Tiene un marido paralizado desde su cintura para abajo debido a que borracho choco en la moto y casi se mata. Me atrevo a besarla en su cuello y resuello en sus oídos diciéndole que es una hembra exquisita y que necesita que la atiendan apasionada, estimulada y encendida de pasión, tenía un pene que desgarraba sus carnes después de tanto tiempo, pero ese dolor y ardor de su vagina la estimulaba valorándose como mujer.
Relato
Resultados de la consulta médica.
Me encuentro con Katia, una de las paciente del doctor y ella va acompañada de una madura dama de unos cuarenta años, después supe que tenía 42 años, tres hijos de 19, 14 y 7 años, era a pesar de su edad una mujer admirable por su físico desde la cintura ara abajo, un trasero que quitaba el habla, unas torres, sus piernas, que eran de admirarse y un talle de cintura para aplaudir.
Me presenta a Amanda su acompañante y le dice este es el muchacho que te he hablado y que no debes desaprovechar ahora que estas autorizada por tu enfermo marido. Acompáñanos me dice y me llevan a casa de Amanda, entremos por atrás dice esta así nadie se enterará, por un portón lateral entramos y nos refugiamos en un anexo donde hay dos piezas en una es bodega de alimentos y la otra de planchados y ropa limpia.
Te contaré me dice Katia que esta tiene un marido paralizado desde su cintura para abajo debido a que borracho choco en la moto y casi se mata, se salvó de milagro, esto hace ya casi los dos años…, Amanda lo ha cuidado y gracias a sus esfuerzos a logrado sobrevivir, él lo sabe y esta agradecido, los negocios se los lleva un hermano del cual eran socio por dinero no se afligen, claro que el patudo se lleva el 60%.
Bueno al hecho, esta maniática, por que se esta trastornando con sus locos y apetecidos pensamientos, a pesar que el le dice que se busque quien la satisfaga de sus aprensiones corporales y eróticas, esta no desea que hablen mal de ella y su familia. Aquí entras tú, le converse sobre tu poderío vehemente y gozador, lo reservado, prudente y discreto que eras, pero igual esta aun dice que no puede por que su familia si se entera puede despreciarla.
Aquí esta ahora convéncela tú, yo vigilo que nadie interrumpa. Comienzo a preguntar lo sucedido con el marido y como la afecta en su vida, me cuenta el accidente y me dice que ella es una sensual y apasionada mujer, que esta situación la ha llevado a enfermarse de los nervios y su genio es atroz, la acaricio consolándola dejándose ella abrazar y recorrer por mis manos sus caderas y trasero, me mira con unos ojos desequilibrados, pero no retrocede a mis caricias y menos cuando la atraco a mi cuerpo y ella siente que esta siendo agredida sexualmente por este macho, solo me mira como si estuviera sugestionada, alucinada y cautivada por mis ojos.
Me atrevo a besarla en su cuello y resuello en sus oídos diciéndole que es una hembra exquisita y que necesita que la atiendan apasionada, genitalmente complaciéndola, seduciendo sus encantos para maravillar a el macho que la seducirá y se maravillará con sus goces y placeres. Al escucharme me abraza llevando sus brazos a mi cuello y gimiendo exhala el aire contenido entregada totalmente me dice, no me hagas sufrir llevo mas de dos años sin probar macho alguno y mi útero me exige semen, desea ser llenado de semen al igual que mi cuerpo necesita ser meneado y agitado por un apareamiento dado por un macho espléndido e indomable, pero fino y amoroso. No me hagas sufrir… hazme tuya…, estoy excitada y perturbada por ser de un macho nuevamente.
No la deje continuar mire a Katia y esta entendió mi mensaje sin palabras y me indico unas frazadas, estas la acomode y tendí en ellas a Amanda obedeció sumisamente y nos tendimos en ellas…me permitió despojarla de su ropa, mientras la acariciaba y restregaba sus partes genitales, tendió sus brazos me atrapó y me recostó sobre su cuerpo excitada y respirando entre cortada besándome de vez en vez…, se abrió de piernas y me permite ubicarme entre ellas ya sin ropas y mi miembro potentemente erguido y rígido, dilatado, ancho y apuntando hacia arriba con solo la intención de ser situado en un encierro de carne ardiente que lo sobara y apretara en su camino dilatando la vagina, hacia la matriz de esta hembra…, Amanda solo gemía y lloriqueaba estimulada y encendida de pasión, tenía un pene que desgarraba sus carnes después de tanto tiempo, pero ese dolor y ardor de su vagina la estimulaba valorándose como mujer, ¡oh que macho mas encantador!..., la ocupaba como mujer, pero se preocupaba de que ella se deleitase al sentir placer, tenía un amante mas joven que su hijo mayor, pero un encanto de semental le daba placer y ella sentía llegar sus orgasmos entre gritos y suspiros al tiempo que el macho le inundaban su matriz con la esperma tibia que arrojaban como ríos en su vientre…., esto era tocar el cielo. Mas relajada le dice a su amiga que despache a su semental, pero que lo cite para la próxima semana donde ella podrá atenderlo en un cubil que prepararía para ellos dos. Total ya tenía permiso de su esposo.
