un fin de semana

Hola como recordaran mi nombre es Sandra y les relato lo que me paso un fin de semana con mi macho káiser, esto fue un sábado por la mañana que me encontraba descansando.



Me desperté como a las siete de la mañana del sábado; ese fin de semana seria un buen descanso ya que eran tres días sin trabajar y de gozar mi casa y a mi macho káiser, cuando me pare de la cama lo que hice fue meterme a dar un rico baño y salí a correr a un parque cercano junto a káiser, después de dos horas de correr y llegara casa un poco cansados bebimos agua ambos y me puse a bañar a káiser, termine de bañarlo y yo estaba casi toda mojada, así que decidí darme otro baño mientras mi macho káiser descansaba su baño, termine de bañarme y me metí a mi recamara, habita terminado de tender mi cama cuando sentí la presencia a tras de mi de káiser. No le tome importancia hasta que trato de montarme, lo detenía y trataba de calmar pero era imposible así que cuando pude correr al closet lo hice me metí en el y me quite la bata de baño que tenia puesta quedando desnuda frente a mi macho, se acerco ya con mas tranquilidad y comenzó a pasar su lengua por mi pucha, que rico sentí la caricia de su lengua pasando por mi pucha, esto hizo que me estremeciera de pies a cabeza y sin contenerlo de mi boca salio un hhhhaaaaa y casi enseguida le comencé a decir así papi, así no dejes de lamerme papi, sin poderme sentarme, disfrute su rica lengua ahí parada, hasta que llamaron a la puerta, como pude me puse un vestido encima y salí a la puerta par ver quien era; me sorprendí al ver a mi amiga karla que estaba en la puerta y me dijo pensé que estarías sola por eso vine ha hacerte compañía, mientras káiser estaba ya inquieto por haber interrumpido lo que estábamos comenzando ha hacer.



