Violación de la doctora en el hospital

Violación a la doctora en el hospital

Eran las 14:50 hs de un día martes. El hospital estaba desierto. Unas horas antes estaba atestado de gente, que desde temprano espera para ser atendida. En el pasillo donde la gente esperaba, solo había una mujer con su hijo, con el brazo enyesado hasta el hombro. El único consultorio que atendía era el de traumatología. El muchacho estaba ahí para que le retiren el yeso. El pasillo era largo y frío.

Yo estaba sentado en el patio, observando a unos veinte metros de distancia, del otro lado de un ventanal. Se abrió la puerta y salió la doctora, que los invito a pasar.

Luego de 20 minutos se retiraron. Me acerque al sitio, había un silencio sepulcral en todo el lugar. Me coloque un pañuelo en la cara, al estilo de los western, junto a una visera que ya tenia puesta, además de unos guantes de látex.. Por ultimo saque de entre mis ropas un defensor electrónico de 40000 volts, siempre observando que no hubiera nadie cerca. Abrí la puerta a las 15:12 hs.

Era una habitación pequeña, toda pintada de blanco con un reducido escritorio a la izquierda y una camilla a la derecha. Detrás de esta había una puerta que comunicaba con otra habitación donde se sacaban los yesos. A un costado de esta había un pequeño baño. Ahí estaba la doctora. Me acerque lentamente, y me abalance sobre ella. No tuvo tiempo de gritar porque rápidamente le puse el defensor electrónico en el cuello y le di una descarga de varios segundos, hasta que callo inconsciente. Se desplomo sobre mí. La apoye en la camilla de la primera habitación y le ate las manos con un precinto.

Tape su boca con una toallita que había en el lugar y le vende los ojos. Comencé a quitarle los zapatos negros, luego su pantalón del mismo color, tenia una bombacha rosa tipo tanga, que le quite y me guarde, luego de frotarla bien sobre sus genitales. De golpe se despertó e intento salir corriendo, la agarre y la arroje sobre la camilla nuevamente. Se movía sin parar un segundo, tratando de gritar y escaparse. Le di varias descargas en sus piernas que se les paralizaron durante un buen rato. Me subí sobre ella, corrí su delantal blanco, y le arranque los botones de su camisa blanca. Saque su corpiño, también rosa, y montado en ella comencé a lamer su cara, cuello, pechos, que eran grandes y un poco caídos, con pequeños pezones y una gran aureola.

Solamente quedaban en ella el delantal sobre los brazos y la camisa sin botones en igual forma. Continuaba moviéndose pero no podía hacer nada. Permanecí tocándola y lamiéndola durante unos segundos mas. Su zona genital tenia hecho un cavado, que cabía perfectamente dentro de su tanga. Eran ya las 15:16 hs. Me coloque un preservativo y apoyándola boca arriba en la camilla, entre intentos de gritos y lagrimas, entre en su vagina.

Entraba y salía de ella con suaves movimientos. Luego coloque mi pene entre sus pechos y comencé a masturbarme con ellos. Frotaba mi pene por sus pezones para luego continuar con la masturbación. A las 15:19 hs eyacule entre sus pechos. Me quite el condón y me limpie, colocando todo en una bolsa que guarde. La puse boca abajo en la camilla y empecé a ponerle una crema para prepararle el ano. Su zona anal era de color marroncito claro, con pocos vellos. Se movía de un lado al otro mientras le metía los dedos con crema en su ano. En un momento me dio una patada y me tiro contra la pared.

Entonces recibió una descarga eléctrica en su clítoris. Dio un pequeño sacudon y se calmo. En ese momento bruscamente se abre la puerta y entra una enfermera a la que reduje con una descarga sobre su pecho. La ate de pies y manos además de taparle los ojos y la boca, y continué lo que estaba haciendo. Directamente fui sobre su ano y comencé a penetrarlo, después de colocarme otro preservativo. Primero entro el glande con gran esfuerzo y luego el resto del pene. Ella se movía mucho, lo que me producía mas excitación al penetrarla.

Mientras la penetraba tiraba de su largo pelo rubio. Metía mis dedos en su vagina una y otra vez, acompañando las embestidas. La enfermera en el piso trataba en vano de soltarse. Su ano era tan estrecho que me daba un placer indescriptible. En unas de las embestidas al retroceder el pene salió un chorro pequeño de materia fecal, junto a sangre en abundancia, también se orino sobre la camilla. Al rato cambie de posición porque las manos atadas de ella me molestaban al penetrarla. Coloque mi brazo sobre su estomago y tire su cuerpo hacia abajo y levante su cola. En la posición de semi-perrito continué dentro de ella.

Sin llegar a eyacular retire mi pene de su ano. Ella seguía llorando. Eran las 15:25 hs. Me quite el condón y lo guarde. Lleve a la doctora al baño junto con la enfermera después de desatarle los pies a esta. Metí a la doctora en el baño debajo de la ducha que había y la deje ahí varios segundos, lavándola bien. Coloque a las dos boca abajo en el piso y les di a las dos varias descargas eléctricas sobre sus cuellos.

Ambas quedaron inconscientes. Corte los precintos de las dos, y los guarde. Arranque la ropa de la enfermera, dejándola semi desnuda y las coloque una sobre la otra en la posición del 69, asegurándome que quedaran cara-vagina en ambos lados. Me retire sacudiendo al pasar la camilla donde habíamos estado, que estaba sucia y mojada. Salí del consultorio caminando tranquilamente. Me quite el pañuelo y los guantes y los guarde. Luego salí del hospital sin toparme con nadie. Todo había ocurrido desde principio a fin sin decir una sola palabra Eran las 15:31 hs.