A la semana siguiente en su tercer día fui citado. Claro que asistí entusiasmado, esta mujer de 42 años era de la edad de mi madre, eso me tenía excitado, estimulado y ardoroso por poseer nuevamente a esa dama, era de bonito cuerpo, un trasero que de admirar, sus piernas, que eran bien formadas, un talle de cintura para aplaudir., además su hijo mayor era de mi edad y le agregaba leña al fuego de la pasión por poseerla que tenía la edad de mi madre. Al llegar su casa iba a mil mi pene tieso, erecto, duro, firme, excitado, gordo como mi antebrazo de volumen, mis testículos dolían de lo estimulado que estaban, mi hambre ardiente por tener nuevamente ensartada a Amanda era desmedido, necesitaba descargarme en ella. Pero recordaba a quien me había entrenado en el deleite del trabajo amoroso hacia las mujeres, debía dar placer, satisfacción a la mujer poseída y no dolor.
Nuestro encuentro fue por ambos lados desesperada, ansiosa y enardecida en las caricias y los antojos por entregarnos el uno al otro, ella había dado a su marido doble ración de calmante y este estaba durmiendo feliz a mi llegada, sin enterarse de esta, Amanda había preparado un nido de amor en la pieza ya conocida del fondo de la casa con una buena colchoneta y a media penumbra para sentirnos cómodos.
A los diez minutos de estar en es casa ambos estábamos desnudos acariciándonos y nuestros cuerpos ardientes de entusiasmo, conciente en su entrega al otro con placer.
Como nos entusiasmábamos dos minutos mas tarde Amanda gemía y me sacudía al pensar en ser penetrada por ese monstruoso pene desarrollado que llegaba ansioso de satisfacerla y de descargarse en ella, sentía como sus carnes vaginales latían ansiosas, luego lo retira y empezó con sus manos a tocando mis partes íntimas cuando llego a mi parte mas humedad mi vagina, metió sus dedos y luego se acomodo inmediatamente para meter su lengua y hacerme una excelente mamada que creo que me provoco el primer orgasmo en Amanda, sin tenerla penetrada es que lo hacia tan rico, y este chico si que conocía su trabajo, luego empezó a tocarse su pene a mi lado y me ordeno chuparle su inmensa poderosa vara, con un poco de asco porque casi nunca lo hacia empecé a hacerlo ahí echada en la misma cama, al rato de la primera probada que le di y a medida que se lo iba chupando obligada por las circunstancias increíblemente me empezó a gustar, al comienzo me tomaba de mis cabellos para que se lo chupara pero al poco rato lo hacia sola, lo que vino después fue una de las cosas mas ricas que he hecho en toda mi vida, recuerda Amanda, odio admitirlo pero este chico era un campeón en el sexo: me volteo y me empezó a penetrar en la pose del perrito, su enorme pene me hizo sufrir y ver estrellas de nuevo al momento de introducirse extendía a mi máxima capacidad, casi partiéndose en dos a mi vagina, luego como estaba tan excitada comenzaba a gemir y gritar sin darme cuenta, estaba gritando de placer como una loca, mientras nos apareábamos como unos locos sin control. Realmente me gusto lo que me hizo Leo, quería seguir haciéndolo aunque me llamen puta… gozaba mucho con las penetraciones de mi nuevo marido y señor de mi cuerpo, empecé a sudar y gritar tantas veces como penetraciones tuve, estaba enloquecida entregándome a mi nuevo macho y este estaba ardiente por llenarme de su esperma, no podría olvidar estas experiencias eran mejores que las que me daba mi esposo claro esta y las recomendaría a mis amigas…
Me gira y rápidamente me introduce su miembro en mi rendija como grito con su entrada… Cinco minutos después Amanda era un desecho, su cuerpo encorvado, sus piernas moviéndose en el aire, sus caderas danzando, su boca gritaba y gritaba entusiasmada apareándose, hasta que entrega sus orgasmos no uno sino varios ella nunca se había sentido tan deliciosamente cubierta y siente en esos momentos la leche de su semental vaciándose en su matriz, esa tibia esperma la enloqueció diciéndole al oído a su nuevo marido, si dámela, si soy tuya, si préñame si deseas, desde ahora eres mi macho, marido y semental. ¡Ah…Oh…Mm!. Cuanta delicia…, se entrega relajada a sus brazos. Cuando el macho retira su pene de sus partes sexuales esta rebalza sus fluidos corriendo estos por sus piernas camino de las sabanas de la cama… ¡oh cuanto placer le habían dado!
