siguiera, tomo la iniciativa.

Así que entre él y yo comenzamos a toquetearla, al mismo tiempo que la fuimos desnudando, Mi ex me agarró de ejemplo, como para comenzar, mientras nuestra niña nos observaba, llena de mucha curiosidad.

Por lo que entre su padre y yo fuimos introduciendo a Veronica, poco a poco en el mundo que a ella tanto le fascinaba.

Veronica al principio se limitó a observar, como su padre me follaba a mi, y hasta me mamaba sabrosamente el coño. Pero luego por insistencia de ella, tomó mi lugar, y su padre se la clavó sin consideración alguna.

Lo bueno de todo eso es que hoy en día mi hija es una de las damas de compañía mejor cotizadas, y yo que era secretaria legal, colgué los bolígrafos, y también me dedico al mismo oficio, bajo la administración de mi ex...