Aquella noche de sábado mientras una copita nos alegraba el espíritu , estábamos mi mujer y yo viendo una peli de médicos y salió una escena tórrida.
Mi mujer tomó mi mano con fuerza y me contó algo sucedido tiempo atrás en una guardia nocturna con un compañero con el cual mantuvo un diálogo fecundo sobre el sexo y coincidieron en que el hospital había bastante .
Relato
Los dos se contaron situaciones vividas . Ella le insinuó que había rechazado propuestas de alguien de su equipo y el otro le dijo que ya lo sabía .
Entre los hombres hay farrucos presumidos que cuentan las conquistas que no han existido pero ahí se quedan .
Vamos , que mi mujer parecía que se había acostado con el otro cuando ella me lo negó pero dijo que le hubiera gustado porque el tío estaba muy bueno .
lo que sí tuvieron fue un calentón elevado y llegaron a manosear sus cuerpos .
El hombre totalmente empalmado y ella húmeda , muy húmeda .
Tras este comentario nuestros cuerpos se juntaron más y .nos besamos .
Fuimos a la cama y en plena oscuridad nuestros cuerpos se encontraron y hubo una explosión de gozo y placer .
Me recordó que estuvo a punto y yo me elevé aún más.
Por supuesto que no encendimos la luz , para qué . La pasión a oscuras es más pasión .
Yo me lo imaginaba todo y ella acariciaba en su mente el cuerpo del otro.
Al amanecer nos miramos , nos besamos y le dije que me hubiera gustado verte con él en la cama.
Me llamó de todo pero reconoció que ella también lo había deseado .
De aquel incidente ahora tenemos más complicidad en nuestras conversaciones sexuales y le propongo a menudo que me excite con situaciones pasadas .