Este muchacho era un astuto y sorprendente semental, era joven casi un niño como mis hijos, pero su experiencia era de un lobo astuto, como me exigía mis lamentaciones ante tan satisfactorias penetradas, era un poderoso macho, han transcurrido casi dos días y todavía mi vagina palpita con las penetradas de este juvenil macho. Lo citaría para la próxima semana.
Ha transcurrido un mes y mi juvenil amante Leo no ha venido espero que llegue hoy en la tarde como tengo programado. Por fin llega mi semental rápidamente lo traslado a nuestro nido de amor y en el nos acariciamos, luego nos desnudamos estoy esperanzada y ávida de su pene. Necesitaba de este un abrazo apasionado y un revolcón en la cama para apaciguarme, su educación y responsabilidad de su trabajo actuaron en contra y por cumplir con ellos me estaba dejándome desposeída y excitada añorando ser empotrada por su delicioso pene.
Me arroja sobre la cama con desesperación atravesada en ella, luego como un macho cabrío caliente se ubica sobre mi cuerpo, con las ansias de un caliente y erótico muchacho ubica su pene en mi entrada vaginal clavándome medio pene en mi vagina… me mira y al no ver reacción negativa de mi parte enfila su duro pene mas ancho que el que tenía mi marido en mi entrañas… me quejo al ser tan duramente tratada, pero no me niego a recibirlo, quería que me tratase bruscamente en nuestros apareamiento, necesitaba que ese muchacho me tratara duramente en nuestro apareamiento, y lo logra como me penetraba mi sexo, como me ensartaba su pene tratándome de clavarme contra el colchón. Yo mientras tanto solo gemía mientras el resollaba en mis oídos ante sus esfuerzos por aparearme dignamente, de pronto siento que se aceleran y se profundizan sus esfuerzos clavándome mas profundamente su miembro en mi vientre llegaba su clímax, ante esa perspectiva mi cuerpo responde con la llegada de mis orgasmos y entre resuellos del macho, gemidos y alaridos míos, llegamos a una deliciosa entrega sintiendo en el interior de mi útero las descargas de litros de semen arrojadas por el macho y mi útero se inflaba llenándose con esos torrentes de semen que este chico llenaba mi entrañas. Dios parecía que no terminaría nunca de vaciarse sus testículos y luego se relaja sobre mí que había cruzado mis piernas sobre su trasero para impedirlo salirse de mi vientre. Ahora lo liberé y al sacar su grueso miembro que tenía taponada mi vulva, suena como el destape de una botella al sacarlo y sentir ríos de semen resbalando por mis muslos, esa esperma se acumula manchando mi cama, había logrado mitigarme de un enardecido apareamiento deseado por mi cuerpo con locura, ese muchacho adolescente había aliviado a mi cuerpo de sus aberraciones sexuales convirtiéndome en su amante. Me miraba si había enojo en mi cara, pero no había placer y el lo nota, besándome y le correspondo con dulces besos diciéndole ahora ándate que nos pueden pillar y este sale de mi casa, mientras voy al baño y me ducho. Cuando estoy bajo la ducha recuerdo que estaba en mis fechas fértiles y este semental me había poseído sin protección…, Dios me habían embarazado… este chico me había fecundado a uno de mis óvulos…
Han transcurrido dos meses, mi médico me confirmó la noticia estoy en estado de gestación de un bebé… narré los hechos a mi marido el cual dignamente me dice… cuéntale a todos que por medio artificial un medico te fertilizó con uno de mi espermios en el laboratorio y no se habla mas del tema. Lo abracé le di las gracias y él me dice si continua visitándote ese potente espécimen, cuídate o nos vamos a llenar de hijos.
Estoy enardecida y frenética por mi descuido, una mujer madura como yo fecundada por un mozuelo…,pero sale en mi camino mi amiga Federica quien es un poco menor 40 años y tiene un problema parecido al mío, su marido un borrachín de primera no la ocupa como su mujer desde hace mas de un año, ella esta convulsionada y contraída por ser violada me dice, he salido dos noches bien provocativa a la calle con la espera que me violen y así descargarme de estas alocadas exaltaciones ardientes de sentirme penetrada por un hombre mi sexo lo reclama, pero nada me ha sucedido…, solo en un autobús fui manoseada y oprimida contra una barra mientras me recorrían mi colita y nada pasó…. Estoy loca me dice…
Tengo tu solución le digo, pero debes callar para siempre por el favor que te dispensaré… júramelo… ella me dice por lo que mas quieras te prometo mi silencio. Soy madre de dos jovencitas y pro ellas te lo prometo, bien todas sabíamos que tenía dos hijas de .13 y 11 años y la cité para un miércoles al igual que Leo… que pasó lo cuento después…