Ya estando ahí Karla no podía correrla así que hice que pasara y le dije que me diera unos minutos mientras me arreglaba, así lo hizo me espero en la sala y yo me metí a mi recamara seguida de káiser pero no lo deje entrar ya que si lo hacia no me dejaría hasta que no me cogiera, me puse mi tanguita y una minifaldita de mezclilla, brassier y mi blusa junto con un par de botas negras y le dije a Karla que me acompañara a comprar algo de comida, salimos de la casa, me la pase un tanto molesta por la interrupción, pero tenia a alguien con quien compartir una comida y una charla, cuando terminamos de comer ya en la tarde káiser estaba mas que impaciente notándolo Karla, ya que me dijo mira como te trata káiser, cree que eres su perra ve lo que quiere hacerte, mi respuesta fue si no le hagas caso esta loco por que paso una perra en celo y eso lo tiene así; esa fue la explicación que le di a Karla y como que lo creyó pero no del todo, ya que no dejaba de verme como si algo en mi me delatara, vimos tele un rato hasta que decidió irse, yo en mi interior agradecí que se fuera ya de mi casa, la salí a despedir y en cuanto entre y cerré la puerta káiser se me fue casi encima, lo detuve ya que me senté rápido para evitar que me tirara lo eche en la alfombra y le empecé a rascar el pecho y poco a poco me fui acercando a su verga que estaba a un en su funda muy despacio, para que no se enloqueciera, se la manosee muy suavemente hasta que fue apareciendo su verga y bien lubricada, sin dejar de rascarle su pecho me agache con mucha calma y me lo metí a la boca, y lo empecé a mamar, mientras iba creciendo mas y mas, al rato me puse de rodillas sobre el y haciendo a un lado mi tanguita poco a poco me la fui metiendo; tratando de controlarlo y calmarlo para que no se levantara, la introduje despacio y la fui metiendo y sacando hasta estar completamente excitada, sentía su bola que crecía y chocaba en los labios de mi pucha en eso le comencé a decir no te muevas káiser quédate quietecito que me estoy viniendo, por favor -no te muevas, cuando de mi boca escapo un hhhaaaaa- sentí como mi cuerpo se estremecía, y un escalofrió se adueño de mi, acababa de tener un riquísimo orgasmo, Ya era hora de darle rienda a mis instintos perrunos, me quite la faldita y mi tanga, quedando solo con mi blusa de algodón color verde, me acerque a mi "macho" y le empecé a acariciar el lomo poco a poco bajando nuevamente hasta su vientre, el ya sabia mis intenciones se tiro de espaldas al suelo, acariciando su verga que estaba comenzando a meterse a su funda, y ese pedazo de carne que me estaba volviendo loca lo comencé a mamar esa rica sensación de sentirla en mi boca me estaba matando de placer mientras preparaba mi pucha con mis dedos para entregarme toda a mi "macho" creo que se canso de estar acostado en el suelo y se levanto, como diciendo es hora de cogerte, yo ya estaba preparada para que me cogiera, poniéndome en cuatro patas y con mi culo bien levantado y mis piernas abiertas para que le fuera mas cómodo, me monto con algo de desesperación he intentaba meterme la verga sin mucho éxito; en esos momentos pensé que me hubiera gustado que me diera algunas lamidas por mi jugosa pucha pero no fue así, el solo quería metérmela, lo ayude un poco y sentí como me envestía con una rapidez increíble sacando gemidos de mi y comencé a decirle “haaaaay que vergota tienes papi, métemela todaaaaaa asiiiii, mmmm que rico coges”, al poco rato se bajo, volviéndoseme a subir y me metiéndomela nuevamente, pero esta vez ya no necesito de mi ayuda ya que no tardo tanto como la primera vez, no se que tenia, ya que se volvió a bajar, así pasaron esas dos montadas cuando de a la tercera vez sentí que estaba haciendo fuerza para meterme su bola, estaba yo ya dispuesta a todo y le ayude un poco tratando de abrirme y dilatar mi conchita para darle paso, hasta que por fin sentí como mis caderas se abrían para darle paso, todo mi cuerpo se estremeció y comencé a decirle “mmmm cojemeeee, metemela todaaaaaa esa rica verga papi haaaaa me pones locaaaaaa sigueeee cabrón sigueeeeee”, el ya no pudo bombearme en esos momentos ya que me encontraba totalmente abotonada por mi pucha la mas rica sensación empecé a a tener cuando tratando de pasar su pata por mi encima se movía y me friccionaba mi punto “G”, hasta que se acomodo casi me mata de las sensaciones tan ricas que tenia, no les miento porque las que han experimentado esta relación saben de que estoy hablando, cuando el logro bajar y mi pucha se amoldo por completo a su bola y casi enseguida vino lo mejor, el placer intenso que se puede sentir, siento como late su rica verga a cada chorro de lechita que me comenzó a inundar mi pucha esto me provoco que yo diera y gritos de placer “ahhhhhhhhhhhhh siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii”, sentí como su caliente leche me llegara hasta mi estomago llenándome cada vez mas y mi pucha dejaba escapar algunas gotas de esa rica leche cayendo al piso, quería yo en esos momentos que hiciera su movimiento de meter y sacar de nuevo su verga era mucho el placer que estaba recibiendo en esos momentos y le decía a káiser, tu eres mi macho ¡No me la saques káiser por favor! ¡Ahhhhahhhahhhahahahahaha, sigue, káiser, sigue dándole leche a tu perrita, dame más káiser que soy tu puta y mientras gritaba como desquiciada y tenía más orgasmos y gozaba más que nunca, después de esa abotonada con káiser tardamos en despegarnos no supe cuanto tiempo ya que cuando uno goza no cuenta los minutos pero si se va el tiempo como agua, cuando me di cuenta que se separo de mi káiser fue por el ruido que había escuchado la primera vez y que fue como un “plof”.

Después de que káiser me saco su verga de mi pucha se sentó junto a mi, yo me quede como desmayada en el piso de la sala y escurriendo leche de mi pucha. Me repuse un poco de mis orgasmos y vi que káiser se lamía la verga, fue cuando me acerqué a él y le ayudé a limpiarla con mi boca por casi 10 minutos mamando esa ricura de verga que ma había hecho gozar como nunca lo había hecho. Ya medio repuesta, káiser tuvo una nueva erección y su verga estaba enorme y creo mas que antes yo le di lengua; ganándome de nuevo la calentura. Ahora me fui al sillón de la sala y káiser me siguió hasta donde estaba y se me monto una vez mas, yo le dije "ya káiser ya" pero no me dejaba, así que me tomó una vez mas por la cintura y dije bueno una mas y ya traté de meter la verga de káiser en mi pucha, pero como estaba un poco adolorida pensé ¿y si me lo metes en mi culo?

Y pensando esto abrí las nalgas y le ofrecí mi ano a mi “macho”, pero que tenia que bajar mis caderas para que pudiera meterme su verga. Así lo hice, y deje mi culo a su disposición; me alcanzó con su verga y me lo metió un poco primero y después mas, yo sentí como media verga me entrar en el culo.



Ay despacio si despacio káiser, ay me duele y le grite ya sácame tu verga káiser pero no me entendía y termino de meter lo que le faltaba de su verga, yo grité un poco más fuerte cuando sentí como entro completa la verga de káiser aaaaaaaayyyyyyyyyyyyyyyyyyy ya saca tu verga sácalaaaaaaaaa, Me duele mi culo me duele, no ya no quiero káiser por favor sácala, a él no le importaba, y comencé a sentir que mi espalda se rompía en dos y que mis nalgas las abrían con un hierro caliente y era él, “mi macho”, en una de sus embestidas embestida me termino por meter toda su verga y me hizo irme casi de boca y tener la cara pegada al sillón con mi culo al aire pero mas a favor del “mi macho” que me tenia bien sujeta de las caderas y metía mas y mas verga dentro de mi culo, ya después de casi 10 minutos el dolor pasó y solo quedó mi placer con káiser y su verga en mi culo, hasta cambio mi gemido de un haaaaaaaaaaaaayyyyyyyyyyyyyyy a un si; le comencé a decir toma mi culo méteme tu rica verga por mi culo, solo yo podía escuchar lo que decía y ni lo podía entender pero seguía diciéndole a káiser si papito cojéeme mi culo mas dame tu verga completa y él movía su cuerpo con el mío mas -pedía- mas verga dentro de mi, dame mas y káiser seguía con la verga dura y caliente en mi culo y yo levantando mis nalgas para que fuera la perra de “mi macho”

Sigue, dame en el culooooo, si mi papi cogete a tu perrita dame mas, si te gusta verdad cabrón méteme tu verga dentro de m, a tu perra le gusta sentir tu verga dentro, si, aaaaaaaahhhhhhhh

Hasta que una vez mas él metió su bola dentro de mi culo sentí que mi mundo se me acababa, un nuevo orgasmo atacaba mi cuerpo, atacaba mi culo, atacabaaaaaaaaaaa siiiiiiiiiiiiiiiiii, mi vista se me nubló y mis sentidos se perdieron por el espacio y tenia a mi macho casi echado en mi espalda ya casi sin fuerzas pero con la verga metida en mi culo una cadena de 3 a 4 venidas se me juntaron una tras de otra y káiser me volvió a dar su leche, pero ahora en mi culo, casi me muero del placer de ser cogida por un macho como káiser en mi culo. Es como tocar el cielo con las manos es delicioso; después de esto casi me dormí en el sillón con mi macho a la espalda, ya eran como las doce de la noche cuando trate de pararme para ir al baño y káiser aun tenia su verga en mi culo, y de pronto en esos momentos el pudo zafarse de mi.



En ese momento me vine una vez más, menos fuerte esta vez, y vi salir por mis piernas unas liquido como un hilito caliente en mis piernas. Me quede en el sillón como 20 minutos después que me saco la verga mi macho, descansando unos minutos, me incorpore y empecé a buscar mi ropa, caminando casi con las piernas abiertas y con mi culo escurriendo así como mi pucha la leche que me había dejado mi macho, yo estaba aun caliente y con ganas de entrar al baño por tanta leche de mi macho continué buscando mi ropa hasta que la en contre a espaldas del sillón, la tome y me fui a mi recamara, estaba tan cansada que solo me tire en la cama así como estaba después de salir del baño, aun con la leche saliendo de mis dos hoyos. Sin más me dormí, y ya como a las dos de la mañana que trate de taparme káiser mi buen macho estaba cuidando a su perra echado a un lado mió, me acurruque a un lado de mi macho tapándolo también y me seguí dormida, cuando en la mañana del sábado me levante para ir al baño estaba toda pegajosa y vi como me había chorreado su leche hasta mojar parte de mi cama, después de haber entrado al baño y asearme mire a mi káiser y le dije no se quien esta mas feliz si tu por tener a tu perra que te complace con sexo o a mi por tener a un lindo y adorable macho como tu. Ese domingo también me la pase muy rico con mi macho cogiendo gran parte de la tarde y no se diga el lunes que estuvimos casi toda la mañana cogiendo y yo gustosa por entregarme a mi macho y que me hiciera suya las veces que el quisiera, bueno así es como me la pase ese fin de semana con mi macho espero y les guste y me gustaría recibir comentarios de todas mis amiguitas que comparten los mismos gustos que yo les dejo mi correo, no sin antes decirles que pronto tendrán noticias mías de cómo me cogieron seis perros en una tarde de sábado en la casa de mi tío. sandraloyo@hotmail.com